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Si estás pensando en reformar tu cuarto de baño seguro que querrás darle un lugar especial a la ducha. Contar con una ducha cómoda, moderna, accesible y decorativa es una prioridad y para lograrlo es muy importante saber elegir el plato de ducha. Hoy analizamos todas las claves que debes tener en cuenta para decidir con conocimiento de causa: el material, la forma, el diseño y los acabados. ¡Toma nota!
© PorcelanosaUn elemento imprescindible
Hoy la ducha no es una opción. Es un elemento esencial que no puede faltar en los baños modernos, ya que resulta más cómoda y accesible que la bañera que siempre estaba presente en los cuartos de baño de antaño. Una ducha ofrece muchas ventajas de las que no queremos prescindir en la actualidad.
Para empezar, la ducha mejora la accesibilidad frente a la bañera, lo que es muy importante si en casa hay personas mayores que podrán entrar y salir a la ducha con mayor facilidad. Además, aprovecha mejor el espacio ya que se requiere menos hueco que para instalar una bañera. Por las prisas de cada día y la funcionalidad, normalmente preferimos ducharnos que darnos un baño y, además, con la ducha se ahorra agua por lo que es más sostenible.
© McBathApuesta por el diseño
Una ducha no solo tiene que ser funcional. También ha de contribuir a elevar el diseño del cuarto de baño, para poder lograr un cuarto de baño original y único. Lejos de recurrir siempre al blanco tradicional, hoy es posible elegir platos de ducha diferentes, como este de color rosa salmón. Es un plato de resina que encuentras disponible en una gran variedad de colores y acabados. La clave está en optar por productos de calidad que resulten prácticos, pero que también derrochen estilo y originalidad. El verde de las paredes y del suelo es el color perfecto para realzar la belleza del plato de ducha.
© DrenchA ras de suelo
Cuando el objetivo es crear un espacio de baño más seguro (y también decorativo) los platos de ducha a ras de suelo son una necesidad básica. Puede que, en principio, no te parezca una característica tan relevante, pero sí lo es con el tiempo. Los platos a ras de suelo ofrecen un acceso más fácil y cómodo, en especial para las personas mayores que no encuentran ninguna barrera ni obstáculo a la hora de entrar y salir de la ducha. Eso aumenta la seguridad, ya que evita que se puedan tropezar y caer. Y no solo eso, sino que el resultado es más elegante y decorativo.
Para conseguir que tu plato de ducha quede a ras de suelo tienes diferentes opciones: puedes encargar una ducha de obra, o puedes optar por un plato de ducha extraplano (son los que tienen un grosor de unos 2 o 3 cm). Estos tienen la ventaja de ser una alternativa más fácil de llevar a la práctica, y también más económica, ya que no requieren hacer una obra completa.
© Leroy MerlinTen en cuenta los metros cuadrados disponibles
El tamaño del cuarto de baño es un factor esencial a tener en cuenta a la hora de elegir el plato de ducha más adecuado. Aunque nos gustan las duchas amplias y espaciosas, es importante que su tamaño se adecúe al del baño, ya que debe quedar espacio suficiente para usar cómodamente la zona del lavabo o del inodoro. Lo bueno es que tenemos a nuestro alcance una gran variedad de tamaños y formas de platos de ducha. Hay platos estándar, platos a medida y platos de obra. Los platos estándar son los más económicos, mientras que los platos a medida se pueden personalizar en cuanto al tamaño o la forma, e incluso se pueden adaptar a columnas, pilares o salientes.
© McBathLa forma es importante
Otro aspecto que suele estar relacionado con las dimensiones del baño es la forma del plato de ducha. Si lo ideal es elegir un plato rectangular, que proporcione el espacio suficiente para ducharnos cómodamente, esto no siempre es posible. En los cuartos de baño más pequeños se suele elegir un plato de ducha cuadrado, cuyas medidas estándar van desde 60x60 cm hasta 100x100 cm.
Siempre que los metros cuadrados lo permitan es preferible optar por un plato rectangular, que son los más habituales. Esto es porque en muchos cuartos de baño cuando se cambia la bañera por la ducha, se elige un plato de formato rectangular, acorde a la forma de la antigua bañera. En ocasiones se elige un plato de la misma medida que tenía la bañera. Los platos de ducha rectangulares más comunes miden 80X100 cm o también 80X120 cm.
© DrenchEl poder de la curva
Si tu cuarto de baño es muy pequeño o se trata de un aseo de cortesía, por ejemplo, lo que necesitas es un plato de ducha capaz de adaptarse a la falta de espacio. En estos casos los platos de ducha curvos, también llamados de cuarto de círculo, son los más funcionales. A pesar de que se trata de una alternativa menos demandada, quizás por una cuestión decorativa o de diseño, resultan prácticos y roban poco espacio a la zona del lavabo. Suelen tener un radio de 50 cm. y las medidas más habituales son los 80 x 80 cm.
© Leroy MerlinCerámica, un material de siempre
Los platos de ducha de cerámica son una opción asequible que está probada de sobra, ya que es el material más tradicional para este tipo de elementos. El gres esmaltado es resistente y duradero. Soporta la humedad, el uso continuado y los cambios de temperatura, aunque es sensible a los golpes y al rayado. Como ventajas, además de las ya mencionadas, podemos decir que se mantienen en perfecto estado durante mucho tiempo, sin amarillear ni perder lustre. Soportan la acción de los limpiadores habituales y de los propductos químicos que se suelen utilizar en su mantenimiento. Puedes elegir entre una gran variedad de medidas, colores y formas.
© TodobañoDe resina y carga mineral
Este material, producido a partir de un compuesto de resinas y mármol, es una de las opciones más elegidas hoy día, ya que hace gala de interesantes ventajas. Para empezar los platos de resina son muy resistentes, especialmente a los impactos y al rayado. Además, son extraplanos, ya que tener unos 3 cm de grosor, por lo que pueden instalarse a ras de suelo. Esta característica, además de aportar seguridad, resulta muy estilosa y decorativa. Los encuentras disponibles en un gran abanico de medidas y también en muchos colores y acabados diferentes. Son antibacterianos y antideslizantes.
© PorcelanosaLa belleza de la piedra natural
El mármol, el granito, la pizarra... La piedra natural, sea cual sea, nunca pasa de moda ya que hace gala de una belleza especial, auténtica y única. Además de ofrecer buenas prestaciones, ya que es resistente y capaz de mantenerse inalterable con el paso del tiempo, soporta menos los golpes que los platos de resina on carga mineral. Por otro lado, encuentras platos de piedra con un grosor de tan solo 2 cm, perfectos para instalar a ras de suelo, y se limpian muy fácilmente. Elegir un plato de ducha de piedra natural, acorde al resto de revestimientos del espacio, es una gran idea.
© Leroy MerlinAcrílicos, buena relación calidad-precio
Los platos de ducha acrílicos son una alternativa bastante común, a pesar de ser la opción menos resistente de las que hemos comentado. Suelen estar fabricados con fibra de vidrio o poliuretano (de peor calidad que los primeros) y después ir revestidos por una capa exterior acrílica. Como ventaja podemos decir que resultan ligeros y fáciles de instalar, y bastante resistentes a los golpes. Sin embargo, se encuentran solo en acabado blanco brillante. Si esto no supone un problema para ti, un plato acrílico puede ser una gran alternativa cuando decidas, por ejemplo, cambiar la bañera por una ducha, ya que presenta la mejor relación calidad-precio. Merece la pena tenerlo en cuenta.
