Dos acabados de tendencia -madera de nogal y negro- que se llevan muy bien, logrando una estética sobria y elegante. Así se diseña esta cocina de generosas dimensiones -30 m2- que pertenece a una vivienda ubicada en el centro de Bilbao. Con un frente de muebles altos, el lineal de trabajo, la isla con mesa adosada y un rincón de culto al vino, ¡no le falta nada!
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Con acceso a través de un cerramiento de cristal
En pleno centro de Bilbao, el estudio de cocinas e interiorismo Doimo Bilbao (www.doimobilbao.es) se ha encargado de reformar íntegramente este piso para adaptarlo a los gustos y necesidades de sus nuevos propietarios, una pareja apasionada del mundo del vino. "Pese a que sus dueños no residen a tiempo completo en la ciudad, estos tenían claro que su cocina, de unos 30 metros cuadrados, debía ocupar un lugar central en el día a día de su hogar. Por ello, este espacio se ha concebido como un punto de encuentro primordial donde cotidianidad, estética y funcionalidad se fusionan de manera armónica", señalan los responsables del proyecto. Han colaborado la empresa Martín Deco para la ejecución de la obra y la interiorista Macarena Barcia.
Con puertas de herrería también en negro
El acceso a la cocina es a través de unas elegantes puertas de herrería confeccionadas a medida, que no solo aportan carácter al ambiente, sino que permiten aislar la estancia sin perder la continuidad visual con el resto del hogar. "Gracias a estas puertas, la luz natural fluye con libertad, realzando la calidez de los materiales escogidos y agregando un toque de privacidad para el momento que pueda ser necesario", explican desde Doimo Bilbao. El perfil negro encaja con los elementos en el mismo color que se repiten en el diseño del mobiliario.
El diseño de la cocina
En este caso, el diseño gira en torno a una combinación cromática sofisticada: madera de nogal y color negro. El mobiliario principal está realizado en laminado Synchroface de Doimo en Madera Nogal, con un efecto veta continua entre muebles. El negro en las encimeras, antepecho y vitrinas se repite también en accesorios decorativos como lamparas, focos, tiradores y las sillas del office. Todos esos elemento en negro refuerzan el carácter elegante y contemporáneo del espacio. Aquí se aprecia cómo la mesa de comedor se adosa a la isla y crea un espacio acogedor y funcional para el día a día.
Una distribución optimizada
La isla central era el elemento más deseado por los propietarios de la vivienda. A través de ella se organiza el espacio. De forma rectangular, en ella hay espacio de trabajo, de almacenaje y la zona de cocción con una placa con extractor integrado de BORA. Al cocinar, se mira hacia la zona contigua con una sensación de amplitud y continuidad. El sistema de extracción de aire integrado evita la necesidad de instalar una campana de techo convencional o muebles altos en una zona central de la cocina. "Los humos y olores se absorben directamente desde el momento de su creación, antes de que lleguen a colarse en el ambiente. Esto nos permite una estética más limpia y despejada", explican los expertos.
La zona de lavado se resuelve con un frente adosado a la pared de muebles altos y bajos. En un extremo, un diseño de módulos en columna que integra los electrodomésticos. Y falta un rincón de bar, dedicado al vino, una de las pasiones de los propietarios, enfrente. Electrodomésticos de Siemens.
Una encimera texturizada
La encimera Sirius de Dekton aporta un acabado texturizado. "Su efecto abujardado evoca la belleza de una imponente piedra natural envejecida", explican desde Doimo Bilbao. En la isla central el diseño regruesa el canto hasta los cuatro centímetros para un efecto de mayor robustez. En la zona del fondo, la de lavado, la encimera se eleva por el frontal entre los muebles inferiores y superiores. La iluminación indirecta de este frente potencia la rugosidad del material.
Con vitrinas de cristal acanalado sobre la zona de lavado
El mobiliario y las zonas de trabajo han sido distribuidos estratégicamente para optimizar los desplazamientos innecesarios entre las zonas de frío, la zona de aguas y la placa de cocción. Esta imagen muestra cómo queda la placa de cocción frente al fregadero. Sobre este, los muebles en madera dejan paso a módulos altos con vitrinas acanaladas. La grifería en negro de la firma Veravent se funde visualmente con la encimera.
Frente de desayuno y almacenaje
Esta imagen nos acerca al diseño del frente, todo en madera que se diseña en uno de los extremos. "Diseñamos un espacio exclusivo para el desayuno, con zona de frío totalmente oculta", indican los responsables del proyecto. Esta composición alberga, de derecha a izquierda, una columna con un congelador de suelo a techo; almacenamiento adicional y horno perfectamente integrado en columna; y un nicho central que funciona como desayunador. Este módulo cuenta iluminación propia y tomas eléctricas para pequeños electrodomésticos. El lugar perfecto para la preparación de los desayunos diarios. Al otro lado, más espacio de almacenaje, con microondas y calientaplatos integrados en una misma columna y frigorífico.
Una base neutra pero con mucha textura
Esta toma muestra cómo se resuelve el espacio al lado contrario del frente con el desayunador. El suelo y las paredes lucen un efecto similar de aguas en tono neutro. Textura y luminosidad a partes iguales. Destaca también el techo con molduras rectilíneas que crean un efecto de cuadrícula en blanco, con focos empotrados en color negro. En la ventana, una cortina veneciana de lamas. Y al fondo, el rincón dedicado a la preparación y degustación del vino.
Un rincón para el arte del vino
Se trata de un módulo diseñado especialmente para esta cocina. En él se homenajea al vino. ¡Una petición imprescindible de los dueños de la casa! Aquí se incluye una vinoteca Siemens con capacidad para hasta 44 botellas, control de temperaturas y cristal protector para asegurar un correcto envejecimiento del vino. Además, zona de apoyo para preparar una copa y compartimentos específicos para organizar copas y botellas.La lámpara de sobremesa es la icónica Myfair de Vibia. Los jarrones artesanales son de Rina Menardi.