Los libros son para muchos verdaderos tesoros. Por eso, si los compras, de forma habitual, incluso compulsivamente, los acumulas y, aunque tienes intención de leerlos, nunca consigues reducir la pila de ‘por leer’, tú también formas parte del fenómeno ‘tsundoku’.
Lejos de preguntarnos los motivos que nos llevan a dejar obras sin leer, que van desde no tengo tiempo suficiente hasta el gran número de novedades que se publican, fijamos la atención en la forma de organizarlas en casa. Descubre en qué consiste esta tendencia y cómo puedes convivir con ella, poniendo algo de orden. En esta propuesta, las dos estanterías Hypostila de BD Barcelona contribuyen a la organización del espacio, sin perder estilo.

Qué es y de dónde viene
El término 'tsundoku' no es nuevo, tiene su origen en Japón en el siglo XIX. Se entiende como el fenómeno de acumular libros por el placer de tenerlos, sin llegar a leerlos nunca. Eso sí, cuando los compras tienes pensado hacerlo. Lejos de ser una virtud, es más bien un defecto, ya que abarrotas la casa y dejas una tarea a medias. Sin embargo, aquí no lo entendemos como tal. El reto es hacer que entren en la misma ecuación: exceso y orden. Para que de esta forma, reine la armonía visual y no los tengas desperdigados por todos los rincones. La estantería de esta propuesta de Sofology es un buen ejemplo de organización.

El placer de atesorar
No hay nada malo en acumular libros, lo malo es tener 'ocupada' tu casa y que se amontonen sin orden. Decía Umberto Eco, que atesoraba 50.000 ejemplares, que “es una tontería pensar que tienes que leer todos los libros que compras, así como es una tontería criticar a quienes compran más libros de los que jamás podrán leer. Sería como decir que debes usar todos los cubiertos, vasos, destornilladores o brocas que compraste antes de comprar nuevos. Hay cosas en la vida que necesitamos tener en abundancia, aunque solo usemos una pequeña porción”.
Nosotros nos quedamos tanto con la satisfacción de adquirir una obra como con la de saber dónde está, por si en algún momento queremos disfrutarla. En esta propuesta de Ercol la librería con puertas de cristal los mantienen, además, a salvo del polvo y otros peligros.

Una tendencia que da estilo a tu casa
Está claro que los libros son tendencia de decoración este 2025. Los libros te ayudarán a dar personalidad a tus estancias y a lograr un efecto único y original. Así, nos encontramos con los 'coffe table books', ediciones bonitas con tapa dura que adornan las mesas bajas de los salones y con las llamadas 'librerías abarrotadas'. Como su propio nombre indica, se trata de llenar tu estantería de ejemplares, esculturas y adornos, de manera que apenas quede hueco libre. Esta particular moda, que cada vez cuenta con más seguidores, convierte a la librería en la reina del salón o del dormitorio.
Además, el ‘tsundoku’ encaja muy bien con una de las estéticas del momento: el maximalismo. De esta manera, la estantería se convertirá en la pieza principal de la estancia, como ocurre en esta propuesta de Luzio Studio. Se trata de hacer que la acumulación de libros se convierta en un plus decorativo, además de personal.

En todas las estancias
Dado el exceso de ejemplares que tienes que organizar, no debes dar por perdido ningún rincón ni ninguna habitación de la casa. No te limites solo al salón o al comedor. Sé creativa y busca hueco en el baño, el dormitorio, la cocina o una zona de paso. Piensa en un pasillo, donde una librería estrecha puede configurar una biblioteca espectacular, sin restar metros a otras estancias de la vivienda. O en una estantería a medida en un hueco de la habitación, como esta diseñada por el estudio Punto M al lado de la puerta.

Primer paso hacia el orden: revisión
Antes de ponerte a guardar, debes hacer revisión y comprobar tanto el número como el estado. Para ello, empieza por vaciar tus estanterías. Aprovecha este momento para limpiarlas bien, un mantenimiento que, al menos, debes realizar cada seis meses. Hazlo según el material. Así, para las de madera, como la de esta propuesta de Dinesen, usa un producto que nutra también.
Deja todos los libros en el suelo, comprueba si hay ejemplares deteriorados y que no tienes obras duplicadas, algo que suele pasar con más frecuencia de la que imaginas. De esta manera, sabrás el número de libros a los que te enfrentas y tendrás una visión clara del espacio disponible. Sabemos que es duro, pero quizás sea el momento de dejar marchar a esos que ni sabías que tenías escondidos en la librería. En la imagen, propuesta de Dinesen.

Establece diferencias
A la hora de organizar los libros, si eres un 'tsundoku' es preciso que lleves a cabo un paso más que el resto. Debes colocar en diferentes lugares o en el mismo, pero de forma reconocible, los libros que has leído de aquellos que aún no has empezado. Este primer nivel te resultará no solo práctico para mantener el orden en casa, sino también hará que te enfrentes a la (cruda) realidad. Además, así podrás establecer un orden de lectura, según la fecha de adquisición, por ejemplo.
Puedes colocar en la estantería, los ejemplares que ya has disfrutado y ubicar el resto en un rincón o en otro mueble. También puedes poner unos en vertical y otros en horizontal, lo que te ayudará a conocer la 'situación' de un vistazo. Es importante que diseñes, eso sí, una composición equilibrada, como la que tiene la librería de esta propuesta de K.A. International.

Formas de organización
Partamos de la idea de que no hay una organización mejor que otra. La 'buena' es aquella que mejor se adapte a tu forma de vida, el espacio disponible y tus hábitos de lectura. Puedes ordenar los libros por orden alfabético, temática o categorías, pero también por color, por tamaño o por preferencias. Se trata de que se ajuste a ti y tú sepas dónde encontrar el ejemplar que quieres en ese momento. Por eso, si no lees habitualmente libros de historia, no organices por temática porque tendrás una zona llena y otra con apenas ejemplares.
Tampoco busques la perfección, ya que no existe ni la necesitamos. Establece el equilibrio visual, como el que tiene la estantería de esta propuesta de Gisela Graham, para que no haya partes abarrotadas y otras vacías. Sé atrevida y juega con los 'libros joya' para dar una pincelada de estilo que rompa la norma.

Librerías a tu medida
A la hora de organizar todos tus ejemplares, incluso si el número es elevado, la librería es nuestra mejor aliada. La clave para que dé respuesta a nuestras necesidades de orden, comodidad y estilo se encuentra tanto en su distribución como en el diseño elegido. Evidentemente, debe adaptarse al espacio: ir de pared a pared, como esta de Tegar, u ocupar solo una zona; subir al techo o jugar con la media altura; ser abierta o combinar puertas o cristales... De esta manera, rentabilizarás mejor sus dimensiones y los metros de tu casa.

Otras maneras de rentabilizar el espacio
Aprovecha todos los huecos disponibles para lograr la organización que necesitas. Puedes hacer montañas no muy altas y dejarlas en el suelo de un rincón del comedor, colocar ejemplares a los lados del sofá y que sirvan de mesita auxiliar, en la bandeja inferior de la mesa de centro, en el alféizar de la ventana del dormitorio, en un mueble bajo, como el de esta propuesta de Vitra, que no recargue y tenga capacidad, alguna baldas en la zona del office... La imaginación es clave cuando los metros no se pueden estirar.

Y Marie Kondo, ¿qué dice al respecto?
Cuando hablamos de orden no podemos pasar por alto la opinión de Marie Kondo al respecto. Evidentemente la acumulación, aunque sea por placer, no entra dentro de las reglas de esta gurú de la organización, donde reina la sobriedad. En lo que a libros se refiere, su número ideal son 30. Lo que supone que todos (o casi) debemos empezar a hacer limpieza.
¿La forma de saber cuál se quedan? Cogerlos para saber si te hacen feliz y merecen seguir contigo. Después, recomienda colocarlos en un mismo lugar, la librería Billy de IKEA puede ser una buena ubicación, y después utilizar el sistema vertical que emplea en el resto de la casa.