10 claves para crear un dormitorio moderno, acogedor y con mucha personalidad

© BoConcept

1. Una cama sencilla, pero imponente

Cuando pensamos en un dormitorio moderno, es fácil pensar en camas de líneas rectas y depuradas como esta, de BoConcept, pero ¡no son la única opción! Las formas redondeadas, los cabeceros tapizados y los diseños XL también encajan a la perfección en un espacio contemporáneo. 

Quizás sea más fácil descartar lo que no funciona: un cabecero con ornamentos barrocos, tapicerías estridentes, maderas oscuras… Y eso sí: mantén el espacio lo más despejado posible.

2. Unas mesillas que se ajusten a una estética contemporánea

Las mesillas ideales para un dormitorio moderno son aquellas suspendidas o sobre soportes visualmente ligeros. Además, se lleva mucho combinar dos modelos distintos a cada lado de la cama, pero con un nexo que las unifique, ya sea en el estilo, el color o el material. 

Son el elemento perfecto para llevar la belleza y elegancia de las piedras naturales a nuestro dormitorio. Y como prueba, esta mesilla de Lago, con estructura de vidrio y sobre efecto mármol.

3. Piezas que suman

Incorporar piezas de diseño en el dormitorio es una forma fantástica de darle un toque único y sofisticado al espacio. Desde una lámpara icónica que se convierte en el centro de atención, hasta una butaca de diseñador (como la silla Porta Volta del estudio suizo de arquitectura Herzog & de Meuron para Molteni, que completa la decoración de este dormitorio), que añade lujo y confort, estos pequeños detalles hacen toda la diferencia. 

4. Obras de arte

Son esenciales para añadir carácter y personalidad al espacio. En un dormitorio moderno, elige obras de arte contemporáneas que se alineen con la paleta de colores del ambiente. Cuadros abstractos, fotografías en blanco y negro, ilustraciones minimalistas… 

¿Y lo bien que quedaría ese cuadro sobre la cama de Poliform? Puedes poner una pieza grande como foco visual o una composición de obras más pequeñas.

5. Colores neutros

Opta por una paleta de colores neutros como blanco, gris, beis o tierra. Los tonos suaves crean un ambiente relajante y fresco, propio del estilo moderno, pero para evitar que el conjunto quede monótono, es importante jugar con diversas texturas que aporten profundidad e interés visual. 

Un excelente ejemplo es este proyecto de Alberto Aranda, donde la combinación de tonos neutros se complementa con materiales y acabados que enriquecen el ambiente.

6. Paredes con carácter 

Para sumar un plus de modernidad en el dormitorio, nada como decorar la pared del cabecero con revestimientos que añadan textura y personalidad. 

Opciones excelentes son los papeles pintados con patrones geométricos o efecto textil, las molduras 3D instaladas a modo de zócalo, los materiales que conectan con la naturaleza, como la palillería de madera o acabados en piedra natural… 

Si buscas un toque aún más exclusivo, el modelo Faux de ARTE, una rafia tejida que forma un patrón de cuadros, que aporta textura, además de sofisticación y calidez.

7. Diseños funcionales

En un dormitorio moderno, los muebles no solo deben verse bien, sino también aportar soluciones prácticas. Un ejemplo es este cabecero de Uecko, que va más allá de lo decorativo e incorpora una mesa de estudio en su estructura. De este modo, un solo mueble cumple dos funciones y permite ganar una zona de trabajo.

8. Un dormitorio tipo suite

Otra seña de identidad de los dormitorios modernos es que cuentan con una zona de vestidor, ya sea en una estancia contigua, con un diseño abierto o cerrado, o dentro del mismo espacio, como en este caso, en el que se ha instalado una solución visualmente ligera de la firma Giessegi. 

También cada vez es más frecuente es integrar un cuarto de baño. Para lograrlo se utilizan desde paneles de vidrio o puertas correderas, hasta cambios sutiles en el pavimento o la iluminación. Una distribución con la que se gana comodidad y el dormitorio se convierte en un espacio más funcional y sofisticado.

9. Juega con la luz

Soluciones como los cabeceros retroiluminados y las líneas de luz alojadas en fosa sobre el techo no solo contribuyen a crear un ambiente sereno y acogedor, sino que también dan un aire sofisticado y contemporáneo al dormitorio, tal como vemos en este proyecto de Carmen López de Murillas. 

Además, este tipo de iluminación permite ajustar la atmósfera según el momento, ya sea para relajarte, leer o simplemente crear un entorno más íntimo. 

10. Sigue las últimas tendencias a la hora de iluminar la cama

Si buscas una alternativa algo más tradicional, pero sin perder el toque moderno, las lámparas de suspensión sobre las mesillas o los apliques de pared son opciones perfectas. 

Para mantener la estética contemporánea, elige modelos con líneas limpias y materiales como el metal, el vidrio o la cerámica en acabados mate o metalizados. 

Las lámparas de suspensión con diseños geométricos o minimalistas, como esta en un proyecto de Banni, aportan un aire sofisticado, mientras que los apliques, preferiblemente con brazos delgados y articulados, ofrecen una luz precisa que viene muy bien para leer en la cama sin molestar a la persona que duerme al lado.