¿Quieres montar un huerto en casa? ¿Te gustaría saborear hortalizas y verduras cultivadas por ti mismo? La jardinería hidropónica te ofrece una alternativa de lo más interesante. En este tipo de cultivos, las plantas no crecen en un sustrato de tierra, sino gracias a una solución de nutrientes a base de agua.
Hay distintas formas de crear un huerto urbano hidropónico para poder cultivar en nuestra casa plantas como hierbas aromáticas, hortalizas y verduras. Estos pequeños huertos pueden colocarse en la terraza o en el interior, dentro de la cocina, por ejemplo. Descubre las ventajas de los huertos hidropónicos.
¿Qué es la agricultura hidropónica?
Se trata de una técnica de cultivo que no utiliza tierra como sustrato para que crezcan las plantas en él. La tierra se sustituye por una solución de agua enriquecida con nutrientes. Es una opción muy sostenible que te permitirá iniciar un huerto en casa sin demasiadas complicaciones.
Esta técnica de cultivar plantas sin tierra, algo que parece innovador, no lo es realmente. De hecho, se tienen referencias bibliográficas de esta forma de cultivo desde el siglo XVII, aunque se comienza a conocer realmente la técnica a finales del siglo XIX, cuando botánicos alemanes descubrieron que las raíces de las plantas absorben los nutrientes esenciales gracias a ciertos iones inorgánicos que están disueltos en el agua. Desde entonces la técnica hidropónica ha sido estudiada en laboratorios y en los últimos tiempos se está considerando como una forma efectiva, rentable y sostenible de producir vegetales. Es menos agresiva para el medio ambiente ya que utiliza menos recursos (terreno, agua y energía) que la agricultura tradicional.
¿Merece la pena apostar por un huerto hidropónico?
A la hora de planificar un huerto en casa, los modelos hidropónicos te ofrecen grandes ventajas que debes tener en cuenta. Si tu espacio es reducido pero cuentas con algo de luz natural, ahora puedes tener un huerto en casa. Descubre todo lo que te ofrecen los modelos hidropónicos.
- Consiguen mayor rendimiento. En los huertos hidropónicos las plantas crecen más rápido: se cultivan en interior, a una temperatura ideal, por lo que el crecimiento se ve favorecido.
- Necesitas menos espacio para montar un huerto hidropónico que uno tradicional, por lo que se logra rentabilizar cada centímetro cuadrado disponible. Podrás cultivar más plantas en menos espacio.
- Se optimiza al máximo el consumo de agua. El agua con nutrientes que utilizan las plantas para alimentarse puede reutilizarse para riegos posteriores. De esta forma se ahorran hasta un 20% de agua con respecto a la agricultura tradicional.
- Es un sistema de cultivo más limpio, ya que no se utiliza tierra. Esto es un plus cuando lo queremos montar dentro de casa, por ejemplo, en la cocina.
- No se producen plagas ni malas hierbas, por lo que no es necesario utilizar insecticidas o herbicidas.
No todo son ventajas...
Si dijéramos que todo es perfecto a la hora de cultivar un huerto hidropónico estaríamos faltando a la verdad. Sin embargo, y aunque esta forma de cultivo también tiene inconvenientes, el balance es positivo en muchos casos. Te contamos cuáles son las desventajas de los huertos hidropónicos:
- Requieren de cierta inversión económica. Para empezar necesitarás comprar los materiales que necesitas para crear un huerto hidropónico. Se necesita un equipo, un sistema de iluminación, bombas, temporizadores, etc.
- El mantenimiento ha de ser regular. El huerto hidropónico necesita cierta atención. Hay que limpiar y mantener el huerto de forma adecuada, regular y vigilar la temperatura para que sea constante, procurar que el agua tenga la calidad necesaria, etc.
- Se pueden producir microorganismos. Los huertos hidropónicos corren el riesgo de contaminarse con bacterias y moho, lo que puede estropear el agua y dañar las plantas.
- Se requiere electricidad para que el huerto pueda funcionar. Si se produce un corte de luz las plantas sufrirían.
Consejos para tu huerto hidropónico casero
A la hora de montar tu huerto hidropónico en casa puedes adquirir un kit de cultivo hidropónico en el que encontrarás todos los elementos que necesitas. Pero también puedes montar un huerto hidropónico casero, con materiales que están a tu alcance. Para ello necesitarás:
- Un contenedor de plástico con una profundidad de unos 30 cm. También necesitarás una bandeja de 10 cm de profundidad que encaje sobre el contenedor y que tenga un agujero de drenaje.
- Una bomba (puede ser de las que se usan en los acuarios) que debes poner en el fondo del contenedor. La función de esta bomba es bombear el agua con nutrientes desde el contenedor inferior a la bandeja superior.
- Las plantas se colocan en pequeños contenedores de plástico que contienen fibra de coco o lana de roca.
- En el contenedor inferior debes poner agua con nutrientes para alimentar a las plantas. Este agua de cambiarse cada semana más o menos.
Coloca el huerto hidropónico en un lugar soleado. Si no dispones de luz solar natural puedes poner lámparas de crecimiento que funcionan con luces LED. Este tipo de lámparas proporciona una luz con la longitud de onda adecuada para que las plantas puedan hacer la fotosíntesis. Debes colocarla sobre tus plantitas a una altura de entre 15 y 30 cm.
Los huertos hidropónicos necesitan también una ventilación adecuada si están en el interior. Renovando el aire prevenimos la aparición de moho y bacterias. Otro cuidado importante es utilizar nutrientes líquidos orgánicos adecuados para este tipo de cultivos. Por último, debes medir el pH del agua de forma periódica. Ten en cuenta que si no es el adecuado tus plantas no podrán absorber los nutrientes que necesitan para crecer y desarrollarse.
Usa materiales aptos para uso alimentario
Tener en cuenta los materiales a la hora de comprar o hacer un huerto hidropónico es esencial, sobre todo porque vamos a cultivar hortalizas y verduras que después consumiremos. Por eso debemos asegurarnos de que los elementos que empleamos son seguros. Busca acero inoxidable o plásticos que sean aptos para uso alimentario. De esta forma se evita que determinadas sustancias químicas perjudiciales pasen a las plantas.
El polietileno, por ejemplo, es un plástico seguro a la hora de elegir un kit de huerto hidropónico. Puedes usar un polietileno de alta densidad, bastante rígido, para los contenedores y depósitos; y un polietileno de baja densidad, más flexible, para tubos, recipientes pequeños, etc. Este plástico es seguro ya que no absorbe sustancias químicas.
Tipos de huertos hidropónicos: sistema de flujo y reflujo
Existen diferentes sistemas de huertos hidropónicos que funcionan de diversas maneras. Cada uno de ellos es adecuado en determinadas circunstancias según el espacio disponible, el tipo de planta que quieras cultivar, etc. Uno de los sistemas más comunes es el de flujo y reflujo, que se basa en un proceso de inundación y drenaje. Una bomba equipada con un temporizador inunda cada cierto tiempo (va equipada con un temporizador) las rañices de las plantas con la solución de nutrientes. Después drena el dicha solución nuevamente al depósito. Lo importante es garantizar que el agua y los nutrientes llegan a las rañices de las plantas con la frecuencia necesaria.
Se trata de un modelo adecuado para una gran variedad de plantas, algunas de ellas capaces de proporcionar frutos como tomates y pimientos.
Sistema hidropónico con película de nutrientes
Se trata de un modelo muy popular y bastante frecuente que funciona mediante una lámina o película de solución de nutrientes que fluye constantemente sobre las raíces de las plantas. Estas raíces se colocan sobre un pequeño canal con cierta inclinación y un agujero de desagüe, de forma que se recoge después en un contenedor inferior de almacenaje. Una bomba hace que la solución vuelva a subir al espacio donde están las raíces.
Es un sistema adecuado para lechugas, hierbas aromáticas y otras plantas de hoja verde.
Sistema de raíz flotante
Este tipo de huerto hidropónico es uno de los más sencillos. Se colocan las plantas en un soporte de poliestireno o espuma, de forma que las raíces queden colgando y sumergidas en la solución de nutrientes que las va a alimentar. El huerto lleva también una bomba de aire que proporciona el oxígeno que las raíces necesitan.
Es un sistema apto para plantas con raíces cortas, como las hortalizas de hoja verde: lechuga, escarola, espinacas, hierbas aromáticas, etc. Sin embargo, no es tan adecuado para plantas que dan fruto como los tomates, berenjenas o pimientos.
Sistema de huertos aeropónicos
En este tipo de huertos hidropónicos las raíces de las plantas quedan suspendidas en el aire y son pulverizadas con la solución de nutrientes cada cierto tiempo. Para ello se utiliza una bomba que extrae la solución nutritiva y la lleva a través de un tubo hasta un pequeño aspersor que rocía con ella las raíces.
Se trata de un sistema adecuado para plantas de rápicdo crecimiento y con bastantes necesidades nutricionales como hierbas aromáticas (menta, albahaca, cilantro, etc.).
Sistema hidropónico por goteo
En los huertos hidropónicos que funcionan mediante un sistema de goteo la solución con los nutrientes se localiza en un contenedor inferior, mientras que las plantas se colocan en un recipiente superior. Gracias a una bomba y a un sistema de tubos se consigue que esta solución nutritiva gotee sobre las raíces de las plantas que se cultivan con una frecuencia determinada. Esto se controla mediante un temporizador.
Esta sistema es perfecto para plantas que requieren bastantes nutrientes para crecer y producir frutos, como pimientos, tomates, calabacines, berenjenas, etc.