Una vivienda familiar ubicada en Getxo, Vizcaya, no podía tener otra cocina más que esta. Con una estética clásica, recuerda a las cocinas tradicionales, aunque actualizada con elementos puntuales. Es un proyecto de Marina Cocinas, que ha maximizado el espacio generoso destinado a cocina (29 metros cuadrados). Con península central, zona de barra con taburetes, mesa de comedor y cerramiento acristalado, este es el resultado tras la reforma integral de la vivienda.
Grandes dosis de luz natural en 29 m2 de cocina
Ubicada junto a la playa de Neguri, en Getxo, esta casa unifamiliar se ha reformado por completo, manteniendo el exterior original. Lo que originariamente era una sola vivienda, debido al cambio de necesidades, se ha reorganizado en dos hogares. "Esto permite que dos hogares pertenecientes a diferentes miembros de una misma familia convivan uno sobre el otro, uno de ellos en el piso inferior de la casa, y otro en el piso superior", explican los responsables del proyecto. En el piso de abajo se encuentran los espacios más generosos. Aquí la luz natural inunda cada ambiente, también la esta familiar y elegante cocina de 29 metros cuadrados, llevada a cabo por Marina Cocinas (www.marinacocinas..com).
Un cerramiento de vidrio que es pura estética
Los 29 metros cuadrados de esta cocina se han exprimido al máximo para crear diferentes ambientes. Dos frentes de muebles, una amplia península -que actúa casi como isla central-, comedor, muebles auxiliares, e incluso una despensa oculta. "Desde un inicio, este espacio nace como un lugar de disfrute familiar. Una estancia donde cocinar en compañía y donde poder llevar a cabo largas sobremesas en junto a amigos, invitados, y por supuesto, familiares", explican desde Marina Cocinas. La cocina queda delimitada por un estético cerramiento de vidrio que al mismo tiempo conecta la estancia con las zonas de tránsito de esta casa. Sobre este elemento, indican los responsables del proyecto que "está diseñado totalmente a medida en herrería. Permite a la luz natural viajar sin impedimentos por la estancia al completo, iluminando notablemente la zona de trabajo al mismo tiempo que nos permite cerrar por completo la cocina para evitar posibles ruidos hacia el resto de la vivienda".
De esencia clásica actualizada
La propietaria de esta cocina lo tenía claro desde un inicio. Deseaba una cocina de esencia tradicional, capaz de recordar a las cocinas familiares más clásicas de un solo vistazo. Los diseñadores de Marina Cocinas seleccionaron para lograrlo el mobiliario modelo Carré de la firma de cocinas alemana Leicht, con puertas enmarcadas, un guiño a las cocinas del pasado. "Optamos por lacarlo en la tonalidad Mohair para potenciar su esencia original", detallan. Se trata de un color grisáceo, que representa sobriedad y elegancia. El tirados es tipo pomo en acabado metálico. Aquí se aprecian estos detalles del mobiliario, en un frente de armarios en columna con almacenaje, frigorífico integrado y horno y microondas en columna.
Mucha piedra natural
Este acabado natural y elegante es protagonista indiscutible de la cocina. Se trata de una cuarcita Perla Venata de la línea Naturamia de la firma Levantina. "Este tipo encimeras son obras de arte únicas diseñadas a capricho por la propia naturaleza. Cada pieza una es única. ¡Nunca hay dos iguales!", enfatizan desde Marina Cocinas. La piedra natural se repite en la encimera de todas las superficies de trabajo y "se eleva por una de las paredes para, en forma de pilastras verticales, abrazar por completo la zona de cocción", detallan. Esta composición, original de las cocinas del pasado, refuerza el estilo clásico buscado. La campana es de Pando.
La distribución de la zona de trabajo
En la zona de trabajo de la cocina se crean dos frentes, uno de almacenaje y electrodomésticos en un tono más intenso y otro con el espacio de cocinado. Entre ambos queda la generosa península, que casi se entiende como una isla si no fuera porque apoya en uno de sus lado en el cerramiento delimitador. Esta distribución favorece un uso cómodo y fluido. En esta península central encontramos la zona de aguas con el lavavajillas integrado a su lado, una amplia superficie de trabajo, variedad de cajones para almacenaje, cubos de basura para el reciclaje y la gestión de residuos y una barra con taburetes.
La barra de desayunos
Esta otra imagen muestra cómo se resuelve el diseño de la península al "otro lado" de la zona de trabajo. Aquí queda el espacio de la barra con hueco para los taburetes (de estilo clásico, tapizados y rematados con tachas) y una vinoteca en un extremo. Esta es de la marca Siemens. El grifo del fregadero es de Franke.
Desde la zona de trabajo al 'office'
El frente de columnas integra también un desayunador con puertas escamoteables y tomas de electricidad en su interior, "perfecto para albergar esos pequeños electrodoméstico que tanto utilizamos día a día pero no queremos dejar a la vista", señalan desde Marina Cocinas. Aquí también quedan el horno y microondas con espacio para el almacenamiento de menaje; un frigorífico y un congelador, ambos ocupando una columna completa cada uno para no escatimar en almacenaje frío; y por último, un armario escobero. El espacio entre la península y este completo frente es generoso y conduce al comedor de diario, ubicado al fondo de la planta.
El comedor de diario con mucho almacenaje muy moderno
En este comedor pueden comer y cenar cómodamente hasta ocho comensales. Se soluciona con un banco en L adosado a la pared, mesa y sillas y un par de muebles de estética actual con puerta de vitrina e iluminación integrada. Tanto el que queda junto a la mesa, de diseño alto, como el aparador bajo la ventana de la pared contigua a esta, sirven como mobiliario de apoyo a la zona de office para las comidas del día a día. Lo que parece una puerta más del mobiliario en esta zona oculta una coqueta despensa que pasa totalmente desapercibida a la vista. Las lámparas sobre la mesa de comedor son el modelo Ginger de Marset.
Tradición e innovación en un mismo espacio
"En términos estéticos esta cocina presume de una belleza del pasado. Una esencia del ayer. Pero si hablamos de practicidad, la innovación y la durabilidad está más que asegurada", describen los responsables del proyecto. Así, a una estética clásica se suman electrodomésticos de última generación que ofrecen todas las comodidades deseadas en una cocina y piezas más tradicionales con otras (como las vitrinas) tremendamente actuales.