Las casas modernas vienen pisando fuerte en color. Los espacios ya no se conforman con líneas simples y tonos neutros: el color se ha convertido en el gran protagonista de la nueva tendencia. Para decorar con color en un estilo contemporáneo, este se usa en acentos vibrantes y combinaciones atrevidas. El color es capaz de renovar con carácter y personalidad. Inspirar y sorprender. ¿Te apuntas?
Para ti que te gusta
Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!
Para disfrutar de 8 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.
49€ al año
Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
Notas de color en elementos puntuales
Usa el color en una casa moderna para destacar una zona o un mueble concreto. Escoge un tono llamativo que rompa con la estética predominante. Este es un recurso para usar el color con comodidad y sin riesgos, pero de manera que se note su presencia. Aquí, el cálido tono Red Clay #E736 de la marca CIN Valentine lleva el atrevimiento al salón.
El negro es un color que suma en casas modernas
El negro es un color versátil y sofisticado en decoración, perfecto para crear una estética moderna cuando se combina estratégicamente con otros tonos. Para no renunciar a la calidez, coordina negro con tonos tierra. El efecto es de calidez contemporánea, al equilibrar el negro. Tendrás un aire bohemio, como el que se logra en esta cocina con un papel en la pared, de la firma Coordonné. El negro, combinado con amarillos adquiere un aire dinámico. Con verde es una manera de sofisticar este tono. Con azul marino se logra un efecto moderno y elegante, muy propio para espacios minimalistas.
El rosa empolvado es una opción contemporánea
El rosa suave, suaviza el negro, tan presente en espacios modernos. Y lo mismo hace con otros acabados oscuros como la madera de nogal o colores más intensos. Es capaz de crear sensación de acogimiento allí donde se introduce. En este salón, donde hay tonos grises, negro y madera clara, el rosa que propone Farrow & Ball es de intensidad media, para que se note, convirtiéndose en un neutro que unifica el resto de acabados.
Colores contrastados para un efecto personal y llamativo
¡Esta opción es enérgica! En este comedor se han combinado colores contrastados. Y esta forma de llevar el color a un interior siempre resulta moderna. Esto es porque se relaciona el contraste con la estética y filosofía del diseño contemporáneo. El impacto visual es inmediato. En un ambiente moderno, donde los muebles y complementos suelen tener líneas limpias, los colores añaden vitalidad y movimiento al ambiente, evitando que se vea monótono.
El color se adapta a espacios y estilos
El uso del color puede ser versátil y llevarse a ambientes de distinta tendencia. Hoy vemos aquí ejemplos que resultan modernos, pero siempre que se decora con color, se apuesta por el carácter y la fuerza visual. Los espacios se pueden volver vibrantes y alegres o sobrios y elegantes, en función de la tonalidad escogida. No es lo mismo un verde manzana que un verde botella. Así que conviene escoger la tonalidades en función del efecto que se pretende lograr. En este dormitorio, el verde se ha llevado a las paredes, cabecero, ropa de cama y lámpara. Es una propuesta personal de Maisons du Monde.
El color conecta con el arte moderno
El contraste de colores tiene raíces en movimientos artísticos modernos como el Pop Art o el Constructivismo. En estas corrientes, las combinaciones audaces y llamativas de colores estaban siempre presentes. Al llevar el uso del color a un espacio se evoca el diseño contemporáneo y se conecta con lo artístico y cultural. Decora con obras de arte en colores intensos y suma elementos decorativos de menor tamaño como lámparas, jarrones, mesas auxiliares o pufs en tonos que organicen el espacio. ¡Todo resultará más interesante y expresivo! Esta composición tan personal y atractiva es de la firma The Masie.
Actualizar con color un estampado clásico
Este es otro de los poderes del color. Es capaz de actualizar un patrón o motivo más tradicional de manera que se pueda incorporar a un espacio contemporáneo con absoluta tranquilidad. Los estampados florales son un clásico que evoca calidez, delicadeza y tradición. Aquí, el negro es la base sobre la que destacan los motivos florales en colores llamativos, que transforman por completo este rincón de estar. Este contraste refresca el patrón floral, evitando que se vea anticuado. ¿Acaso no resulta 100% personal? El papel pintado y la alfombra son de la firma Instabilelab, de venta en PortobelloStreet.es.
Energía y vitalidad
Este otro ejemplo también recurre a las flores, aunque en un diseño muy diferente. Los colores llamativos aportan energía y dinamismo a los espacios, mientras que las flores, como elemento orgánico, añaden frescura. La combinación es tremendamente vital. El rojo aquí, en la alfombra, es impactante. Con más razón al tratarse de un espacio decorado en tonos neutros. Este contraste destaca cómo la luz interactúa con el espacio y las superficies. Alfombra, butaca y cojines de Kilombo Home. Sofá de Pepe Peñalver. Mesas de centro y lámpara de pie de La Oca. Es un proyecto del estudio R de Room con estilismo de Pilar Perea.
El color en el salón
Sofá en color llamativo con butacas neutras. Sofá tapizado en un tono neutro con butacas llamativas. Todo en color con una alfombra más suave o asientos claros con alfombra psicodélica. Estas son todas las opciones para llevar el color al salón. ¿Qué grado de atrevimiento es para ti? Con cualquiera de estas opciones puedes mantener las paredes en tono neutro y sentir el color en el ambiente a través del mobiliario principal. El efecto también es distinto si el color escogido para sofá y butacas es el mismo en la misma intensidad, el mismo en intensidades distintas o en colores distintos y/o con tapicerías lisas y estampadas. Piezas de las firmas Tacchini y Casamitjana.
El efecto más divertido del color
Decorar con muchos colores variados para lograr un efecto loco, vibrante y divertido también requiere equilibrio y estrategia. Se trata de que parezca que se ha hecho de forma caótica, pero hay armonía y coherencia porque sino el efecto es desordenado. ¿Cómo se hace? Con una paleta base desde la que se parte, con dos o tres colores predominantes. Esos tonos serán los conductores. Jugar con las paredes en este efecto es muy efectista. A través de pintura o de murales se logra ese tono dinámico y luego se pueden sumar muebles en los colores del mural o piezas más neutras. Esta propuesta es de la firma Coordonné.