Cuando llega el mal tiempo y las temperaturas comienzan a bajar, siempre resulta agradable encender la chimeneay calentar la casa y algo más. El fuego crea un ambiente acogedor y cálido, convirtiéndose en el centro de la estancia, alrededor del cual nos gusta reunirnos en las largas tardes de invierno para disfrutar de un café y acurrucarnos en el sofá con una acogedora manta. Con una amplia gama para elegir (de leña, abierta, de etanol, eléctrica, de casete..), se convierte también en parte de la decoración del salón. Estos son los motivos que la han convertido en el nuevo objeto de deseo deco.
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Vinculada siempre con las casas de campo, lo cierto es que la variedad de diseños, algunos futuristas, les permite encajar e integrarse en cualquier estilo decorativo. Así, son una opción perfecta en un interior de estética rústica, como este salón de El Corte Inglés, como en una decoración moderna o, incluso, minimalista, donde penetran en el corazón multiplicando por diez su confort. Eso sí, es importante que lo que la rodea vaya en consonancia, para que no parezca algo extraño al ambiente.
Aunque el estilo es importante, el consumo es otro de los aspectos que hacen que una chimenea, especialmente los diseños nuevos, como la Gyrofocus de bioetanol de Focus, sean una buena alternativa de calefacción, ya que combinan bienestar y un sistema eficiente, que cuida el planeta y nuestro bolsillo.
El tener una chimenea implica que la enciendes solo cuando es necesario, evitando el desperdicio de energía y reduciendo el consumo. Además, como son individuales no dependes de las decisiones de toda la comunidad para encender o apagar la calefacción, lo que otorga mayor autonomía y flexibilidad, y, al utilizar combustibles sostenibles, se contribuye a la reducción de emisiones de carbono y se promueve un estilo de vida más respetuoso con el medioambiente. Un buen uso (y mantenimiento) también son clave para rentabilizar el calor.
Aunque el consumo y el estilo son aspectos determinantes, lo cierto es que la chimenea es mucho más que un sistema de calefacción, es una forma de crear hogar, como ocurre en esta propuesta de Sophie Alport. Por este motivo, sentirla es casi tan importante como ver el fuego y oír, en muchos casos, el chisporroteo de la leña o el olor. Estamos, por lo tanto, ante un elemento que refuerza el espíritu cálido, tranquilo y acogedor de un salón o de cualquier otra estancia de la casa. Y, por eso, la queremos y la necesitamos.
Pero como no solo de calor físico, vive el hombre. Las chimeneas suman funcionalidades en el día a día. Así, son un objeto de decoración más, el sitio perfecto para colocar el belén navideño o muchas otras cosas más. De esta manera, gracias a los grandes acristalamientos, a veces en todos sus lados, estamos ante auténticos elementos de distribución, que conectan o separan ambientes visualmente, manteniendo su magia en ambos. Como en esta propuesta del estudio de arquitectura Ábaton, donde la chimenea de doble caradelimita el salón del comedor, sin perder la conexión entre ambos.
La chimenea se ha integrado en la casa actual, como en esta propuesta de Terratinta, adaptándose tanto a la estancia en la que se ubican como a los hábitos y necesidades de los moradores. Los nuevos modelos se reinventany se atreven a utilizar el color, se diseñan a medida integrándose en muebles, se 'encierran' en cajas de cristal o juegan con embocaduras llamativas que acaparan la atención y 'visten' los ambientes.
Las chimeneas de estilo clásico, como la de esta propuesta de Arenaa, poseen ese aire señorial que solo ellas, junto con las molduras decorativas y los arcos (dos de las tendencias de las temporada), pueden dar. Independientemente si se trata de un piso centenario o de nueva construcción, apostar por estos modelos siempre sumarán elegancia y un toque chic al espacio. Eso sí, para no desmerecerla, rodéala del mobiliario y los accesorios idóneos.
Si antes solo parecía que eran aptas para residencias de campo o casas grandes y señoriales, los nuevos modelos permiten la entrada en pisos pequeños y sin salida de humos, gracias a las chimeneas de bioetanol o a diseños compactos, como este de MCZ. De pellets, la Eiko es perfecta para estancias de pocos metros, gracias a sutamaño reducidoque permite que se pueda instalar cerca de la pared.
De la cocina, una de sus ubicaciones, saltaron al salón y de ahí se pasean por toda la casa, consciente de que en todas las estancias tienen algo de decir, además de elevar los grados. Ahora las encontramos en el dormitorio, en el jardín (son uno de los must de la decoración de exteriores) y en cualquier rincón donde quieras crear atmósfera, como ocurre en este rincón de relax con mobiliario de Knoll.
A la hora de planificar el salón, además del sofá o la mesa de centro, la chimenea se puede convertir en la pieza alrededor de la que se configura el espacio, como en este proyecto del estudio de Alberto Torres. Así, el resto de los muebles y accesorios pueden mirarla y 'cerrar' un estar, con butacas, perfecto para disfrutar a diario.
La chimenea forma parte de la estancia todo el año, incluso durante los meses que no la encendemos. De esta manera, convertida en objeto decorativo, en invierno calienta el salón, mientras que en verano encuentra una nueva función: se transforma en un espacio de exhibición de tus cuadros, un altar para colocar tus velas, exponer jarrones con flores o adornos especiales, destacar un gran espejo de estilo o contar con un estante adicional. En definitiva, es un auténtico valor deco (y práctico) añadido. Sin olvidar el papel principal que tiene en la decoración navideña.
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