Si pensabas que las cocinas blancas, de tonos neutros o de madera eran tu única opción, tenemos buenas noticias: los colores están invadiendo este espacio clave de la casa. Ahora las cocinas no solo buscan ser prácticas, sino también reflejar personalidad y estilo. Eso sí, sabemos que elegir un color que se salga de lo normal para un espacio tan importante suele generar dudas: ¿Y si me canso? ¿Y si pasa de moda en dos años? Estar al tanto de las tendencias no significa lanzarse sin freno, sino encontrar ideas que te inspiren y se adapten a tu casa, a tus gustos. Hay tonos que transmiten calidez, otros que aportan frescura, e incluso algunos capaces de dotar de carácter y un toque único a tu cocina. ¿Quieres saber cuáles son los colores que están triunfando este año? ¡Sigue leyendo!
El verde manda
Si hay un color que está reinando este año en el diseño de cocinas, ese es el verde. ¿Por qué gusta tanto? Porque tiene una versatilidad increíble. Desde un verde salvia suave como el de estos muebles de esta cocina de Leroy Merlin, que aporta calma y elegancia, hasta un tono esmeralda profundo que destila sofisticación, pasando por los oliva que conectan con lo natural. Este color no solo está de moda, también es atemporal y lleno de estilo.
Para combinarlo, no necesitas complicarte: con madera clara o natural, lograrás un look cálido y acogedor. Si buscas algo más moderno, prueba con negro o acabados metálicos como el dorado o el cobre, que le darán un aire lujoso. Y si lo tuyo son los tonos neutros, el verde queda espectacular con blanco o gris.
En muebles, paredes, pequeños detalles…
¿Quién dijo que los armarios de cocina de arriba y abajo tienen que ser iguales? Esa idea ya es cosa del pasado. Ahora lo que se lleva es mezclar colores y acabados, tal como hizo el equipo de PPT Interiorismo en esta vivienda: las puertas superiores se escogieron en verde y las inferiores en madera clara. Y para ir un paso más allá, añade pinceladas de naranja en detalles como tiradores, sillas o utensilios decorativos, que den a la estancia un look dinámico y moderno, sin perder esa conexión natural que aporta el verde.
Azul profundo: la elegancia que tu cocina merece
El azul está ganando terreno en las cocinas, especialmente en sus tonalidades oscuras y matizadas que son pura sofisticación. Desde un azul petróleo hasta un azul noche con toques grisáceos, estos tonos hacen de cualquier estancia un ambiente elegante, sereno y lleno de carácter. Basta con ver este proyecto de Moretti para darse cuenta de que van de maravilla con encimeras de mármol blanco o gris claro para un look moderno y luminoso, o con acabados metálicos como el dorado o el bronce para un aire más glamuroso. Si quieres algo más cálido, prueba con madera natural en detalles como mesas o estantes flotantes.
También en sus versiones 'soft'
El azul pastel tiene un encanto único: es ligero, refrescante y perfecto para muebles, paredes e incluso pequeños detalles. En este caso, destaca la combinación con azulejos blancos Grace O de la firma WOW, realzados con masilla azul que crea un efecto visual moderno y delicado.
El rojo ha vuelto
A finales de los 90 y principios de los 2000, cuando las tendencias de diseño buscaban espacios vibrantes y atrevidos, el rojo se convirtió en uno de los colores preferidos para el mobiliario de cocina. Sin embargo, con el tiempo, fue perdiendo protagonismo en favor de tonos más neutros y suaves, como el blanco y los grises. Ahora, está resurgiendo poco a poco, especialmente en formatos más sutiles, como en los detalles o como contraste en cocinas con mobiliario más neutro. Combinarlo es clave para no sobrecargar el espacio. Si te atreves a incluirlo en muebles, opta por contrastes como se ha hecho en esta cocina, de la firma Popstahl: una encimera blanca o negra y detalles en madera natural suavizan la intensidad del rojo y equilibran el espacio.
¿Te gusta, pero no te atreves?
Si prefieres no arriesgar tanto, los muebles auxiliares, electrodomésticos y complementos en rojo son una opción divertida y asequible. Para cocinas pequeñas, lo mejor es no saturar demasiado con este color; puedes pintar solo una pared o agregar toques en los detalles como se ha hecho en esta cocina de IKEA. En resumen, el rojo es un aliado perfecto para aportar energía y dinamismo a la cocina, pero la clave está en equilibrarlo con tonos neutros y una iluminación adecuada.
Los metalizados también son tendencia
Ya sea en electrodomésticos, grifería, accesorios o incluso en el mueble, la estética metalizada resulta bastante rompedora, aportando un toque contemporáneo e industrial a la cocina. Lo vemos en este proyecto de Coblonal, con mobiliario de acero inoxidable y sobre la isla central, una gran campana extractora con sus conductos metálicos a la vista al más puro estilo de las cocinas profesionales.
Con el necesario toque de calidez
Acero y madera forman un tándem perfecto: el primer material aporta un aire contemporáneo y funcional, y el segundo pone un punto acogedor y orgánico que suaviza el ambiente. Se crea un equilibrio perfecto. En la cocina, queda especialmente bien alternar muebles de acero inoxidable en las zonas de trabajo o en una isla –estos son de la firma Arclinea– con estanterías o encimeras de madera. Esta mezcla ayuda a evitar que el acero domine por completo el espacio y que el efecto resulte demasiado frío.
Entre el rosa y el naranja
Desde que Pantone eligiera el "Peach Fuzz" como color del año 2024, este tono suave de melocotón ha ganado popularidad en el mundo del interiorismo, siendo una opción fresca y acogedora para cualquier espacio, incluida la cocina. Para darle un toque más actual y sofisticado, puedes combinarlo con electrodomésticos y detalles en negro, como nos propone en este caso la firma Mobalpa.
Y si no es en los muebles… ¡en las paredes!
Una excelente forma de sumarte a la moda del "Peach Fuzz" (y de cualquier otro color) es pintar las paredes con ese tono, como en esta cocina de IKEA que ves en la imagen. El secreto para que este estilo funcione es mantener el mobiliario en tonos claros y neutros. Fíjate en los armarios de color blanco brillante, que aportan frescura y luz, mientras que los detalles en madera clara añaden calidez sin recargar el espacio. La mezcla de materiales crea un equilibrio que evita que el rosa domine, logrando un ambiente sereno y contemporáneo.