Sea cual sea tu gama cromática favorita (y la que mejor va con tu casa) estás de suerte, porque este otoño-invierno 2024-2025 hay propuestas para todos los gustos: desde los cálidos tonos terrosos y los suaves pasteles, hasta los elegantes verdes o grises. Así que, ¿por qué no aprovechar para poner ese punto de color "trendy" en tu casa? Lo bueno es que, en este caso, sumarse a las tendencias es fácil y tienes mil formas de hacerlo: a lo grande o en pequeñas dosis. ¿Te atreves a pintar una pared del salón con ese azul intenso que tanto te fascina o prefieres empapelar el dormitorio con un mural de color mostaza? Y si no quieres hacer grandes cambios, siempre puedes jugar con los complementos: unos cojines marrones para el sofá, unas cortinas en rojo burdeos o incluso un bonito jarrón morado te ayudarán a dar un nuevo look a cualquier espacio. No hace falta complicarse: ¡las opciones son infinitas y adaptables a tu estilo! Apunta nuestras sugerencias y consejos para sacar el máximo partido a esos colores de moda.
Rojo burdeos
Cereza, vino, granate… La paleta de los rojos oscuros se posiciona como una de las paletas estrella de este otoño-invierno para aportar calidez y un toque de distinción a cualquier rincón de tu casa. Si buscas un estilo moderno, prueba a combinarlo con tonos neutros como el beige o el gris claro, como se ha hecho en este salón, donde el sofá Walke y los sillones Stella de Westwing destacan y acaparan todo el protagonismo. Para un ambiente más sofisticado, el burdeos se complementa de maravilla con colores más oscuros, como el negro, azul marino o gris profundo. Y si lo que quieres es añadir profundidad y mucho carácter, juega con distintas tonalidades de rojo.
Musgo, salvia, bosque…
Son tonos que aportan calma y nos conectan con la naturaleza, por eso, son ideales para recrear ambientes acogedores y serenos. Como ves en esta imagen, una propuesta muy elegante es decorar la pared con un papel pintado con delicados motivos verdes sobre fondo neutro –este es de la firma Deus ex Gardenia–, más aún si se combina con mobiliario o carpintería de color blanco, pues se crea un contraste luminoso y equilibrado que resalta cada detalle. También van de maravilla los materiales naturales como madera clara, los detalles en dorado para un toque sofisticado y los textiles en tonos neutros o tierra para un ambiente más relajado y armonioso
Marrones terrosos
Desde el suave beige y el delicado camel, hasta el intenso chocolate, estas tonalidades evocan la serenidad de la tierra y la rusticidad del bosque. Funcionan de maravilla con otros tonos cálidos como mostaza, ocres o naranjas quemados, y con neutros como el gris claro o blanco roto. Mezclas con las que conseguirás ambientes tan envolventes y sofisticados como este dormitorio. Una forma ideal de integrar estos colores en la decoración es a través de una composición de cuadros o láminas en la pared (estas son de Oka, igual que los cojines y la ropa de cama). Opta por marcos en madera natural y piezas que jueguen con texturas, geometrías o paisajes, para darle dinamismo al espacio y acentuar la calidez de los tonos tierra.
Azul profundo
Junto a las tonalidades serenas y suaves que aportan calma y delicadeza, esta temporada también se llevan los tonos que generan fuerza y carácter en los espacios. Entre ellos, el azul oscuro que, al aplicarlo en las paredes, crea un efecto envolvente. Lo más tradicional sería combinarlo con colores neutros como el beige o gris claro, pero si buscas un efecto WOW, nada como apostar por mezclas atrevidas. Mostaza, terracota, coral… tonos que consigan que el azul resalte aún más y dan a la estancia un aire sofisticado y contemporáneo. En este caso, con el suelo cerámico en gris perla de la marca Halcón Cerámicas se crea un contraste limpio y elegante.
Beis y arenas
Son esos clásicos que nunca fallan y siempre nos envuelven en una sensación de calma y calidez. Es cierto que tienen mala fama de ser "aburridos", con, pero con un par de toques pueden volverse modernos y llenos de estilo. ¿Cómo? Añadiendo detalles como acentos en negro o metales dorados y cobrizos, que le dan un toque chic sin perder esa suavidad que los caracteriza. También puedes jugar con tejidos naturales como el lino o el algodón y sumar texturas interesantes o patrones geométricos. Para muestra, este salón decorado con un lienzo abstracto de Green Lili.
Los grises más suaves
Por esa sensación de abrigo y calma invernal que transmite, el gris clarito es uno de los básicos de este otoño-invierno (y de todos), por eso, lo vas a ver mucho en telas y tapicerías (esta es el modelo Empire Natural de Moon). Pero ¿qué pasa cuando llega el verano y queremos adaptar este tono tan acogedor a una decoración más estival? La clave está en combinarlo con colores vivos, como turquesa, coral, amarillo, verde…, además de añadir texturas ligeras como lino o algodón. Seguirá resultado igual de elegante, pero con un aire más fresco y desenfadado.
Mostaza
El color mostaza está teniendo su momento de gloria y no es de extrañar. Es cálido, vital, acogedor, elegante… una opción perfecta para dar un toque de energía a cualquier espacio de la casa. Combina a la perfección con tonos neutros como el gris y el beige (¿y qué color no?), pero también se lleva maravillosamente bien con colores profundos como el azul marino o el verde oliva, que resaltan su riqueza natural. Una idea fantástica es usar papel pintado en la pared principal de la estancia, ya sea el dormitorio o el salón, para crear un punto focal que atrape todas las miradas. Puedes optar por un diseño geométrico o floral (este es de la marca Abigail Borg) que sume un plus de estilo y personalidad a la decoración.
El terracota
El color terracota es un auténtico referente en la decoración contemporánea, pues no hay duda de que aporta un toque distintivo y acogedor a cualquier espacio. Eso sí, si lo eliges para pintar o revestir las paredes de una estancia que no es demasiado amplia, una buena idea es combinarlo con un zócalo blanco que aporte luminosidad y evite que el espacio se sienta cerrado o limitado. Así se ha hecho en este baño, en el que se han alternado azulejos de la firma Porcelain Superstore en los dos colores.
Rosas empolvados
Pastel, nude, clarito, palo de rosa… Este delicado tono de rosa se adapta a la perfección a ambientes contemporáneos (¿o a caso pensabas que estaba reservado a decoraciones cursis o clásicas?). Aunque no lo creas su versatilidad es sorprendente, ya que combina con una amplia gama de colores. Te proponemos que para mantener un estilo moderno y atrevido, lo emparejes con grises oscuros, verde oliva, terracota, azules profundos… colores con los que contraste sin perder la sofisticación. Fíjate en este dormitorio, donde el papel pintado de Divine Savages es un telón de fondo perfecto para las tapicerías de color azul.
Del morado al malva, lila o lavanda
Si buscas darle un toque chic a tu casa, ¡los morados son perfectos! Desde el suave lila o lavanda hasta el profundo malva, esta gama de colores hará que cualquier estancia irradie modernidad y estilo. Más aún si apuestas por mezclas atrevidas: pinceladas naranjas, azules, fucsias… y piezas de diseño contemporáneo, como las que vemos en este salón, decorado con un sofá rinconera de Tom Tailor. Eso sí, para aligerar, mete detalles en fibra vegetal y acabados en blanco o madera clara.