La llegada del otoño es también para muchos el comienzo del curso. Una nueva temporada comienza y, con ella, nuestro deseo de hacer que en nuestra casa se respire una atmósfera diferente. Se acabaron los días de playa y piscina. Ahora es época de tardes de peli y manta, de cenas con familia y amigos y de pasar más tiempo en casa. Por eso hay que adaptarla a la nueva estación. Eso sí, sin gastar mucho. Te proponemos barios cambios para adaptar tu casa al otoño.
Otoño en los colores
La bajada de temperaturas fuera de casa te pide que las subas dentro. ¿Y cómo hacerlo? Mediante el color es un buen punto de partida. Colores como el terracota, arena, camel o mostaza son perfectos para subir la temperatura y se llevan cada otoño. A ellos se suma este año el verde oliva, que se convierte en el perfecto contrapunto de esos colores cálidos. La mejor manera de incluirlos sin gastar mucho es mediante textiles como las fundas de los cojines. Renueva los del sofá y la cama y verás cómo tu casa se ve mucho más otoñal por poco.
Cortinas ligeras
Aunque no lo creas, el otoño te pide cortinas ligeras. ¿Por qué? Porque los días empiezan a ser más cortos y oscuros y la luz natural se convierte en un bien muy preciado. Por eso, unos visillos o cortinas ligeras que permitan el paso de algo de luz, pero garanticen la intimidad, son una gran idea.
Si quieres que las cortinas impidan el paso del frío y, además, sirvan como aislante frente al frío, siempre puedes instalar una doble cortina. Por un lado, los ya mencionados visillos y, por el otro, unas cortinas opacas a las que des uso por la noche. ¡Perfecto!
Llena de tu casa de plantas
Si durante las vacaciones de verano tu colección de plantas se ha visto mermada por la falta de cuidados y el exceso de calor, es el momento de renovarlas. Las plantas ayudarán a regular la temperatura interior de tu casa y la llenarán de vida, pero además con ellas mejorará tu bienestar y la atmósfera de tu casa. Elige especies que sean fáciles de mantener, mejor si son resistentes a épocas de sequía –así no te volverá a pasarlo mismo el verano que viene–.
Apuesta por texturas más cálidas
El cambio de temporada no solo te pide colores más otoñales, sino que también es importante cuidar las texturas de los textiles que decoran nuestra casa. Ahora, la lana y el algodón son una apuesta segura frente a otros tejidos, como el lino. Mantas, cojines y, por supuesto, alfombras, son los mejores elementos para añadir esas texturas cálidas que subirán la temperatura de tu casa de manera sencilla.
Es hora de manta y peli
Abre los armarios y saca la manta (o mantas) del sofá. Tal vez también es el momento de hacer lo mismo el edredón o, con al menos, una colcha para las noches más frías. Y es que este complemento textil no solo cumple una función decorativa. También es un básico con el cambio de estación para disfrutar del sofá cuando bajan las temperaturas. Ahora ya nada se interpondrá en tus tardes de maratón.
Tu casa te pide nuevos aromas
Los olores florales y frescos del verano se sustituyen ahora por otros más cítricos, como la naranja o la mandarina, mezclados con aromas amaderados y otros que huelen a caramelo, canela y vainilla. El otoño pide fragancias más dulzonas y cálidas. Llévalas a tu hogar mediante velas, mikados y aceites esenciales.
Más luz
Puesto que los días son más cortos, también es necesario que tu casa sea más cálida cuando se va el sol. Para conseguirlo, la iluminación artificial es clave. Además de las luces generales de cada estancia, asegúrate de que cuentas con lámparas y apliques que proporcionen luz puntual y ambiental, que también puedes conseguir con tiras led estratégicamente colocadas. Debajo de un mueble o escondidas en las molduras, bañando las paredes, conseguirás ese efecto. ¡Ah! Y que la temperatura de la luz sea cálida.
El frío se va por los pies
Si eres de los que prefiere andar descalzo en casa, no dudes en proteger tu pisada con cálidas alfombras. Las de lana y algodón son la mejor y más acogedora opción. Lo mejor es que, no solo protegerás tus pies, sino también tus suelos. Y conseguirás aislar tu casa del frío y los ruidos. ¿Más ventajas? Son el complemento decorativo perfecto para llenar de estilo cualquier espacio.
Nos gusta la madera
El otoño es tiempo de buscar la calidez en casa. ¿Qué mejor que la madera para conseguirlo? Si tus muebles son de este material, deja que se vea. Y se sienta. La madera al natural es la opción más acogedora y agradable. Y no solo a la vista, sino también al tacto.