La belleza de las flores es efímera y temporal. Por hermosas y arrebatadoras que sean, es inevitable que se vayan marchitando y finalmente mueran. Sin embargo, existen procedimientos eficaces que funcionan si lo que queremos es preservar la vida de las flores durante mucho más tiempo: secarlas es uno de los métodos más sencillos, y hay varias formas de hacerlo. ¡Te lo contamos!
Las ventajas de secar flores naturales
Las flores secas tienen un gran poder decorativo, con la ventaja añadida de perdurar en el tiempo. Si te gustan y quieres añadir algún ramo bonito a tu casa, debes saber que puedes comprar las flores ya secas en la floristería. Otra opción interesante consiste en secar tú mismo las flores naturales. Pueden ser de tu jardín, o algunas que hayas recogido en tus paseos por el campo. O puedes comprar flores frescas y secarlas. ¿Te han regalado un bonito ramo? Puedes secarlo y conservarlo mucho tiempo.
Con las flores secas puedes crear preciosos arreglos para la mesa, para poner en jarrones, etc. Hay múltiples formas para secar flores naturales y decorar todos los espacios de tu casa con ellas. Como punto de partida, debes pensar cómo quieres que queden tus flores: aplastadas o manteniendo su forma. Con las primeras podrás crear preciosos cuadros enmarcados, mientras que las segundas son perfectas para jarrones y arreglos florales diversos. Elige el método más conveniente para secar tus flores: hay diversas formas de hacerlo y con todas ellas se suelen conseguir resultados óptimos.
Estas son las especies que conviene elegir
A la hora de secar flores para decorar la casa con ellas no todas las especies ofrecen el mismo resultado. Aunque en teoría todas las flores pueden ser secadas, algunas quedan mucho mejor que otras. Si no tienes mucha experiencia en esta tarea, lo mejor es elegir las flores adecuadas. Estas son algunas consideraciones que debes tener en cuenta:
- Elige especies de tallos leñosos, como las rosas. Una vez secas, se mantienen bellas.
- Las flores con tallos delgados suelen quedar muy bien después de secarse. Un ejemplo es la paniculata (Gypsophila paniculata), una planta de flores blancas muy pequeñas que se utiliza mucho en ramos. ¡Cuando se seca dura muchísimo tiempo.
- Las flores de la hortensia (Hydrangea macrophylla) se secan de maravilla y ofrecen una gran belleza. Son una de las mejores opciones para secar.
- La lavanda (Lavandula angustifolia) es también una planta muy adecuada para secar y hacer preciosos ramos.
¿Cuánto tiempo tardan en secarse las flores?
Para responder a esta pregunta es necesario tener en cuenta muchos factores. No todas las flores se secan en el mismo tiempo, si no que unas tardan más que otras. Por otro lado, también influye el método de secado que utilicemos, el tipo de flor de que se trate, etc. Como dato orientativo podemos decir que las flores tardan en secarse entre dos semanas y dos meses, aunque lo más habitual es de dos a cuatro semanas.
Un aspecto importante a tener en cuenta para prever cuánto tiempo tardarán nuestras flores en quedar secas es el tamaño de las mismas, así como el grosor del tallo. Cuanto más grande la flor y más grueso el tallo, más tardará en secarse.
Un truco: para saber si una flor está completamente seca debes fijarte en el tallo, que habrá perdido su flexibilidad y estará rígido y quebradizo. También los pétalos quedan crujientes.
Secado al aire
Es, sin duda, uno de los mejores métodos para secar flores naturales y lograr que queden bellas y decorativas. Además, es muy sencillo. Solo tienes que colgar las flores boca abajo y dejar que pase el tiempo. Para hacerlo correctamente: forma ramilletes de pocas flores y átalas con un cordel, que después podrás usar para colgarlas.
Es importante buscar un lugar oscuro y cálido para dejar las flores, donde no les de la luz; algo así como un trastero o un desván. La oscuridad preserva los colores de las flores mientras que el calor acelera el proceso de secado.
Prensadas, entre las páginas de un libro
Otra forma que seguramente conoces para secar flores naturales, y prensarlas al mismo tiempo, consiste en poner las flores, enteras o simplemente los pétalos, entre las páginas de un libro grande. Quedarán planas, perfectas para enmarcar y hacer así un precioso cuadro, por ejemplo. Las claves para hacerlo correctamente son sencillas:
- Utiliza papel para secar las flores en un libro. Si pones las flores entre papeles para que absorban la humedad que sueltan, lograrás un resultado mejor. Utiliza para ello papel de seda. Aunque el papel de cocina te pueda parecer una buena opción, al no ser liso (suele llevar un dibujo grabado) podría dejar marcas en las flores.
- Coloca el papel con las flores entre las páginas del libro. Puedes poner varias en el mismo libro, aunque debes dejar un grupo de páginas de medio centímetro a ambos lados de cada flor.
- Si vas a poner más de una flor, repártelas de manera uniforme.
- Vigila el papel de las flores para ver si está muy húmedo o ha creado moho, pero no lo hagas hasta que hayan pasado dos semanas (para evitar que se muevan y se estropeen). Cambia el papel si es necesario.
Con una prensa de flores
Utilizar una prensa especial para secar y prensar flores es otro método que podemos usar, si disponemos de un utensilio de este tipo. La prensa ejerce presión sobre varias capas de flores de una forma regular. De esta manera puedes secar pétalos, hojas o flores enteras. Se trata de un método más rápido y el resultado es similar a ponerlas entre las páginas de un libro, ya que las protege de la luz y consigue extraer la humedad, por lo que se preserva el color y la belleza natural de las flores.
¿Cómo se usa la prensa de flores? Pon los ejemplares que quieras secar entre papel de seda y después pon los papeles entre dos trozos de cartón. Coloca los cartones en la prensa y acciona el mecanismo para ejercer presión sobre ellos. Si las flores son de tonos claros pueden decolorarse ligeramente, aunque las que tienen colores brillantes los conservan bien: amarillo, rosa, etc.
Sécalas en el horno
Aquí tienes un método distinto y especial de secar flores frescas en casa: utilizar el horno. Se trata de un procedimiento más rápido que dejar las flores colgadas boca abajo en un lugar oscuro para que se sequen al aire. La técnica, además, es muy sencilla: solo tienes que encender el horno a 40ºC y colocar las flores en la rejilla del horno.
Si tienen cierto tamaño puedes colocarlas en posición vertical. Deja que transcurran unas horas, tres o cuatro por regla general (aunque dependerá del horno), y después sácalas del horno y deja que se enfríen en otra rejilla. Ahora ya puedes usarlas para decorar cualquier espacio, para exhibirlas en jarrones, hacer adornos para colgar en el techo o hacer coronas decorativas.
En una caja de cartón
Esta manera de secar flores es realmente sencilla: consiste en poner las flores en una caja de cartón con tapa. Es una buena alternativa para secar flores naturales sin tener que prensarlas. Puedes colocarlas enteras dentro de la caja y esperar el tiempo necesario para que se sequen por sí mismas. Debes tener en cuenta que con este método pueden deformarse un poco las flores, especialmente los tallos de las mismas.
Decora tu casa con flores secas
Ahora que ya sabes cómo puedes secar las flores naturales, los métodos que existen y cuáles son las especies que mejor quedan, ya puedes ponerte manos a la obra. Una vez secas, utilízalas para decorar cualquier espacio de la casa, desde la cocina hasta los dormitorios y, especialmente, el salón.
Las flores secas tienen muchas aplicaciones en el hogar. Puedes ponerlas en un jarrón, una manera perfecta de decorar una mesa o un mueble. Puedes hacer una corona: en otoño puedes crear coronas de flores secas de lo más decorativas. Otra idea consiste en crear arreglos florales para decorar la mesa, o adornos de flores secas para colgar del techo o de la pared.
Cómo conservarlas intactas
Si después de secar tus flores favoritas no las vas a utilizar de forma inmediata para decorar la casa, puedes guardarlas con ciertas medidas para que no se estropeen y se mantengan intactas durante mucho tiempo. Búscales un rincón oscuro y seco y colócalas en posición horizontal, para que no se deformen ni se decoloren. Puedes ponerlas en una caja, siempre que esta sea de cartón, y no de plástico. El plástico no transpira y podría provocar la aparición de moho en las flores secas.