Guía práctica de feng shui para lograr un salón lleno de paz y equilibrio

© Espacio en Blanco

¿Debes reubicar tu sofá?

Lo primero que hay que tener en cuenta es la ubicación de la pieza más importante del ambiente: el sofá, ya que un mal emplazamiento del asiento donde pasamos más tiempo nos roba nuestra energía, que es uno de los recursos más valiosos que tenemos. 

“Al feng shui se le conoce también como ‘el arte de la ubicación'. Estar bien situado es sinónimo de mayor bienestar en nuestras vidas”, relata Astrid. ¿Cuál es esa localización óptima? En una ‘posición de poder’, esto es, apoyado en la pared, donde tengas la visión de todo el espacio y la espalda protegida. Se denomina ‘de poder’ porque es desde donde se tiene un mayor control del espacio, en esta situación espacial el ser humano se siente protegido y seguro, y por supuesto, relajado.

“A lo largo de toda mi experiencia he visto personas en sus hogares, muy mal ubicadas, cuando les pregunto ‘cómo se sienten’ todas coinciden: cansadas, se levantan a menudo, sienten incomodidad, sensación de desprotección y dispersión. Cuando sitúan bien el sofá su energía cambia y lo notan enseguida. Se sienten más vitales, relajadas y con más energía”, prosigue la experta.

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La decoración mural de la pared de acento

Es importante no colgar cuadros pesados o enmarcados con vidrio en la pared del sofá ni crear un wall art, Astrid sugiere, en su lugar, que apostemos por un tapiz o un elemento decorativo más ligero como la fotografía de pequeño formato de este salón diseño de la interiorista Marta Castellano-Mas. 

Por otra parte, hay que evitar los espejos en esta pared destacada, pues son un elemento demasiado ‘pesado’. No obstante, puedes emplearlos en otros rincones, pues aparte de aportar amplitud y luz, y duplicar la realidad, son grandes dinamizadores de los espacios.

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Un salón armonizado según el 'feng shui'

Es importante que los muebles ‘te arropen’, pues así se genera la sensación de protección, de modo que baja nuestro nivel de estrés y aumenta la energía y vitalidad. ¡Así de simple!

“En un espacio con buen feng shui te sientes cómodo, seguro y protegido. Esto hace que obtengas más energía para conseguir tus objetivos”, detalla Astrid.

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La apuesta natural

Los materiales y texturas del salón si son naturales mucho mejor, como la madera, el bambú, el yute, la rafia, el coco, el lino o el algodón. Por otra parte, Astrid explica que el mobiliario con formas redondeadas o esquinas suavizadas, generan en el espacio una energía más amable y armoniosa como la que encontramos en la naturaleza. Es el caso de este coqueto sofá de Laura Ashley.

¿Qué evitar? “Siempre recomiendo evitar mobiliario con cantos muy agudos o fabricado en materiales fríos, como el metal”, relata la experta.

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La configuración más exitosa

La escuela de la Formas es la escuela más antigua del feng shui y una de las herramientas que utiliza es el mapa Bagua. Este mapa energético divide el plano de tu hogar en ocho áreas. Cada zona corresponde a un aspecto de la vida y de la psicología de las personas que lo habitan. La información que te proporciona permite usar a tu favor la energía que te rodea y tomar las decisiones más adecuadas para que cada espacio cumpla su función de forma óptima. 

“En el caso del salón, su función es crear un ambiente que promueva la buena relación, comunicación y el bienestar físico y emocional de sus habitantes. Un espacio común donde compartir las vivencias del día, leer o mirar una película, relajadamente. Un consejo básico, es empezar eliminando todo aquello que bloquee el paso, es decir, el flujo de la energía. En muchos casos, encuentro en los salones, muebles demasiado grandes que bloquean la energía, y el espacio se siente denso y pesado”, revela la autora de ‘El pequeño libro del Feng Shui’.

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Adoramos un diseño biofílico

Para el feng shui, las líneas orgánicas y los materiales naturales son preferibles en la decoración del salón (y en general, de toda la casa). Astrid detalla los motivos: nos conectan con el estado de equilibrio y armonía de la propia naturaleza. 

“El feng shui es una ciencia basada en la profunda observación de la naturaleza y sus ciclos, las formas sinuosas de los ríos, las colinas, las copas de los árboles, las hojas de las plantas, los pétalos de las flores, las nubes, generan en el ser humano que los observa sensaciones de bienestar. El feng shui bien aplicado incorpora estas formas a través del mobiliario y de la simbología, como, por ejemplo: cuadros, piezas de arte o imágenes y formas evocadoras”.  

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No te cortes con las plantas

¿Cómo influyen las plantas en la energía del salón y cuáles son las más recomendadas? Las plantas son las grandes armonizadoras, porque nos conectan directamente con la naturaleza y con nuestro estado de equilibrio y paz. Aportan al salón una energía fresca y vibrante, haciéndolo más acogedor y relajante. 

Las suculentas (también llamadas crasas) son muy recomendables por su resistencia. Son plantas que necesitan pocos cuidados y siempre lucen bellas y abundantes. Por sus cualidades, según el feng shui, activan la energía de la prosperidad. 

“También recomiendo las plantas con hojas de formas ovaladas o en forma de corazón como por ejemplo el ficus, el poto, el espatifilo, la mariposa blanca Syngonium o el tronco del Brasil. Las formas de las hojas de estas plantas generan más armonía e invitan al diálogo relajado”, señala Astrid.

Por cierto, ten en cuenta que, aunque los cactus con espinas también pertenecen al grupo de las suculentas, es mejor evitarlos o colocarlos en el exterior (terraza, patio o jardín).

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Colores que activan energías positivas 

La experta aconseja emplear los colores neutros como el blanco crudo en las paredes, porque generan una sensación de serenidad y paz tan deseada. Para que el resultado no quede aburrido, sugiere asimismo incorporar notas de colores cálidos (ocres, calderas…), con los complementos o piezas de menor tamaño (como vemos en la imagen con el sillón ‘Soriana’, de Cassina tapizado en una tela de color caldera).

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Iluminación para crear un ambiente acogedor y equilibrado

La iluminación corresponde al elemento Fuego, y el Fuego por excelencia es el sol, así pues, un salón luminoso dinamiza la energía del lugar de forma extraordinaria, en cambio un salón oscuro puede generar ciertos problemas energéticos. En la propuesta H Arquitectes piensa un salón que exaltar la luz natural, que llega de forma cenital.

Respecto a la iluminación artificial, “recomiendo trabajar el salón colocando puntos de luz cálida en las esquinas o para separar ambientes, evitando una única luz central”.

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El toque final: ¡aromaterapia!

Depende de la estación del año las fragancias para el hogar deberían cambiarse, en primavera personalmente a Astrid le encanta la fragancia de lavanda, tan fresca y relajante, pero en invierno recomienda perfumes más cálidos o amaderados. 

“Hay muchas formas de uso, se puede utilizar un difusor de aceites, una vela aromática o unos mikados, ¡siempre naturales!”. Y recuerda: nada sustituye a la fragancia de un ramo de flores frescas recién cortadas. En la imagen, el arte floral ikebana de la mano de Sakura Atelier.

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