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La vivienda unifamiliar 'Casa Ola', situada en una conocida urbanización del norte de Madrid, se inspira en la naturaleza y el mar. Aquí reside la diseñadora de interiores Patricia Bustos (patricia-bustos.com), con su marido, Nacho, sus tres hijos: Maya, Bella y Nachito y el perro, Zeta. Esta familia numerosa se trasladó de un piso céntrico en el barrio de Salamanca a este hogar rodeado de zonas verdes y muy tranquilo, sin el bullicio anterior.
© Manolo YlleraUn cambio vital para una familia numerosa
“Vivir la pandemia en el centro de Madrid nos cambió un poco. Cada día tengo más clara la naturaleza nos aporta bienestar físico y emocional ”, explica Patricia, propietaria de esta preciosa casa de 200 metros 2 envuelta de vegetación. Además, la hermana de la interiorista y sus cuatro hijos, de las mismas edades que los suyos, viven muy cerca, así que se facilita tener encuentros familiares frecuentes.
Siempre he sido una enamorada de la curva. Me parece fluida, relajada y envolvente
El edificio es de los años 70' con una arquitectura pragmática y posmoderna . Estamos viendo la entrada a la vivienda, que es ya toda una declaración de intenciones, porque la curva va a ser una constante de 'Casa Ola' . De hecho, el receptor está inspirado en el tubo de una ola. Por eso el revestimiento de policarbonato translúcido.
“ Siempre he sido una enamorada de la curva. Me parece fluida, relajada y envolvente. Verdaderamente la curva es mucho más armónica con nuestra manera de vivir. La construcción ortogonal, rígida como en cajitas de la ciudad moderna es fruto de un pensamiento 'rentabilista' (rentabilidad económica, del espacio y del tiempo de construcción). En la naturaleza no hay rectas, las líneas son orgánicas y sinuosas. Desde que llegamos al mundo en el útero materno estamos acostumbrados a un espacio envolvente y yo abogo por eso. La curva nos hace felices, nos da paz ”, manifiesta la artífice del proyecto de, recordemos, su propia casa.
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© Manolo YlleraToques canallas
Una de las señas de identidad de Patricia Bustos Studio , que ha participado en varias ediciones de Casa Decor, es un carácter atrevido . El recibidor se introduce un toque de fantasía y sorprendente con la iluminación RGB, que tiene la capacidad de producir muchos colores diferentes.
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© Manolo YlleraUn espacio mágico
La vivienda, distribuida en una única planta, cuenta con dos salones. Este primero es la zona de recibir a la gente y también la preferida de toda la familia. Aquí, las lamas iridiscentes de las ventanas dan lugar a cambios de luz a lo largo del día, desde los verdosos y azulados por la mañana hasta los naranjas más cálidos con la puesta de sol. Es muy espectacular pero también relajado.
“Este espacio define muy bien lo que me gusta. Un ambiente orgánico, creativo y artesanal, pero con un punto de utopía (soy muy soñadora y eso se refleja en esta zona)”, revela Patricia.
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© Patricia de SemirLa armonía de las líneas sinuosas.
Vamos a Patricia en este primer salón de su casa, una oda a las formas orgánicas. ¿Qué te enamora de ellas? “Su armonía. Además, la neurociencia ha demostrado que la curva es más placentera y que nos hace sentir mejor y más seguros. La mayor inspiración en mis proyectos es la naturaleza… No debemos darle la espalda sino regresar a ella”, reivindica.
La neurociencia ha demostrado que la curva es más placentera y nos hace sentir más seguros
No obstante, la diseñadora de interiores considera que la recta también tiene cabida, es más, nos da orden y estructura, pero debe hacer una correcta combinación de las líneas rectas y las curvas, para que la energía fluya mucho mejor en el ambiente (la acústico, el calor, el frío, etc.).
A Patricia le gusta jugar con los contrastes en las texturas, algo que vemos aquí, con una mezcla de lo pulido y liso y la más rugoso. En esta casa veremos desde materiales futuristas como plásticos reciclados, hasta lacas brillo o vidrios degradados, todos ellos en contraste con piedras en bruto como mármol travertino o maderas sin tratar.
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© Manolo YlleraTradición y modernidad
El comedor se encuentra en el centro del espacio, en medio de los dos salones. En él todas las piezas son escultóricas , destacando especialmente la mesa 'Slices' de cemento coloreado y degradado con capas de latón y el sobre de vidrio y la silla 'New Castle', una reinterpretación personal de la clásica silla castellana de toda la vida.
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© Manolo YlleraCreatividad desbordante
Este es el segundo salón, más íntimo . “Es nuestro cuarto de estar en familia. La casa es muy abierta para fomentar la comunicación y el encuentro. Mi marido y yo trabajamos mucho y todo el tiempo que pasamos en casa nos gusta compartirlo en familia”, detalla Patricia.
Mi casa es mi laboratorio creativo. Me gusta experimentar con nuevas piezas
Para decorar la pared el interiorista ideó un mural en cerámica y Pladur que realizó personalmente con dos de sus oficiales. ¡Tardó un mes! Y es que lo hacía por las noches, después de la jornada laboral. Está coloreado con pintura Ecoclay y las formas están inspiradas en los murales de los portales de los años 70' , pero con su visión y su mundo pastel.
En este salón que se integra, insistimos, en un ambiente diáfano con toda la zona de día comunicada, la estantería con baldas en latón hace las veces de separador . Es de diseño propio, al igual que el sofá, las butacas, las mesas de centro, la lámpara de sobremesa y hasta la alfombra de lana en formas orgánicas (el modelo 'Sienna' de venta en Alfombras Peña. “Mi casa es mi laboratorio creativo. Me gusta experimentar con nuevas piezas”, revela Patricia.
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© Manolo YlleraLo mejor de ambos mundos
Esta puerta de cristal es la estrategia perfecta para poder mantener la cocina abierta al resto de espacios sociales cuando se desea y, tan solo cerrando sus llamas, evitar que el ruido y los olores se trasladen al salón en los momentos de la elaboración de recetas.
“Los fines de semana nos gusta cocinar en familia y con amigos y este tipo de cocinas dan pie a que todos disfrutemos juntos del proceso”, cuenta Patricia.
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© Manolo YlleraInfluencia colorista, alegre y estival
La interiorista , aficionada al surf, quería una cocina que la trasladara a la playa y , al mismo tiempo, con un toque de pueblo . Algo muy vivido y apetecible. “Odio las cocinas frías y anodinas. Me parece que este espacio es el 'fuego' del hogar, por ello debe ser cálido”, manifiesta. La encimera , que recuerda a las conchas de la orilla del mar , está hecha de terrazo con piedras semipreciosas que ha ido adquiriendo a lo largo de los años y se hizo in situ . La cerámica con la que se reviste la zona del fregadero y parte de las paredes es de Maora Ceramic y es totalmente artesanal. En este caso, el despiece fue un planteamiento muy pensado para que todas las piezas se colocaran enteras.
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© Manolo YlleraUn comedor diario acogedor
La oficina lo conforman un banco corrido en forma de 'L' y una mesa circular rodeada de taburetes , estas últimas piezas con bonitos colores degradados también son un diseño propio, elaboradas en resina, metacrilato y lana bouclé.
“Nos encanta desayunar y cenar aquí, el ambiente es muy acogedor y confortable”, cuenta Patricia. Quien mantiene la palillería que ofrece un interesante juego de luces y sombras, para relacionar estéticamente este comedor con la cocina anexa.
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© Manolo YlleraInvitación a compartir
Dado que las dos hijas de Patricia , Maya (de 14 años) y Bella (de 12) siempre están invitando amigas a casa , la solución perfecta en su dormitorio fue apostar por las letras , así, queda un ambiente espacioso en el que sus jóvenes Las usuarias se sienten muy bien, porque es su pequeño universo.
A su vez, el acceso a esta zona de noche mediante arcos se debe intentar incorporar por todos los medios la línea curva en el diseño de interiores.
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© Manolo YlleraImaginación al poder
Deportista, el más joven de la casa (Nachito tiene 10 años) tiene en su habitación infantil muchos referentes temáticos, como la estantería a base de tablas de skate .
En este espacio su madre crea un notable contraste entre la cuadrícula del techo y las formas orgánicas de elementos como la mesa de estudio , la lámpara tipo flexo y, de nuevo, el arco.
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© Manolo YlleraUn dormitorio relajante e inspirador
“Para mi marido es su lugar favorito. Siempre que estamos fuera de casa viajando lo que más echa de menos es nuestro dormitorio ”, cuenta Patricia. A su cuidada estética se suma que cuenta con algo que no se ve, pero se nota, un colchón muy confortable (de la firma británica Vispring).
Las lámparas de sobremesa son de Ana Neute y la de techo, es 'Hype XXL', disponible en Galería Philia. El cuadro inspirador es del artista digital Mascaraque. Aunque lo que más destaca de esta habitación es el zócalo revestido con piezas artesanales de Moara Ceramics , como en la cocina.
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© Manolo YlleraImpactar con una pieza de 'efecto wow '
Frente a la cama, la zona de vestidor que cuenta con un pequeño saloncito equipado con un sofá daliniano . La pieza la recicló Patricia del espacio de Casa Decor 2020 que hizo para Hansgrohe 'Metanoia', que tenía un punto surrealista . “Me ayuda a soñar”, revela la interiorista.
Aparte de esta zona de relax, el dormitorio también integra un tocador , donde a su dueña le gusta arreglarse tranquilamente.
© Manolo YlleraUn baño sensual
A un paso del sofá en forma de labios carnosos se encuentra el cuarto de baño de la suite , con unas sexys líneas curvas. Patricia relata: “me encanta la mujer, me inspiran sus formas, sus cualidades como la generosidad, la fecundidad, la protección, la colaboración y el cuidado. Son valores que me representan y que me gusta potenciar. El cuerpo femenino es sugerente y evocador, por eso en este ambiente sirve de inspiración”. Para la diseñadora de interiores la feminidad es el máximo paradigma de belleza , cree que por eso le apasiona tanto y la ha incorporado aquí en forma de jarrón de busto de mujer.
Además, el acabado de ondas del mueble bajolavabo y el revestimiento nos recuerda que 'Casa Ola' no recibe este nombre de forma gratuita.
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© Patricia Bustos StudioUn planteamiento curvilíneo
Este es el plano de distribución de la casa, que muestra un diseño que potencia las líneas curvas .
“La idea al ejecutar este tipo de proyectos es lograr una correcta combinación de rectas y curvas, para que no se te vaya de las manos el presupuesto y, sobre todo, porque el objetivo del proyecto es la sostenibilidad. Si uno se fija, por ejemplo, en la cocina los muebles están planteados sobre paredes rectas, pero están de alguna manera envueltas por curvas. Utilizo los muros perimetrales, que son ortogonales, para amueblar y las curvas cóncavas también. De esta manera los muebles se ajustan fenomenal y el aprovechamiento del espacio es mejor”, detalla Patricia.
A nivel de diseño, es algo más laborioso, pero, en opinión del interiorista, por supuesto merece la pena .
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