Un piso de espacios flexibles en Elche, reformado siguiendo los principios de la neuroarquitectura

‘Casa Ballena’, el piso para una familia numerosa

El proyecto se ha llamado ‘Casa Ballena’ porque aquí vive una pareja con tres hijos a quienes llaman de forma cariñosa ‘ballenas’.

En origen, la vivienda estaba distribuida de manera convencional con el acceso en el punto intermedio entre el salón, el comedor y la cocina y en el otro extremo, los dormitorios. Existían muchas puertas, compartimentaciones y espacios de reducidas dimensiones.

Una vez reformado, la zonificación básica se mantiene, pero transformando el pasillo en un espacio versátil y habitable, por un lado, y configurando, por otro, un único espacio conectado con el anterior definido por el salón, el comedor, la cocina y el lavadero (oculto tras la florida cortina). 

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La neuroarquitectura pone el foco en los habitantes del hogar

Para llegar a esta nueva concepción espacial más flexible y polivalente el estudio escuchó atentamente las consignas marcadas por esta familia con hijos. “Los condicionantes marcan tanto la morfología de la vivienda como la forma en la que sus habitantes se relacionan con ella. Más que añadir dificultad el hecho de que aquí resida una familia numerosa, supone la posibilidad de que la vivienda tenga más complejidad y, por lo tanto, más interés para sus habitantes.

La complejidad es la que abre las puertas a la imaginación. Por ejemplo, sacar una única gran habitación para los hijos, que se relaciona con el resto de la casa, en vez de tres pequeñas ‘cápsulas’ individuales con accesos individuales supone una forma de resolver esa situación. Permite diseñar el espacio desde la forma de interactuar de los niños entre ellos y con el resto de la familia más que desde unas necesidades funcionales estándar y genéricas, realzando la importancia de que los proyectos estén plenamente adaptados a las necesidades de sus usuarios”, expone Antonio.

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Buena integración

Queda plasmado el antiguo uso del comedor como terraza mediante un pavimento diferente del salón y la cocina. Destaca asimismo que precisamente en el que era anteriormente un espacio exterior se introduce la vegetación, con el fin de interactuar con las personas tal y como investiga el arquitecto alemán Roger S. Ulrich en su trabajo ‘Influencias estéticas y emocionales de la vegetación’.

Antonio señala que “uno de los aspectos importantes de la intervención es, precisamente, el de dotar a los espacios de la casa de la condición de versatilidad y adaptabilidad. Para unas actividades y en determinados momentos, las personas necesitan espacios recogidos y con privacidad, sin embargo, en otros justo lo contrario, necesitan compartir el espacio y vivirlo conjuntamente. A nivel práctico, las grandes puertas/paredes correderas, las cortinas o las carpinterías de aluminio permiten que se materialice esta necesidad. El espacio se moldea de una manera o de otra con el fin de que sea una herramienta que permita una forma de vivir y compartir o no el espacio”.

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Los espacios relacionados funcionan para esta familia

Estamos viendo el salón y la cocina, abiertos al comedor ganado a la terraza. Al unir sin crear barreras el comedor al resto de la zona común se gana espacio y luminosidad. 

En esta reforma, más allá del mero hecho de zonificar, la transformación favorecer las relaciones entre espacios y como consecuencia, la relación entre los cinco miembros de la familia, pudiendo tener ambientes versátiles que aporten conexión o independencia según las necesidades o las actividades que se desarrollen.

“Permite controlar y moldear el espacio con el fin de provocar diferentes estímulos en los habitantes. Unas decisiones de diseño que crean un espacio complejo desde el punto de vista sensorial en el que la vista no sea el único sentido que juega un papel predominante, sino que también están presentes el oído o el tacto y en un entorno higrotérmico [relativo a las condiciones de temperatura seca y humedad relativa] que contribuya, no solo al confort, sino también a la salud de las personas que viven aquí”, revela el especialista en neurociencias aplicadas a la arquitectura.

Como punto central de este espacio abierto se encuentra una estructura en acabado de madera y de Krion, que actúa como soporte de la televisión y de la isla de cocina donde un vuelo curvo da lugar a una zona de barra para desayunos. 

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Madera, un material con poco impacto ecológico y saludable

El uso de madera no es casual, se emplea en el pavimento y, en el caso de la cocina, es protagonista del mobiliario. ¿Por qué se emplea este material? Porque configura uno de los estímulos que la arquitectura puede ofrecer a través del diseño. Investigadores de la Universidad de Chiva, en Japón, en su trabajo ‘Efectos fisiológicos en humanos inducidos por la estimulación visual de interiores de habitaciones con diferentes cantidades de madera’ indican que una cantidad entorno al 45% de superficie de madera en el campo de visual da paz y tranquilidad.

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Profusión de madera

“La madera se proyecta desde la misma entrada de la vivienda, no se percibe un cambio y por lo tanto se encuentra mimetizada en el resto de la casa. La madera en el suelo tampoco se interrumpe y se asume que va a sufrir cambios con el tiempo. Esta es una condición material que permite ver el paso del tiempo y las transformaciones que provoca, como cambia el color o la textura”, revela Antonio.

La iluminación artificial en esta zona de cocinado y de aguas se ha estudiado al detalle, como demuestra que el área abierta que integra el fregadero reciba una iluminación precisa y sin provocar sombras mediante una tira de luz integrada en el mobiliario superior.

Por otro lado, insistimos en que la reforma también incide en la creación de espacios saludables. En el caso de este hogar otro detalle crucial es que mantiene los niveles de ventilación e higrotérmicos adecuados gracias al diseño de la envolvente térmica y acústica, así como los sistemas de ventilación y renovación el aire.

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Adiós esquinas en punta, mejor las formas redondeadas

Se emplean líneas curvas, aplicadas no solo para dar continuidad espacial entre los distintos espacios de la vivienda, sino, también, para generar bienestar pues, “como indican investigadores en el campo de la Neurociencia Cognitiva de la Universidad de Las Islas Baleares, las personas encuentran más placenteras los contornos y las líneas curvas que las rectas”.

En el salón esas formas redondeadas están aplicadas en las paredes, mobiliario y hasta las luminarias (la de pie es ‘Superloon’, diseño de Jasper Morrison y que edita la firma Flos). El revestimiento de pared en madera fresada con un patrón de código de barras integra una estantería, para potenciar que se hagan más actividades aparte de mirar la televisión, como la lectura o el juego. 

También cobra gran protagonismo el gran sofá modular de Edra que permite conjugar el espacio de diferentes maneras, algo que garantiza la versatilidad buscada.

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Mucho más que un recibidor

La renovación del piso convierte a la entrada en el eje central que conecta con todas las estancias de la casa. Es un pequeño vestíbulo revestido en acabado madera y tonos amarillos que genera fluidez hacia las zonas comunes y privadas de la vivienda, equipado asimismo con un espejo para multiplicar la sensación de espacio. 

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3 en 1

Frente al recibidor se encuentra el dormitorio juvenil, una zona que invita a compartir también, manteniendo la privacidad de las ‘tres ballenas’ tan solo con un gesto. Para estas habitaciones se decidió un diseño disruptivo. En definitiva, se trata de la unión de tres habitaciones en una, pudiendo privatizar algunas zonas mediante cortinas en azul denim aportando un acento de color. El punto central de este espacio es la zona de estudio, que se ha realizado con piezas cerámicas de Cerámica Ferrés. Las cerámicas construyen los frentes y costados de las zonas de trabajo, donde se ha integrado también la iluminación. Además, en el techo, se han instalado barras de Calistenia, una adición solicitada por los tres hijos para poderse ejercitar. 

En ‘su zona’ no se limitan a dormir o descansar. Y es que el espacio debe ofrecer (y ofrece) diferentes estímulos y ser lo suficientemente versátil como para que sus jóvenes usuarios puedan desarrollar distintas actividades. Sin embargo, “hay un elemento que es común al espacio que es el color. El uso del amarillo en la zona del antiguo pasillo que se convierte en habitación cuando están las correderas de madera abiertas, introduce luz en la zona más oscura. Mientras que el azul de las cortinas y de las celosías ayuda a crear un espacio que facilita la concentración y supone un estímulo que los niños perciben y repercute en el cuerpo favoreciendo los estados de tranquilidad según estudian investigadores en Ingeniería Biomédica de la Universidad de Navamindradhiraj, en Tailandia”, detalla Antonio.

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Privacidad incluso sin puertas

¿Por qué adoptar un diseño tan rompedor? Antonio responde: “En ocasiones se toman decisiones arriesgadas huyendo de lo que ya se conoce. Esta forma de proceder permite obtener habitaciones más complejas y estimulantes. Este tipo de diseño ofrece espacios unidos, de convivencia entre los niños, entre ellos y los padres o entre ellos y los amigos o amigas. Sin embargo, se establecen distintos grados de filtrado del espacio. Unos que dan privacidad visual y, parcialmente, acústica como son las cortinas y otros que establecer un filtro/celosía como son las separaciones caladas de cerámica. El espacio y los objetos que lo configuran no solo tienen una capa de información útil o de percepción, sino que permiten crear estímulos en los hijos pues son ellos mismos quienes les dan uso a esos elementos, por ejemplo, el uso de los huecos de las celosías o de subespacios que aparecen entre ellas y las mesas”. 

Este diseño permite comprobar que la privacidad puede encontrarse con independencia de la existencia o no de una puerta y cuatro paredes.

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Todo listo para las ‘fiestas de pijamas’

En previsión de que los hijos traigan amigos a dormir a casa ya se equipa con más camas. De ahí que se empleen literas, muebles que proporcionan un uso en vertical del espacio. Aparte, “el volumen percibido desde la altura de una litera proporciona una manera muy interesante de percibir un ‘techo cobijo’ para los dos usuarios de la cama en altura”, afirma Antonio.

Los más jóvenes de la casa quieren compartir todos sus pequeños rincones y hacen mucho uso de la zona de estudio. La cortina para acceder a su último reducto de privacidad es algo que, no solo lo han incorporado a su forma de vivir, sino que además les entusiasma. 

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Sobriedad con toques de desenfado

El dormitorio principal es un espacio relajado, donde la madera es el material predominante creando sensación de calidez. Armarios a medida con detalles en tiradores y el baño en suite, para hacer de la estancia una experiencia íntima.

La demanda de los propietarios de este piso en Elche fue contar con un amplio espacio de almacenaje de ropa. Por este motivo se decide introducir un armario en la zona del baño y el otro en paralelo a la cama. 

“Es importante destacar que se aprovecha la entrada de luz natural que hay sobre la cama para iluminar el espacio a través del filtro de la cortina que convierte un foco local de luz en un haz difuso y homogéneo de luz”, afirma Antonio.

En esta casa la diversión entra en juego en varios elementos, por ejemplo, en la habitación con la original decoración de surfista sobre una ballena. Se trata de una pieza que la pareja compró en una pequeña tienda artesanal en Formentera, un recuerdo de la familia que se alineó permitiendo la vista desde la otra punta de la vivienda. 

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Un baño en ‘L’

El baño de la suite cuenta con un gran armario con panelado de madera que hace las veces del vestidor para uno de los propietarios. Este mueble, al girar, se convierte en cajones bajo bancada y por tanto de uso almacenaje de baño. Se apoya con un gran espejo en el frente para mejorar la sensación volumétrica del conjunto y donde se reflejan las cerámicas de pequeño formato que forran casi todas las paredes.

El lavabo realizado con Krion se apoya en una encimera de piedra natural y, enfrente de esta área de cortesía del baño, el mueble se tiñe en un refrescante verde menta. 

Por otra parte, respecto a la valoración del proyecto de reforma hecho por WOHA a su piso, “la pareja de clientes está convencida de haber invertido en un diseño ajustado a sus necesidades y forma de entender la convivencia y uso de los espacios domésticos que les permiten sacar provecho de las zonas que han decidido unificar y disfrutar de los bonitos y saludables espacios que se les ha dedicado”, comenta Antonio. Esta es una vivienda personalizada que se ajusta perfectamente a lo que han solicitado y, mirando a futuro, puede transformarse y evolucionar a medida que las circunstancias familiares cambian.

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