Si buscas un lugar en el que desconectar y viajar en el tiempo, la Casa Taberna que regenta la chef Samantha Vallejo-Nájera es el espacio perfecto para conseguirlo. Construida en el siglo XVII, este hotel-restaurante con más de 400 años de historia se encuentra en un lugar tan emblemático como la Plaza Mayor de Pedraza, en Segovia, un pueblo medieval a menos de dos horas de Madrid.
Aquí no solo se puede disfrutar de la tradicional cocina que ofrece la también miembro del jurado del concurso de televisión Master Chef, sino que podrás sumergirte en el entorno rústico que ofrecen sus espacios. Es todo un viaje en el tiempo. “Casa Taberna es un sueño hecho realidad. Mi amor a Pedraza, mi respeto por la cocina clásica y mi pasión por recibir, se unen en esta casa”, dice Samantha en la página web del establecimiento. ¿Entramos?
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Sencillez y lujo
Una de las particularidades de la Casa Taberna de Samantha Vallejo-Nájera es que ha mantenido su esencia rústica en todos los espacios, desde los comedores hasta las habitaciones o los baños. Piedra, madera y una conexión con la historia son las claves que consiguen mantener ese halo histórico tan acogedor y que se da la mano con el entorno histórico en el que se encuentra. Según reza en su perfil de Instagram (@casataberna), “calidez, simplicidad y lujo” son las claves de este refugio en la villa medieval que ha sido restaurado hasta el último detalle para recuperar su esplendor y mantener la comodidad.
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La calidez de la chimenea
Una de las cosas que más nos gusta de la Casa Taberna de la chef es que todas las suites con las que cuenta el establecimiento están dotadas con una chimenea para que sientas ese carácter rústico y en conexión con el pasado que tanto nos gusta. Y es que la privacidad, el relax y la tranquilidad son señas de identidad de este pequeño hotelito en pleno corazón de la provincia de Segovia, donde se puede reservar alguna de sus suites o, incluso, la casa entera con el salón incluido. Todo un lujo para los sentidos.
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Una casa con vistas
Si algo llama la atención de la Casa Taberna es su ubicación. Por un lado, las vistas nos llevan a la villa medieval amurallada de Pedraza (donde, por cierto, se rodó gran parte de la serie de HBO 30 monedas) mientras que, por el otro, se ve la sierra de Guadarrama. Así, uno se siente rodeado de un entorno natural e histórico único donde pasar unos días al margen de todo lo demás.
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Una arquitectura que bebe del pasado
Llama especialmente la atención el increíble cuidado que se ha tenido en la restauración de esta Casa Taberna, manteniendo no solo su estructura original sino gran parte de los materiales que se emplearon en su construcción durante el siglo XVII. Lo verás en las paredes con pilares de madera o muros de piedra, también en los techos con vigas e, incluso, en las puertas y ventanas que ofrecen esa esencia rústica y que son clave para conseguir ese viaje al pasado.
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Calidez y paz
Una de las claves para contrarrestar con el peso decorativo del estilo rústico con materiales como la madera y la piedra es emplear muebles y una decoración sencilla y sobria. Así, los dormitorios carecen de florituras y en ellos la sencillez es un elemento distintivo de cada estancia. Sus líneas rectas y colores sobrios contrastan con el peso de la madera de los techos y la piedra de alguna de las paredes.
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Un baño también rústico
¿Quién no ha deseado alguna vez darse un baño de lujo en una bañera clásica con patas? En la Casa Taberna podrás hacerlo en cualquiera de sus habitaciones. Y es que el estilo rústico no solo se aprecia en espacios comunes o en los dormitorios, sino que también es protagonista en los baños. Aquí, de nuevo, la madera, junto con el acabado dorado y la piedra se dan la mano para crear entornos idílicos en los que relajarse. Un baño en una de sus bañeras tiene un efecto terapéutico único que te hará sentir como nuevo.
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Un espacio único que atrae a mucha gente
Muchos son los que visitan la Casa Taberna de Samantha Vallejo-Nájera. Un ejemplo es la mayor de las hermanas Pombo, Lucía, que quiso inmortailzar su visita en la escalinata del establecimiento. Y es que este rincón de la Casa Taberna es un aperitivo que demuestra cómo será el resto del espacio y donde lo clásico se hace hueco y ayuda a desconectar.
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Una comida clásica con un toque moderno
No solo puedes disfrutar del increíble entorno que ofrece la Casa Taberna gracias a su aspecto hotelero, sino que también puedes hacerlo gracias al restaurante que regenta la conocida chef. Y es que su cocina está llena de platos clásicos con un toque moderno y para al gusto de todos los paladares.
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Clásicos renovados
Croquetas, consomé, puerros a la brasa, steak tartar de chuleta, flores de alcachofa, canelones de carrillera con espinacas o flan brûleé de queso son algunos de estos platos que no puedes dejar de degustar. Y todo en ese entorno único, de carácter rústico, donde cada pared y cada viga cuenta una historia.