10 reglas de oro para guardar todas tus cosas en el baño y mantener el orden

Si existe una estancia en la casa en el que es verdaderamente complicado mantener el orden esa es, sin duda, el cuarto de baño. Para empezar, suele tratarse de espacios reducidos en los que no sobran los metros cuadrados, sino todo lo contrario. Además, solemos tener muchas cosas que guardar.

Por último, al ser una zona de uso diario e intensivo, el desorden lo tiene fácil para colonizar cada espacio, desde los muebles y los cajones hasta las repisas. Con todos estos elementos en la ecuación se produce la tormenta perfecta: el caos está servido.

Regla nº1: No procrastinar

Cuando se trata de ordenar el baño, ninguno de nosotros parece tener tiempo. Siempre hay cosas más urgentes que hacer, por lo que es muy fácil caer en la procrastinación e ir posponiendo la tarea en el tiempo de forma indefinida. ERROR con mayúsculas.

Para evitar esta situación y no seguir viviendo en el desorden de nuestro baño, es clave armarse de voluntad y prepararse mentalmente para acometer la tarea de una vez por todas. ¿Tienes problemas para poner orden en el cuarto de baño? Divide ese trabajo en subtareas más pequeñas y asequibles, que puedas hacer en pequeños ratos que tengas libre.

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Regla nº2: Comienza por sacar todo fuera

Ordenar el cuarto de baño es un proceso que comprende diferentes fases. En la primera los resultados están lejos de poder apreciarse, pero hay que pasar por todas las etapas hasta llegar al final.

Lo primero que debes hacer, ahora que has decidido ordenar tu baño, es abrir los armarios y cajones y sacarlo todo. Deja vacío el mueble del lavabo y cualquier otro armario que tengas. Vacía también estantes y demás accesorios de almacenaje. Limpia a fondo los muebles, especialmente el interior.

Un consejo: este es el momento de hacer limpieza también en tu arsenal de cosméticos y productos. Tira todo lo que ya no uses y también lo que esté estropeado o caducado.

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Regla nº3: Clasifica y vencerás

El orden, en el baño o en cualquier otro espacio de la casa, ha de tener siempre un sentido. Por eso, y para poder organizar las cosas de la mejor manera posible, lo primero que debes hacer es clasificar todo lo que tienes que guardar.

Haz grupos según el uso y también en función de tus propias rutinas: los productos de la ducha, toallas, todo lo que necesitas para tu rutina de mañana, cosméticos para el cuidado de la piel, el maquillaje, los productos del cabello, etc. Una vez tengas tus cosas clasificadas podrás pensar cuál es la mejor forma de almacenarlo todo.

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Regla nº 4: Invierte en almacenaje

Ya tienes clasificado todo lo que hay que guardar en distintas categorías. Ahora llega el momento de asignar un sitio a cada grupo y para ello tendrás que buscar el accesorio de almacenaje más adecuado en cada caso.

Puede ser una cesta, una caja o un estuche con varios apartados. Dar con el accesorio perfecto es lo que va a marcar la diferencia entre un baño que no cuesta trabajo mantener en orden y otro que se desordena a la primera de cambio.

- Cajones: necesitas elementos que te ayuden a compartimentar el interior, ya sean cajas o separadores. Han de tener la misma altura (o inferior) que el propio cajón.

- Armarios: elige contenedores multiusos de la medida adecuada al interior del armario y a aquellas cosas que vas a guardar.

- Estantes: apuesta por soluciones que aporten diseño y no solo te sirvan para guardar cosas. Cuando el almacenaje es abierto conviene optar por cajas y cestas decorativas.

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Regla nº 5: Despeja la encimera

Puede que tu cuarto de baño sea muy pequeño y no cuentes con armarios y muebles suficientes. O puede que quieras tener ciertas cosas de mucho uso en la encimera del lavabo. Sea como sea, es importante conseguir que en esta superficie todo esté recogido para no generar caos visual. ¿Cómo? Con bandejas que te permitan reunir las cosas y den sensación de orden. De esta forma las cosas quedarán reunidas y no estarán desperdigadas por el espacio.

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Regla nº 6: Apuesta por el almacenaje en altura

Este es un recurso práctico en espacios reducidos, lo que no significa que tengas que llenar las paredes de estanterías hasta el techo. Más bien se trata de aprovechar la altura para apilar cajas o elegir accesorios con compartimentos en varios niveles. De esta forma, maximizarás cada hueco y podrás guardar muchas más cosas. La falta de espacio es un reto que nos ayuda a encontrar la solución perfecta en cada caso.

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Regla nº 7: Ten en cuenta la armonía visual

A la hora de elegir los accesorios y elementos con los que vas a tratar de poner orden en tu baño podrás seleccionar los que más te gusten entre muchos materiales: metal, madera, fibras naturales, plástico o resina, etc. Es importante tratar de mantener cierta armonía decorativa con respecto al estilo de tu baño y optar por elementos que no distorsionen.

Un consejo: además de decorativos, los elementos que elijas deben ser resistentes y no deteriorarse en poco tiempo. Si se ponen feos enseguida el resultado puede ser nefasto.

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Regla nº8: Organiza los productos de repuesto

Cuando el espacio lo permite es buena idea contar en el baño con un rincón para guardar suministros de uso frecuente, como los repuestos del gel o del jabón de manos, o los rollos de papel higiénico. Sin embargo, si el espacio para guardar es muy limitado, estas cosas son las primeras que deben salir del baño.

Busca otro lugar en la casa donde puedas almacenarlas, ya sea un armario en un pasillo o un hueco en el tendedero. Por una parte, puede que resulte menos cómodo ya que no lo tendrás todo tan a mano, pero eso liberará espacio para otras muchas cosas que tienes que guardar.

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Regla nº 9: Ayúdate de las etiquetas

Poner etiquetas a los contenedores en los que guardas tus cosas del baño puede resultarte muy útil, aunque te parezca algo innecesario. Es una buena idea para asignar un sitio a cada cosa y conseguir que todo esté localizable, lo que te facilitará las rutinas de aseo y te dará una visión general de esos productos que te faltan y tienes que reponer, así como de los que están a punto de acabarse, etc. Y si tienes niños pequeños en casa, las etiquetas les ayudarán mucho a ser más autónomos.

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Regla nº 10: Programa una revisión mensual

Si sigues las reglas anteriores que te acabamos de contar lograrás ordenar tu cuarto de baño y que éste se mantenga en el tiempo. Sin embargo, para que esto sea posible es necesario que programes una revisión mensual dentro de tus rutinas de limpieza doméstica.

Ya sabes que, en lo que a la organización de la casa se refiere, lo más difícil es conseguir que los espacios sigan ordenados según vaya pasando el tiempo. Por eso necesitas revisar el almacenaje de tu baño al menos una vez al mes: es la clave para poder tenerlo perfecto. Verás qué soluciones funcionan y cuáles hay que mejorar, qué productos te sobran y cuáles faltan, etc.

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