Diciembre es el mes de las celebraciones y quedadas en casa por excelencia. Y ya no solo en las fechas señaladas de Nochebuena, Año Nuevo y Reyes, sino también por todos esos planes que surgen en torno a la Navidad: quedar con amigos para intercambiar lotería, organizar el amigo invisible, cenar con familiares con los que no pasaras las fiestas… Por eso, sí o sí, conviene que estés preparada para cualquier evento que pueda surgir. Aquí tienes 10 ideas decorativas que te ayudarán a que tu comedor esté siempre listo: desde qué hacer para optimizar un espacio pequeño hasta cómo preparar una mesa bonita en la que no falte detalle.
Que por falta de espacio, no sea
Seguro que en más de una ocasión has deseado que tu comedor fuera más grande de lo que es para dar cabida a más invitados. Bien, no necesitas más metros sino soluciones tan prácticas y versátiles como una mesa de comedor extensible que te permita ampliar la capacidad de tu comedor en cuestión de dos minutos. Esta es el modelo Ruskin, de Habitat, que pasa de 126 a 200 cm. Otra idea es acoplar una segunda mesa (puede ser tu escritorio, la mesa de comer de la cocina o la de la terraza) que tenga la misma altura, eso sí, para que los sobres estén perfectamente nivelados.
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Junto al sofá
Cuando se trata de reuniones más informales o improvisadas, donde la atmósfera es relajada y el número de invitados reducido, la mesa de centro del salón se convierte en un espacio ideal para organizar una estupenda cena. Podrás aprovechar las mesas auxiliares como superficies de apoyo y completar la zona de asientos con pufs o cojines de suelo que potencien al aire desenfadado de la reunión. Las mesas nido, como ésta de La Redoute Interiéurs, son de gran ayuda en situaciones como éstas, ya que cuando necesites más espacio solo tendrás que desplegarlas y una vez los invitados se hayan ido, acoplar una debajo de otra para que ocupen lo mínimo.
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Gana superficie de apoyo
Un carrito es el mueble auxiliar que tu comedor necesita para ser un espacio aún más cómodo. Además de convertirse en una extensión de la mesa, donde podrás colocar platos y otros utensilios durante la comida, será también un práctico punto de apoyo para tener aperitivos y bebidas al alcance de todos. Pero aún hay más. Cuando llegue el momento de recoger la mesa, con un carrito podrás ahorrarte unos cuantos paseos a la cocina. Este modelo es de la firma House Doctor.
Leer: ¿Sabes cuántos usos puedes darle a un carrito auxiliar?
Poner la mesa
Lo primero que debes plantearte es una temática, un hilo conductor, que dé unidad a la presentación de la mesa. Sin duda, lo más fácil es partir de la vajilla y, a partir de ahí, escoger el resto de las piezas. Y aquí está el truco: atrévete a mezclar platos de vajillas diferentes, combina estilos, colores… ¿Por qué no elegir un plato diferente para cada comensal? En este caso, para lograr una composición visualmente atractiva y armoniosa, conviene mantener un elemento común, como un color predominante que se repita en cada plato (éste es de la firma Dobbies Garden Centres). También puedes jugar con un motivo decorativo similar en cada plato o incluso coordinar accesorios como las servilletas para establecer una cohesión estilística.
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Llega el momento de elegir la cristalería
Si no tienes claro con qué cristalería acompañar la vajilla, apunta este consejo. Lo ideal es que en la presentación de la mesa no haya demasiados elementos visualmente potentes, con uno o dos sobre los que recaiga el protagonismo será suficiente. Así que, a una vajilla sencilla le irán de maravilla unas copas con mucha presencia que realcen la presentación de la mesa. Si los platos son llamativos, combínalos con una cristalería que no recargue la composición. Estas piezas de cristal son de Ferm Living.
Leer: Copas y vasos de colores: las piezas preferidas de la crislatería
Cuida los detalles
Para esas comidas más formales, viste la mesa con un mantel bien planchado (siempre suma una dosis de elegancia). Si la reunión es más relajada, los individuales son una opción perfecta. ¿Y adivina qué? Puedes mezclarlos para un estilo único. Hazlo más personal escribiendo los nombres de los comensales o detallando el menú con tu mejor letra. ¡Ah! No te olvides de unos arreglos florales sencillos pero encantadores. En cuanto a las servilletas, escógelas a tono con el mantel y dóblalas de una forma especial, como se ha hecho con éstas, de la firma b&m.
¿Qué tipo de evento es?
La colocación de los cubiertos, vajilla y cristalería hará ver con facilidad si estamos en una reunión formal o informal, aunque te adelantamos que la diferencia principal es la cantidad de elementos que hay en cada presentación.
En una mesa formal encontraremos un bajoplato, el plato de servicio y el plato de sopa o ensalada; tres copas (una de agua, una de vino tinto y otra de vino blanco); tres tenedores que van al lado izquierdo del plato. El más cercano al plato es el de carne, le sigue el de pescado y finalmente el de ensalada. Al otro lado del plato va un cuchillo de carne, un cuchillo de ensalada y una cuchara. Delante del plato se colocan los cubiertos para el postre en posición horizontal y delante de los tenedores, un plato de pan y cuchillo para untar. La servilleta de tela irá también al lado de los tenedores.
Si se trata de una reunión informal no es necesario incluir un bajoplato. Se puede poner un plato llano y sobre éste, un plato hondo y la servilleta, como vemos en esta mesa de IKEA. Al lado derecho del plato se coloca un cuchillo seguido de una cucharita y una cuchara sopera (siempre que se vaya a utilizar), y al lado izquierdo, el tenedor principal y otro de ensalada. Con un vaso de agua y otro de vino será suficiente.
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Crea una atmósfera acogedora
Para ello, nada como decorar la mesa con materiales naturales y una paleta de colores suaves que transmitan sensación de tranquilidad, como esta propuesta de El Corte Inglés, con textiles de algodón en color crudo, individuales redondos de fibra vegetal y platos de la colección Malte, de gres esmaltado en tonos crema y marrón.
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Decora con flores
Dale vida al ambiente con arreglos florales, que pongan un toque fresco y encantador. El nivel de complejidad queda a tu elección: composiciones muy eleboradas o algo más simples, lo que mejor se ajuste al ambiente que deseas crear.
La clave está en que no rompan con el estilo general de la mesa, sino que se integren de manera armoniosa tanto con la decoración de tu comedor, como con los colores de la vajilla (ésta es de Vista Alegre).
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El toque navideño
En este mes, es inevitable querer impregnar el hogar del espíritu navideño. Por eso, aunque tengas planeado recibir visitas en las primeras semanas de diciembre, no hay nada que impida darle a la mesa un sutil toque festivo. Un mantel estampado, como este de Verdonce, puede ser la elección perfecta. Su diseño delicado añade un toque festivo sin ser demasiado abrumador, creando un ambiente acogedor y alegre para tus encuentros en casa durante esta temporada tan especial.
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