9 formas de combinar el sofá con las butacas y la mesa de centro

Una de las claves para que la imagen de tu salón sea homogénea y equilibrada es saber elegir bien el mobiliario, pero también combinarlo. El sofá, las butacas y la mesa de centro son los tres elementos más importantes del salón, los que más usamos y los que mayor protagonismo tienen. Por eso, saber combinarlos es clava para lograr ese equilibrio. Hemos reunido 9 salones distintos con diferentes propuestas para que te den ideas para combinar estos tres elementos y que su salón parezca de revista. ¡Manos a la obra!

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Con esencia azul 

En este salón, el sofá con chaise longue en azul turquesa es el auténtico protagonista. Pero si hay algo en lo que debemos fijarnos es en el ribeteado blanco, que sienta las bases cromáticas de este espacio. Para que la butaca combinara con equilibrio con el sofá, pero sin robarle el protagonismo, se ha elegido un tapizado en blanco, eso sí, con el ribete en el mismo azul turquesa que el sofá.

El detalle más elegante lo pone la mesa de centro, de diseño ligero y muy moderno y con sobre en acabado en mármol. Aunque con ciertos matices clásicos, este material se ha reconvertido gracias los nuevos materiales que lo reproducen y que ayudan a subir el nivel de cualquier espacio. 

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Juego de neutros

Cuando la luz y el espacio están garantizados, elegir un sofá con tapizado en negro y rinconero puede ser todo un acierto. Aquí es básica la ubicación de los muebles, colocados mirando hacia la luz. Para cerrar el círculo, se han colocado sendas butacas con un tapizado jaspeado en marrón y blanco, de manera que no se 'pega' con el negro, sino que ayuda a dar un poco (más) de luz al ambiente.

De nuevo vemos cómo el mármol de las mesas de centro se encarga de poner el punto elegante. Ahora, en esta ocasión la vemos en pareja y con una imagen ligera. Así se pueden mover cuando sea necesario. 

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El punto de encuentro 

El blanco y el beige son dos de los colores (junto con el gris) más empleados para el tapizado del sofá y butacas del salón. Y es que esta elección garantiza no solo un carácter más atemporal, sino que, además, ayudan a dar mayor luminosidad y amplitud. Y lo mejor es que estos colores combinan a la perfección. 

Al elegir la mesa de centro, un material que no falla es la madera, aunque la interiorista Pia Capdevila ha preferido arriesgar con un conjunto de mesas nido bajas y con forma redondeada. ¿La clave? Que reproducen los mismos colores del sofá y la butaca. Así, el beige y el blanco encuentran su punto de encuentro en las originales mesas de centro. ¡Nos encanta!

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El punto cálido

Cuando las líneas modernas mandan, se puede pecar de una decoración fría y sin personalidad. Por eso es importante añadir elementos que aporten carácter y ayuden a subir la temperatura. En este salón, decorado por el interiorista Mikel Irastoza, es la butaca de madera y ratán la que pone el punto cálido y donde, sin remediarlo, se posan todas las miradas. Además, mantiene el mismo estilo moderno del sofá y la ligera mesa de centro. Al elegir las butacas del salón, puedes ir más allá y no limitarte a las tradicionales. Haz como aquí el interiorista y añade alguna pieza que destaque y aporte personalidad. 

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De líneas modernas

Para que la decoración del salón sea homogénea, es importante saber elegir muebles tanto de líneas rectas como curvas, especialmente cuando el marco es una estantería de líneas rectas que ocupa toda la pared. Así, un sofá moderno de diseño sencillo y minimalista es la mejor pareja del par de butacas de un estilo bold y un tapizado más clásico. Contribuyendo a estas líneas curvas y creando contraste con la estantería a medida, la ligera mesa de centro con sobre de cristal en negro.  

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Clásicos que se modernizan

En este salón, si hay una pieza que nos ha robado el corazón, es el sofá de líneas modernas que recupera el tapizado en capitoné y que es el protagonista indiscutible de este salón. De un estilo más sobrio, aunque sin perder ese estilo actual, son las butacas con reposapiés de color azul verdoso y que cierra el conjunto. 

Para completar el salón, la interiorista Laura Yerpes ha colocado dos mesas de centro cuadradas con sobre de madera deslavada que mantienen el protagonismo del imponente, moderno y elegante sofá.  

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Los textiles tienen mucho que decir

El color de los cojines que elijas para decorar el sofá pueden ser clave para elegir el tapizado de la butaca y que el resultado sea equilibrado. En este salón, vemos cómo los mismos colores de los cojines se reproducen en el tapizado del sillón, consiguiendo una decoración con unidad. 

Por su parte, la madera de la mesa de centro hace pareja con la estructura de las butacas del otro lado del salón. Así se mantiene el equilibrio, dotando, además, al espacio de toda la calidez que proporciona la madera de roble. 

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Unidos por los cojines y las texturas

De un estilo de lo más diferente y con una clara mezcla de tendencias, este salón resulta equilibrado y homogéneo. ¿Cómo se ha conseguido? Por un lado, es gracias al uso del color. De nuevo, diferentes gamas de beige decoran tanto el sofá beige como las butacas de estilo bold en tapizado bouclé. Por otro, es gracias a los complementos. La manta de borreguito sobre el sofá hace un guiño a las butacas, mientras que los cojines de rayas en todas las piezas ayuda a crear esa unidad. 

¿Y qué pasa con las mesas de centro? En este caso, una de madera hubiera sido una elección acertadísima. Incluso quedaría bien una pieza potente y con presencia de madera maciza. Pero el interiorista Rober Quiñones-Her quería mantener la ligereza que regala la gama de colores empleada, por lo que se decantó por un conjunto de mesas nido de influencias nórdicas pequeñas y muy sencillas. 

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El color une

Una manera de acertar a la hora de combinar el sofá con las butacas es que presuman del mismo color. Así, incluso cuando su diseño es distinto, el equilibrio está garantizado. Es lo que hizo el equipo de Tinda's Project en este salón, donde colocaron una originalísima mesa minimalista en blanco compuesta por cuatro bloques, de manera que se pueden utilizar como asiento cuando haga falta o mover en caso de que se necesite. 

Uno de los factores para no fallar con esta solución es limitarse a colores neutros y lisos que combinen entre sí. El blanco y el gris son apuestas seguras. 

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