Las ideas más espeluznantes para decorar una 'casa de miedo' en Halloween

Puede ser por los disfraces, por la emoción que brinda el miedo, o por las ganas de vivir una terrorífica ‘noche de muertos’. El caso es que Halloween es una de las fiestas más celebradas, divertidas y populares del mundo. Pero, ¿sabes de dónde procede esta pavorosa tradición? ¿Por qué se celebra el 31 de octubre? ¿Necesitas ideas para crear en casa una atmósfera de lo más terrorífica? ¡Prepárate!

La víspera del día de los difuntos

Hoy Halloween es una festividad global. Se celebra en prácticamente todo el mundo, aunque en función de los países y las latitudes pueden cambiar algunas costumbres y tradiciones.

Lo cierto es que, gracias a la globalización, también las fiestas se trasladan de unos lugares a otros. Incluso en España, donde antaño se celebraba el Día de Todos los Santos, una celebración de marcado carácter religioso en honor a los difuntos, hoy Halloween tiene una gran aceptación, en especial entre los más pequeños de la casa que esperan ansiosos que llegue esa noche tan esperada.

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De Europa a Estados Unidos y de allí… ¡al mundo!

Cada año que pasa la festividad de Halloween está más arraigada en nuestro país. Sin embargo, en España el ‘truco o trato’ es relativamente nuevo. Antes se celebraba el Día de Todos los Santos el 1 de noviembre, con un sentido religioso y no lúdico, en honor a los difuntos. Se solía acudir al cementerio, a honrar a los que ya no están para llevarles flores. Sin embargo, ese día se ha ido sustituyendo por la fiesta internacional de Halloween. Esta festividad tuvo su origen en Europa, desde donde viajó a Estados Unidos. Allí transformó su esencia y se convirtió en la celebración que es hoy.

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Una fiesta de origen celta

Hace más de 2000 años, en tierras de Reino Unido, Irlanda y el noroeste de Francia, los pueblos celtas celebraban el inicio del invierno y el final de la cosecha con una fiesta pagana conocida como Samhain que tenía lugar el 1 de noviembre.

Ellos estaban convencidos de que, ese día, los difuntos regresaban del más allá para visitar a los suyos. Por eso encendían hogueras para ahuyentar a los malos espíritus y usaban máscaras para que los fantasmas no pudieran reconocerles (de ahí que ahora los disfraces sean esenciales en Halloween).

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La casa decorada, por dentro y por fuera

Cuando en el siglo XIX los inmigrantes oriundos de Irlanda y Escocia llegaron a Estados Unidos en busca de una nueva vida, llevaban consigo sus propias tradiciones y cultura. Fue entonces cuando los americanos hicieron suya la fiesta de Halloween.

Esta palabra procede de la expresión All Hallows’ Eve, que no es otra que la “Noche de todos los Santos”. Ellos celebran la ocasión por todo lo alto, decorando las casas por dentro y por fuera (tal y como puedes comprobar en estas imágenes de fachadas vistas en los edificios de Manhattan, en Nueva York) con un repertorio de adornos monstruosos. Se puso de moda el “truco o trato”, una tradición en la que los niños van por las casas pidiendo caramelos y golosinas; de ahí la importancia de adornar la fachada y la entrada de forma tenebrosa y fantasmagórica. Brujas, esqueletos, telarañas, tumbas... Todo tiene cabida en los espacios de exterior.

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Los mejores accesorios para un interior muy tenebroso

El recibidor, el salón, el comedor, las zonas de estar…Todos los espacios de día de tu casa pueden ser decorados para la festividad con un toque espeluznante y especial.

Para empezar, es buena idea empezar por adornar las paredes. Hay muchísimas ideas para poner en práctica: bandadas de murciélagos, tarántulas amenazantes, calaveras y todo un entramado de telarañas. La clave está en invertir en objetos decorativos y adornos de calidad, que puedas reutilizar durante varios años. Solo tienes que disfrutarlos y, una vez Halloween llegue a su fin, guardarlos para el próximo año, igual que haces con la decoración navideña.

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Rincones oscuros y sobrecogedores

No necesitas muchos elementos para crear una atmósfera tétrica en un rincón de tu casa. Unas calabazas amontonadas, velas negras, arañas y murciélagos, una calavera o un muñeco inquietante y telarañas falsas (un recurso de lo más sencillo y asequible que logra, sin embargo, un resultado tenebroso y genial). Ya tienes una decoración de Halloween de bajo presupuesto y alto impacto.

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Las calabazas, un clásico que no puede faltar

En los tiempos en que los celtas celebraban Samhain solían utilizar nabos vaciados para iluminar sus ritos. En el siglo XIX, cuando Halloween se populariza en Estados Unidos, se comienzan a utilizar calabazas vaciadas y talladas como linternas. Se conocen como Jack O’Lanterns. Según cuenta una leyenda, Jack era un hombre malvado que no fue admitidos en el cielo ni en el infierno al morir, por lo que tuvo que vagar por toda la eternidad con un carbón encendido para prender su linterna.

La calabaza es uno de los símbolos más destacados de Halloween, por lo que encontrarás cientos de modelos de todos los materiales, formas, tamaños y colores, perfectos para decorar cualquier espacio de la casa. Estas tan decoativas son de Amazon.

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Una fiesta para los niños

Los más pequeños son los verdaderos protagonistas de esta fiesta especial. Si tienes niños en casa lo mejor es evitar los detalles más escabrosos y optar por adornos y complementos de decoración que no les asusten.

Para celebrar una fiesta de Halloween infantil, apuesta por calabazas, fantasmas divertidos, momias, brujas y vampiros. Decora la casa, prepara ricas recetas que les gusten y ten preparados algunos sombreros de bruja y capas de vampiros para que ningún peque se quede sin disfrazar. Los tienes geniales en Zara Home. 

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¡A merendar! Ideas para una mesa de miedo

La decoración de la mesa en Halloween puede convertirse en toda una aventura. Además de mil preparaciones y recetas para cocinar, fáciles y resultonas, encontrarás un sinfín de ideas para decorarla y lograr un efecto wow, divertido e inquietante al mismo tiempo. Vajillas con formas relativas a la fiesta (como estos platos de calabaza de El Corte Inglés), cuencos y vasos con los colores típicos de Halloween (blanco, negro, naranja, etc.), guirnaldas con calabazas de papel y velas con candelabros para poner un toque de luz.

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Que no falten las velas

Son el recurso perfecto para iluminar cualquier espacio de la casa en Halloween, sobre todo si las eliges de color negro, naranja o morado. Te servirán para completar ese rincón especial, para poner en la chimenea si no la enciendes, para decorar la mesa y darle un brillo especial, etc.

Haz composiciones con velas de distintas alturas para crear dinamismo, o ponlas en un candelabro. Hay velas para Halloween grandes y pequeñas, incluso con forma de calabaza, como estas de Anthropologie.

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Triunfan las ideas originales

En ocasiones no hace falta ser muy explícito para crear una atmósfera inquietante que provoque miedo. Si las ideas son originales, pueden resultar muy tenebrosas.

Un gato negro en un rincón, una escoba de bruja apoyada en una esquina o un simple camisón blanco suspendido del techo con hilo invisible, cual fantasma, pueden obrar el milagro del horror. ¡Dale alas a tu imaginación!

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