Transparentes pero muy vistosas. Una mesa de centro en cristal nunca pasa inadvertida. Una de sus principales ventajas es que resultan amplias. Puedes tener una mesa de centro aún en un espacio pequeño sin saturar. Queremos darte más motivos, o mejor dicho, diez concretos por los que debes escoger un diseño así.
Elegancia atemporal
Las mesas de centro en cristal no son clásicas ni tampoco modernas. Sin eternas. Se pueden diseñar en todo tipo de estilos en combinación con todos los materiales que imagines porque el cristal casa con todos. Permite formas imposibles, efectos de continuidad, acabados ahumados, tintes… Y siempre son elegantes. Este salón, decorado por Hino Studio cuenta con una mesa cuadrada en el centro, con sobre de cristal y una base irregular en metal negro.
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Dejan que se luzca el suelo o la alfombra
Con su transparencia, otra de las razones para elegir una mesa de centro de cristal es que dejarán que el suelo o la alfombra que has escogido con tanto mimo se luzcan. Sobre todo cuanto se trata de un modelo especial. Nada entorpecerá la sensación de continuidad. Este proyecto es de Raquel González interiorismo con estilismo de Cristina Rodríguez Goitia.
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Una mesa de centro en cristal siempre resulta ligera
El cristal transparente es ligero visualmente. Conseguirás tener una mesa de centro, una superficie de apoyo delante de los sofás, sin saturar la zona. Y se fabrican en todos los tamaños que imagines (y formas). Si el cristal es tintado o ahumado, la pieza destacará más, por lo que se perderá en cierta medida esa sensación de ligereza. Proyecto de Fare Inc.
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Es un elemento neutro, si hablamos de estilos decorativos
Si cuentas con un espacio de muebles y complementos muy marcados, que definen el estilo de tu salón, puede que precises de una mesa de centro neutra que no distorsione o sume. Ese punto de equilibrio lo pone una mesa de centro de cristal. Sin necesidad de que sea un modelo marcado, busca un diseño neutro, de líneas básicas, que se adapte perfectamente al estilo decorativo sin complicar la composición. En este salón, un diseño cuadrado de pie central sobre una alfombra modelo Scales Pearl de The Rug Company.
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Es una pieza muy personalizable
De igual manera de que se trata de un elemento neutro, ¡la puedes personalizar fácilmente! No te costará sobre una mesa de centro de cristal añadir los accesorios y complementos decorativos que personalicen la composición. En los modelos con tapa inferior -como este de El Corte Inglés- tendrás una doble tarea con la decoración tanto del sobre en sí como de ese espacio inferior.
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El cristal encaja con todos los acabados
Mármol, laca, madera, piedra, cemento, todo tipo de texturas y tapicerías… Si ya hemos mencionado que una de las razones que te pueden llevar a escoger una mesa de centro de cristal para tu salón es que encaja con todos los estilos decorativos y tendencias, también con los acabados que imagines. Así que no tendrás que pensar en los muebles del salón y en los tejidos de las tapicerías, porque una mesa de cristal encajará. Si el diseño cuenta con algunos detalles en materiales o colores, entonces sí que deben tenerlo en cuenta. Pero al ser predominantemente de cristal, su neutralidad, hará que nada desentone. Este es un proyecto con varias mesas de cristal cuadradas con perfil en negro en el estar, del estudio Tinda's Project, con estilismo de Mar Gausachs.
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Matices en el cristal
El cristal transparente es la elección más neutra y sencilla, pero para los que quieren darle algo más de protagonismo a una mesa de cristal con un diseño sencillo, escoger un cristal ahumado aporta color. Openideas Architecture and Interior Design ha escogido en este salón un conjunto de tres mesas de centro del mismo diseño en varios tamaños, lo que aporta movimiento. Su estructura negra, de bordes redondeados y cristal ahumado en gris, contrasta con los sofás en blanco. El conjunto resulta moderno y ligero, sobrio y elegante al mismo tiempo.
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Todo son ventajas en su mantenimiento
Las mesas de cristal son de fácil limpieza y mantenimiento. Basta con usar un limpiacristales y un paño suave, que no ralle la superficie, para que quede como nueva. Y eliminar huellas, que son el principal inconveniente del cristal. También has de tener cuidado con los golpes fuertes. Salón proyectado por TR Studio y GEB London.
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A pesar de ser de cristal, son resistentes
Son resistentes a las manchas porque son impermeables, no necesitarás poner ni posavasos si no quieres. Las manchas no penetran y se limpian bien. Es cierto que debes tener cuidado con los arañazos de los acabados puntiagudos o rugosos, pero el cristal es resistente a los golpes. Las mesas de centro de cristal suelen ser templadas para que si se rompen, no se creen trozos peligrosos. Además, son seguras, puesto que los bordes tienen acabados biselados y pulidos. Propuesta decorativa con dos butacas tapizadas en color verde con mesa baja de centro con sobre de cristal de COS Architects.
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También mesas de cristal circulares
Y si lo que quieres es una mesa de centro o varias redondas, que aporten movimiento a la zona de estar o que no ocupen demasiado, las de forma redondeada u ovalada son idóneas. Y sí, también pueden ser en cristal. Con o sin perfilería. Las que no cuentan con ella, resultan más "transparentes", se dibujan menos sus bordes y son más ligeras. Proyecto de Sincro con mobiliario de Tegar.
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Formas irregulares en cristal
Este es el efecto que logra una mesa de centro en cristal de forma sinuosa sin perfiles. Así puedes comparar con el modelo tipo nido anterior con su marco en negro. Este modelo Pond se vende en Westiwing y el sobre se apoya sobre una estructura tubular de madera, que asoma ligeramente por encima del cristal.
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