Pasa el tiempo y, casi sin darte cuenta, el cuarto de baño que antes te encantaba ahora te parece anticuado, soso y aburrido. Es el momento de hacer algunos cambios que revitalicen la decoración. O quizás se requiere un proyecto mayor y una reforma integral.
Sea como sea, las ideas que te explicamos a continuación pueden inspirar tus próximos pasos a la hora de redecorar el baño.
Pintar las paredes
Revestir las paredes del baño con azulejos no es obligatorio, ni tampoco es la única opción. Existen otras muchas alternativas entre las cuales está, sin duda, la pintura.
Si decides pintar las paredes tendrás que utilizar un producto especial: una pintura plástica antimoho que sea adecuada para zonas húmedas como el cuarto de baño o la cocina. Puedes pintar todas las paredes excepto el interior de la ducha.
Una opción es elegir el mismo color para todas las superficies o pintar una pared de un color brillante y oscuro y dejar el resto en un tono neutro que armonice con el primero.
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Azulejos de diseño geométrico
Los patrones geométricos no pierden vigencia en decoración por mucho tiempo que pase. Siempre son una alternativa a la que recurrir que puede dotar cualquier espacio de baño de encanto y modernidad.
Podemos renovar el pavimento con baldosas de diseño geométrico en blanco y negro, por ejemplo. O con diferentes tonos de gris como en el cuarto de baño de la imagen. Si te cuesta decidirte, apuesta por composiciones sencillas y elegantes.
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Un suelo vinílico
Esta es una idea capaz de renovar por completo la apariencia del baño sin necesidad de hacer obra. Cambiar el suelo instalando un pavimento vinílico es fácil, rápido y puedes hacerlo tú mismo en un fin de semana.
En las tiendas especializadas encontrarás numerosos diseños para elegir: lamas que imitan madera, azulejos hidráulicos, etc. Estos últimos resultan de lo más decorativos. También puedes hacer una composición de ambos: madera y azulejo. A la hora de instalar el suelo vinílico, tiene diferentes opciones para elegir, desde formatos lama o baldosa, en rollo, autoadhesivos, etc.
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Aprovéchate de la magia del papel pintado
No es ningún secreto que nos encanta el papel pintado. Es una forma fácil y rápida de revitalizar la decoración de cualquier espacio, incluido el cuarto de baño. Además, no es necesario hacer una reforma completa, con las obras que conlleva, para cambiar alguna pared del baño con papel pintado.
¿Qué tienes azulejos y no puedes empapelar? En ese caso necesitas preparar la pared aplicando una pasta especial en las juntas entre los azulejos con ayuda de una espátula. Deja secar y lija para alisar la pared. Ten en cuenta que en el baño conviene elegir un papel pintado vinílico capaz de resistir la humedad.
¿Quieres una idea original? Empapela el techo del baño en lugar de las paredes. De esta manera el interés visual quedará dirigido hacia esta superficie y el espacio parecerá más alto.
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Azulejos en espiga, un clásico que sigue vigente
A la hora de conferir encanto y estilo a una pared de azulejos no solo importa el diseño escogido, sino también la forma en que se colocan las piezas. Esto puede obrar cambios realmente increíbles.
Si quieres destacar una de las paredes, por ejemplo la del lavabo, olvídate de los azulejos tipo metro y apuesta por elegir piezas de un formato similar (y que no estén biseladas) colocadas en espiga. Le darás un toque de lo más decorativo al baño.
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¿Y si pongo una lámpara colgante?
Puede que no sea la opción más habitual en un cuarto de baño, pero el resultado es moderno y decorativo. Añadir una o dos lámparas de suspensión en la zona del espejo, es una forma novedosa de dotar de estilo y personalidad al espacio. Eso sí, es una idea que funciona mejor cuando el techo del baño es alto.
¡Hay vida más allá del foco empotrado o de los apliques a ambos lados del espejo! Estas opciones están muy bien, pero no son las únicas a la hora de iluminar el baño.
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Elige un mueble de lavabo suspendido
En los baños modernos triunfan los elementos suspendidos, desde los muebles hasta los sanitarios. Esto tiene una razón clara: las piezas resultan más ligeras visualmente y dan mayor sensación de amplitud.
Además, liberando el suelo se facilita la limpieza y el mantenimiento de este espacio. Cambiar tu mueble de siempre por uno moderno, decorativo y suspendido es una acción sencilla y asequible que transformará totalmente tu baño.
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Y, si no quieres cambiarlo… ¡píntalo!
Puede que tu cuarto de baño esté un tanto pasado de moda, y quizás no es el mejor momento para hacer obras de reforma o para adquirir mobiliario nuevo. Pero eso no significa que no puedas hacer cosas para cambiar el espacio. Pinta tu mueble anticuado de un color oscuro y diferente: negro, gris plomo, azul petróleo o verde musgo.
Puedes utilizar chalk paint, cuyo uso es fácil y consigue buenos resultados. Aplica dos capas de pintura y un barniz mate para proteger el acabado. Sustituye los viejos tiradores y te sorprenderá la transformación.
Y, ya metidos en harina, ¿por qué no cambias algún otro equipamiento para darle al baño un cuidado y elegante estilo clásico? Un espejo dorado, unos apliques que armonicen, etc.
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Que no falte una hornacina
Si lo que necesita tu baño es una reforma completa con obra de albañilería incluida, apunta esta idea que nos encanta y que encontrarás en los baños más modernos y estilosos: una hornacina (o varias) en la pared.
Pueden estar en el interior de la ducha o en cualquier otro rincón del baño. En la ducha resultan muy cómodas, pues nos permiten prescindir de otros elementos como soportes, baldas o cestas metálicas en las que colocar los frascos del champú o el gel.
Un consejo: un detalle muy decorativo consiste en iluminar el interior de la hornacina con una tira de luces led que quede oculta. ¡Queda genial!
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