Desde poner un toque festivo y alegre en la mesa hasta sumar una dosis de elegancia extra. Esa versatilidad es uno de los motivos por los que, en cuestión de cristalerías, las copas y los vasos de colores son los grandes favoritos. Ya se trate de una comida informal o de una ocasión especial, estas piezas complementan a la perfección la decoración y, sin duda, añaden personalidad y estilo en la mesa. Son piezas que ponen su granito de arena a la hora de lograr una presentación única y, no solo son ideales en verano, sino que funcionan todos los meses del año. ¿Necesitas más razones para llevarlas a tu mesa? Aquí las tienes.
Ideales para crear contraste
Las copas y vasos de cristal de colores son una excelente opción para romper con los tonos de la vajilla y lograr una presentación de la mesa visualmente más dinámica y atractiva. Ten en cuenta también que los colores que dominen en la decoración te ayudarán a dar con el look deseado según la ocasión. Así, en esta mesa de El Corte Inglés se han elegidos colores que contrastan de manera suave y delicada: rosa en la vajilla "Granada" y verde en la cristalería. Un juego cromático ideal para una presentación fresca y primaveral.
Son una forma divertida y práctica de identificar las bebidas de cada comensal
En reuniones informales tipo bufé, donde los invitados no están sentados en la mesa ni tienen un puesto asignado, conviene buscar fórmulas que ayuden a identificar los vasos y evitar confusiones. Recursos hay muchos y todos se basan en la idea de asignar un color a cada comensal. Por eso, si tienes un juego de vasos en tonos diferentes (como éstos, de Nest), podrás prescindir de los típicos marcadores de silicona que se colocan en la cristalería. Un toque distintivo con el que ganar comodidad.
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También sirven como jarrones improvisados
Una idea estupenda para crear arreglos florales muy personales. Los vasos altos son ideales para flores largas y estilizadas, como rosas, tulipanes o lirios, mientras que margaritas, claveles o peonías, más pequeñas y compactas, quedarán genial en recipientes bajos. Si son de boca ancha, puedes animarte con arreglos más exuberantes, con ramas largas y hojas verdes. En cuanto al color de las flores, tú decides si prefieres que sean de tonos similares al del cristal o que contrasten, como propone en este caso Dobbies Garden Centers.
Porque ponen un toque divertido y festivo en la mesa
La oferta en copas y vasos de cristal es de lo más variada, lo que permite encontrar opciones que se adapten a cada ocasión. En fiestas y reuniones informales, van muy bien tanto los diseños lisos en colores vibrantes como los modelos decorados con motivos desenfadados, como la cristalería ÖMSESIDIG de IKEA, con estampado de confeti. Atrévete a mezclar colores diferentes para dar un punto lúdico y divertido a la mesa.
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Son geniales para reforzar la temática de la mesa
Cuando la cristalería se ajusta al estilo y la decoración general de la mesa, contribuyen a crear una presentación armoniosa. En esta propuesta de Westwing, en la cual se ha apostado por un look marinero, las copas de cristal azul complementan y acentuan la decoración. Y sí, vale que este mismo efecto se puede conseguir con diseños de melamina, pero recuerda que el cristal es menos propenso que el plástico a absorber olores, algo especialmente importante en bebidas como vinos, donde cualquier residuo o aroma podría arruinar la experiencia.
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También son perfectas (e indispensables) para crear atmósferas sofisticadas
En una cena especial o cualquier ocasión que merezca una presentación más refinada, las copas han de ser de cristal sí o sí. Y es que, además de tener una apariencia más elegante que los modelos de melamina (que sin duda, también tienen sus atractivos y ventajas), las copas de cristal tienen un peso y una sensación al tacto distintivos. Y no solo eso: están diseñadas para permitir que el vino respire, lo que mejora sus características aromáticas y de sabor. Estas pertenecen a la colección "Bicos Bicolor" de Vista Alegre. ¿A qué nunca servirías un buen vino en una copa de melamina?
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Decoran por sí mismas
Hasta la presentación más sencilla y neutra ganará en elegancia con unas copas de cristal en un color que cree un contraste fuerte y limpio con el resto de elementos. Sin duda, se convertirán en el centro de atención y realzarán la presentación de la mesa, convirtiéndola en un sofisticado escenario. Más aún si son de cristal tallado, como estas copa de Zara Home, pues su textura y detalles exquisitos aportarán una dosis de estilo.
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Permiten presentaciones monocromáiicas
Con cristalería, vajille y mantelería del mismo color, como nos propone en este caso la firma Sklum, la unidad visual está asegurada. Aunque eso sí: si apuestas por un "total look", lo ideal es añadir detalles en diferentes tonalidades del mismo color para aportar profundidad y textura a la mesa, así como pinceladas neutras que eligeren el resultado. Por ejemplo. servilletas o centros de mesa en matices más claros o más oscuros, y unos cubiertos de madera o bambú.
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Las cristalerías de color son únicas para sorprender con mesas multicolores
Si seleccionas copas y vasos de diferentes colores y los combinas de manera armoniosa con los demás elementos del servicio de mesa (mantel, servilletas, cubiertos, mantel, flores…), obtendrás una presentación alegre y festiva que cautivará a tu invitados. La clave está en jugar con la misma paleta de colores como se ha hecho en esta mesa de Westwing. Juega con colores complementarios que se vean bien juntos, como azules y verdes o rosas y naranjas, bien en tonos pastel tonos para decoraciones delicadas, bien en colores llamativos su buscas un look más animado.
Porque son las piezas que lucen más bonitas en baldas y vitrinas
Si eres fan de la tendencia "open shelving" y prefieres utilizar estanterías abiertas en lugar de armarios cerrados, sabrás lo importante que es, ya no solo colocar los objetos de manera organizada, sino también seleccionar muy bien qué piezas van a quedar a la vista de todos: los diseños expuestos son clave para un buen resultado. Copas, vasos y demás accesorios de cristal de colores se convertirán en atractivos elementos decorativos que, sin duda, destacarán del resto.
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