10 salones de verano que vas a querer montar en tu porche o terraza

¿Quién no sueña con tener un saloncito de verano al aire libre confortable y estiloso? Solo necesitas una zona exterior y buenas ideas para lograr, ya no solo que presuma de un look de revista, sino también que sea cómodo y agradable. Si tienes la suerte de contar con un maravilloso jardín o una pequeña terraza urbana (también eres afortunada, pero no tanto), ya llevas la mitad de la operación “salón de verano” conseguida. Apunta las claves que te ayudarán a completar el resto.

Lo primero: crear una buena sombra

Es fundamental por varias razones. La temperatura será más agradable, podréis relajaros, leer o charlar sin el agobio que provoca por el calor. Además, muebles y objetos decorativos estarán a salvo de una exposición prolongada al sol, lo que ayudará a prevenir el desgaste y decoloración. Por eso, si el espacio donde planeas ubicar tu salón de verano no tiene sombra, tendrás que crearla. Ya sea a través de una celosía cubierta de plantas trepadoras (como hizo el interiorista Alberto Torres en esta vivienda), una pérgola con un toldo desplegable, un techo de cañizo o una sombrilla, las posibilidades son diversas. Elige la opción que se adapte a tus gustos y necesidades.

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Elige muebles cómodos y de calidad

Opta por diseños realizados con materiales resistentes a la condiciones exteriores, como el sol y la humedad. Fibras sintéticas, madera tratada, aluminio o acero son buenas opciones. Eso sí: antes de nada, estudie bien la planta y dimensiones de la zona donde vas a ubicar este ambiente. Es importante que los muebles se adapten a estas medidas para diseñar una distribución que permita dejar suficiente espacio para moverse, que no quede abarrotado. Lo ideal es colocar los asientos alrededor de una mesa de centro, como se ha hecho en este caso, con la colección Cross de El Corte Inglés. Recuerda que el objetivo principal es crear un ambiente en el que relajarte y disfrutar, así que asegúrate de incorporar elementos que te hagan sentir cómodo y reflejen tu estilo personal.

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Vístelo con tejidos estilosos y prácticos

Al igual que ocurre con los muebles, conviene que telas que elijas sean resistentes a la intemperie y los rayos UV (aunque la zona esté a la sombra). Lo bueno es que actualmente es fácil encontrar diseños "outdoor" en una amplia de patrones y colores con los que poner ese toque de estilo en el espacio. Basta con ver este salón de verano, en el que se ha creado un ambiente acogedor y espacioso con un banco de obra en forma de L alrededor de una mesa baja. Para mayor comodidad, el asiento se ha completado con colchonetas confeccionadas con tejidos de la colección "Motel" de Pepe Peñalver, idónea tanto para espacios interiores como exteriores.

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¡No te olvides de la alfombra!

Tu salón de verano ganará en comodidad, tanto para caminar descalzos como para sentarse en el suelo si fuera necesario, y en estilo, ya que una alfombra bien elegida, con su color y textura, te ayudará a realzar la decoración del ambiente. Lo ideal es que sea un diseño específico para su uso en exteriores, ya sabes, confeccionados con materiales sintéticos como el modelo "Saline" de Gan (sobre estas líneas) de PET 100% reciclado. Las alfombras de fibras naturales, como el yute o el sisal, mejor reservarlas para áreas cubiertas.

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Decóralo con gusto

Incorpora muebles y accesorios con historia y carácter, como piezas heredadas, exóticas o vintage que aporten un toque único a la decoración. Incluso puedes reciclar objetos antiguos y restaurarlos para que se adapten al estilo de la decoración. No temas si todos los elementos del salón no son del mismo estilo, pues lograrás un ambiente ecléctico, alegre y lleno de encanto. Para darle vida, lo mejor es recurrir a textiles en colores intensos y frescos (azules, verdes, amarillos, naranjas…), que transmitan optimismo y vitalidad. Te ayudarán a crear ese toque desenfadado y relajado que tanto anhelamos en la época estival.

Inspírate en esta terraza, un proyecto de Luzio Studio. Se ha decorado con gran banco balinés, una mesa de centro de madera tropical y dos sillas con brazos inspiradas en Pierre Jeanneret, sin que falten colchonetas y cojines a medida para una mayor comodidad de los asientos, poniendo también la nota de color al ambiente. 

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Un poco de intimidad también se agradece

En un ambiente íntimo, en el que no haya que preocuparse de miradas indiscretas, os sentiréis más cómodos y relajados, ya sea para leer, conversar o, simplemente, desconectar del resto del mundo. Para lograrlo, puedes recurrir a plantas trepadoras o enredaderas en celosías que, además de crear un manto de vegetación que otorgue cierta intimidad, añadirá un toque natural y fresco al espacio. En esta terraza, un proyecto de RQH Studio, se colocaron árboles en macetas. Si te seduce la idea, olivos, magnolios, arces japoneses, bambú y cipreses son perfectos para la terraza.

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Integrado en el paisaje

¿Quieres que la decoración se mezcle perfectamente con el paisaje? Utiliza colores que reflejen los tonos y matices de la naturaleza que te rodea (terrosos, verdes, azules, blancos…) y elige muebles y complementos de materiales naturales (madera, piedra, cerámica…). Que prime la sencillez, que nada compita con la belleza del entorno. Y para disfrutar de las vistas panorámicas, organiza los asientos estratégicamente como hizo el equipo de Cuarto Interior en esta casa ibicenca.

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Noches mágicas

Con la iluminación adecuada, podrás disfrutar de cenas y sobremesas con amigos en un ambiente cálido, acogedor y lleno de encanto durante las noches de verano. Además de guirnaldas como las que colocó el equipo de Coblonal en este terreza, lámparas colgantes, farolillos y velas son opciones igual de decorativas.

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Detalles que suman

Los complementos textiles son fundamentales para poner ese toque de estilo en la decoración de cualquier ambiente, incluido tu salón de verano. Así que, ya sabes: completa los asientos con cojines en colores que realcen la tapicería (estos son de Kave Home). Juega con diferentes patrones, tonos y texturas para agregar interés visual y personalidad al espacio. Tampoco estará de más tener a mano una mantita suave y liviana para las noches frescas, o unos cojines grandes para sentarse en el suelo y crear una atmósfera más relajada y desenfadada.

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Un salón "in & out"

Sustituir los muros por espectaculares superficies acristaladas que se abren y conectan con el exterior es una idea maravillosa para disfrutar del aire libre y la naturaleza mientras se está dentro de casa. Con este tipo de cerramientos se crea una sensación única de amplitud y fluidez entre el interior y el exterior, permitiendo que el jardín se convierta en una prolongación del salón. Éste se ha decorado con muebles de La Redoute Interiéurs.

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