Las plantas de exterior en maceta requieren una dosis extra de mimos en verano

Claves maestras para que el calor no haga estragos

Para proteger las plantas del calor excesivo y asegurar un suministro adecuado de agua los acolchados son muy adecuados, dado que ayudan a mantener la humedad del suelo, evitando la evaporación del agua, mantienen las raíces frescas y, asimismo, protegidas del sol directo.

“Recomendamos elegir el acolchado más adecuado dependiendo del tipo de suelo y de las plantas de exterior que tengas”, dicen desde Tinda’s Project.

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Nuestros cultivos del huerto en verano

Un último aspecto es el de nuestras frutas y hortalizas del huerto en maceta. El paisajista explica los secretos para lograr la mejor cosecha en verano:

• Asegurarse de que las plantas reciban suficiente luz solar.

• Regar regularmente.

• Controlar las plagas.

• Fertilizar de forma correcta.

• Recolectar los cultivos en el momento adecuado, para obtener la mejor calidad y sabor

En la propuesta el paisajista Fernando Nájera decide crear un huerto a base de macetas situadas en una estantería.

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¿Fertilizar durante la temporada estival?

Hemos hablado del abono, no obstante, hay que tener en cuenta que durante los meses de verano es recomendable centrarse en fertilizar aquellas plantas que están en período de crecimiento activo y floración, ya que necesitan más nutrientes. En cambio, hay plantas que entran en período de reposo estival y no necesitan tanta fertilización.

“Lo más importante es que la fertilización se ha de hacer de forma adecuada, ya que un exceso de abono podría llegar a ser perjudicial para las plantas”, advierte Manuel.

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Las suculentas, una buena opción para ahorrar mantenimiento

Como hemos dicho las plantas en maceta requieren un aporte hídrico habitual y más en los meses cálidos. Si no tienes la posibilidad de cuidar tanto tus plantas de exterior la mejor apuesta son las plantas crasas o suculentas, una familia que retiene el agua y que, por tanto, es más tolerante a la sequía. Son de las consideradas plantas con poca sed y resistentes en climas cálidos y secos.  

Manuel explica que existen “muchísimas variedades de suculentas y casi todas realizan floración y con una buena tierra drenante (volcánica) pueden vivir muy bien, y casi no necesitan ningún cuidado”.

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El sol intenso, a examen

Los contenedores que son fáciles de trasladar porque son ligeros o incluso se sitúan sobre plataformas con ruedas podrás situarlos en semisombra si conviene. No ocurre igual con el resto. En tales casos e la recomendación de Manuel es que antes de colocar tu planta, investigues sobre cuál es el lugar adecuado para ella, si necesitará un lugar más soleado o sombreado para crecer de forma correcta.

Otra alternativa si te encuentras que la planta necesita sombra en verano es plantear en tu exterior alguna sombrilla, toldo o pérgola para protegerla del sol intenso.

En este proyecto de una casa unifamiliar creada por las arquitectas Núria Selva y Sandra Dachs, se plantea un cañizo para ofrecer frescor natural al comedor de exterior. El interiorismo lo firma Pia Capdevila, en él destacan las butacas de Taller de las Indias y las cestas de fibras naturales con plantas, de Catalina House.

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Las plantas de exterior cultivadas en contenedores (ya sean macetas o jardineras), ofrecen múltiples ventajas que veremos. No obstante, también es cierto que requieren más riego que si están plantadas directamente en el jardín y otros cuidados. Lo vemos todo junto al paisajista del estudio Tinda’s Project (tindas.es) Manuel Maíllo.

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Platillos, en ciertas plantas

Es especialmente importante utilizar los platillos en plantas que prefieren un suelo húmedo. Y es que, como revela Manuel, “la función de los platillos debajo de las macetas es retener el agua y, por lo tanto, la humedad de la planta”.

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El riego por goteo, la solución sostenible

Apuesta por el riego por goteo que, en palabras del experto es considerado uno de los sistemas más eficientes de la actualidad y más amigables con el medio ambiente. “Esto es debido a que el suministro de agua es constante y uniforme lo que permite mantener la humedad del suelo constante sin desperdiciar agua”, detalla.

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Así aprovecharás hasta la última gota

Estamos en tiempo de sequía y, con el cambio climático, hay que pensar que el agua es un recurso que se debe aprovechar al máximo. Estos son los consejos que nos ofrece Manuel en el caso de disfrutar de veranos calurosos:

• Poner un sustrato encima de la tierra para evitar la evaporación. Esta capa puede ser tanto de tierra volcánica como de corteza de pino o paja, si se trata de un huerto.

• Poner un poco de turba con la tierra y regar por inmersión durante varias horas y luego regar regularmente. Se puede hacer lo mismo con tierra volcánica.

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En verano, aporte de agua constante

Durante los meses de verano, como norma general, se recomienda regar las plantas en maceta diariamente para asegurarse de que estén recibiendo la cantidad de agua adecuada para mantener su salud y crecimiento.

El paisajista advierte que, sin embargo, tampoco hay que excederse con el riego, ya que se pueden ahogar las raíces y dañar la planta. Así pues, es importante vigilar la humedad del suelo y regarlas a fondo, asegurándose de que el agua llegue a sus raíces.

“Y es mejor regar de día, ya que la plantas realizan la fotosíntesis con la luz diurna y es cuando tienen mayor evaporación, suben los alimentos desde las raíces a las hojas, los sintetizan en las hojas y bajan a las raíces”, añade. El consejo es hacerlo a primera hora para ser más eficaces.

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Fíjate en el contenedor

Insistimos en que, como hemos mencionado, el tamaño del recipiente puede llegar a limitar el crecimiento de las raíces. Y, por otro lado, el material y la forma del recipiente pueden afectar a la retención de agua y nutrientes en el suelo de la maceta. Manuel explica que, por lo tanto, “elegir el tamaño, la forma y el material adecuados para el recipiente de cultivo es importante para asegurar un buen crecimiento de la planta”.

En esta terraza la interiorista Raquel González integra plantas sobre superficies y también colgantes que caen en cascada situadas en recipientes altos, decorando así con vegetación distintos niveles del ambiente exterior.

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Otros inconvenientes  

¿Más cosas? El crecimiento de la planta estará condicionado por el tamaño del contenedor, porque las raíces quedan limitadas y, en consecuencia, el crecimiento y rendimiento general de la planta.

Además, las plantas necesitan mucha más atención para evitar la acumulación de sales que pueden dañar sus raíces. Y no solo eso, también hay que vigilar la formación de moho, que puede dañar las raíces y la salud de las plantas.

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Los contras: más agua y abono

Si bien es cierto que cultivar las plantas en contenedores ofrece las ventajas relatadas en el punto anterior, no lo es menos que requieren un cuidado constante, tanto el riego como en fertilización. Manuel relata que tienen la necesidad de ser regadas con más frecuencia, debido a que los contenedores se pueden secar más rápido. Respecto al abono, que deba ser más constante es debido a que los nutrientes se agotan de forma más rápida en el suelo de las macetas.

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Puntos positivos de las plantas de exterior en contenedores

Manuel detalla varias ventajas de apostar por cultivar las plantas de exterior en macetones, y para comenzar está el hecho de que el contenedor sea sumamente decorativo. Aparte, es la forma de poder lucir plantas en patios y terrazas. “Ya sean macetas, jardineras o cestas colgantes, le darán ese toque estético y personal a tus exteriores”, apunta.

Por otra parte, son ideales para formar un pequeño jardín agrupando contenedores en los rincones en caso de que no tengas un patio ni un suelo adecuado. Asimismo, se pueden trasladar para cobijarlas del sol o el viento en función de la estación del año o las condiciones climáticas.

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