La zinnia, conocida también como rosa mística o flor de papel, es una planta de exterior de bonitas y llamativas flores de origen mexicano con un porte pequeño. Es feliz especialmente recibiendo muchas horas de sol y por ello se cultiva mucho en jardines y terrazas, tanto en contenedores como formando borduras, arriates o parterres. Su follaje está conformado por unas hojas ásperas, con forma oval y de color verde muy oscuro.
Son fáciles de cuidar, por lo que son una variedad indicada incluso para jardineros inexpertos. El único inconveniente es que su ciclo de vida es anual, por lo que deberás replantar la zinnia año tras año mediante semillas. Cuando las arranques empléalas para compost. Que resulten tan efímeras se compensa con la gran alegría que aportan sus flores en los meses estivales, en algunos casos bicolores, como los ejemplares de la imagen.
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Se confunden a menudo con las dalias
Zinnias y dalias comparten ciertos rasgos, lo que hace que a veces se confundan. El colorido de la flor puede ser una forma de distinguirlas, pues las dalias florecen en amarillo, morado, naranja, rosa, rojo y algunos tonos de morado oscuro, mientras que las zinnias tienen una gama más amplia de tonalidades: amarillo, blanco, rosa, lila, verde pálido, rojo, morado y naranja.
Además, la altura de la planta también las diferencia. Las dalias son más altas, porque las zinnias suelen crecer tan solo entre los 20 cm y los 70 cm. En cuanto a la dalia, cuanto más espigada es, más grande produce la flor (como vemos en la fotografía).
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Buena dosis de rayos solares
Si tienes que decir qué ubicación darles, piensa que a las zinnias les gusta estar a pleno sol. Si esto no es posible, al menos requieren 6 horas de sol para estar felices. Es por ello que se suele cultivar junto a otras especies amantes del sol, como los rosales o los claveles.
De igual manera son plantas acostumbradas al calor, por lo que el rango de temperaturas en el que se sienten más cómodas es entre los 15 y los 25º C. Eso sí, no soportan el frío.
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Riego frecuente
Como ocurre con todas las plantas, las necesidades de agua son mayores en el caso de plantar la zinnia en una maceta. En un contenedor el riego deberá ser más continuado, cada 2 o 3 días. Por el contrario, plantada directamente en el suelo podrás espaciar más el aporte, ya que el volumen de tierra y de sustancias de las que alimentarse es mucho mayor. Y en todos los casos, procura no mojar ni las hojas ni la flor, efectúa el riego a nivel del pie. Por cierto, ten en cuenta de que si la planta comienza a perder hojas indicará que sufre por falta de agua.
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Un extra de vitalidad
Resulta muy aconsejable aportarle un extra de nutrientes con un abono especial para plantas con flor en su temporada de floración. ¿Con qué frecuencia? Por regla general cada 15 días. Puedes escoger entre un fertilizante líquido o, si lo prefieres, granulado y esparcido en el sustrato, que actúa con el agua del riego y se disuelve con facilidad
Los efectos de esta tarea no es solo que prolongarás la temporada de floración, sino que además las flores lucirán brillantes y esplendorosas.
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Pautas con la siembra
Las zinnias pueden reproducirse por esquejes, no obstante, sobre todo se apuesta por la siembra, que debe hacerse en primavera. En el segundo caso hay que emplear un semillero con tierra húmeda y los planteles tardarán algo más de una semana en germinar. A continuación, conviene trasplantar las zinnias en el lugar definitivo.
Salud casi de hierro
Como ocurre con la mayoría de las plantas, el peor problema con la salud lo sufren si les queda agua encharcada, lo que las debilita y las hace proclives a que les ataquen plagas. En el caso de las zinnias especialmente pueden aparecer pulgones, moscas blancas, trips y oídios.
Ten precaución con este aspecto y procura que el suelo sea ligero para que drene bien y, por otra parte, retira las flores y hojas marchitas. Esta planta no necesitará mucho más, por ejemplo, no requiere de poda.
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La preferida de las mariposas
Entre las flores que más gustan a las mariposas para obtener su néctar están las zinnias, por sus coloridos y dado que emiten la flor en primavera y verano. Esta planta atrae mucho a estos lepidópteros, pero también a otros insectos beneficiosos para el jardín o terraza, al evitar de forma natural los riesgos de plagas.
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Dos curiosidades
Su nombre fue otorgado en honor del botánico al alemán Johann Gottfried Zinn (1727- 1759).
Otro dato llamativo es que fue la segunda flor en ser cultivada en condiciones de microgravedad, lo que da buena cuenta de lo fácil que es de cuidar. En concreto se ocuparon de ella los tripulantes de la Estación Espacial Internacional y nació la preciosa flor naranja (fotografiada por el astronauta Scott Kelly) en el año 2016. De la primera flor 'galáctica', que fue una Arabidopsis thaliana y creció a bordo de la Salyut-7 en 1982, no hay ninguna imagen.
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