Clase teórica: las 9 reglas de oro para mantener en impecable orden la casa

¿Estás a gusto con la organización de tu casa? ¿Te cuesta mantener el orden? ¿Crees que podrías hacer algo más? Quizá necesites una ayuda para que la casa no se desmadre con el día a día, las rutinas y el ritmo cotidiano. Tras muchos años de estudio y observación, lo que más saben de orden en casa, nos han regalado reglas que ayudan a mantener ese orden tan deseado, que nos proporciona equilibrio y bienestar. La idea es que revises las reglas de orden que hemos recopilado para que escojas la que crees que te puede ayudar más, la que ves más factible de poner en práctica y mantener en el tiempo. ¡Esa es la tuya!

La regla de orden de los 2 minutos

Si devolver a su sitio algo o guardarlo te lleva menos de dos minutos, tienes que hacerlo de manera inmediata. No dejarlo. Por ejemplo, tirar una caja, apretar un tornillo, doblar una camiseta y meterla en el cajón… Es una manera de que no se acumulen mucho poquitos relacionados con el orden que luego te dará más pereza afrontar.

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Sumamos minutos: la regla de los 5 minutos

Sacar 5 minutos al día, que tampoco es tanto, para resolver esas tareas pendientes en las que piensas. Marca un límite de 5 minutos para hacer algo y así te pones rápidamente hasta que lo acabas. Pin, pan. Sé coherente con tareas que se puedan hacer. Esta regla se basa en la idea de que el cerebro se pone a hacer algo y se afana en ello hasta acabarlo para no dejar cosas a medias.

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La regla de orden de los 365 días

Seguimos con números asociados a las reglas que te ayudan a mantener el orden en casa. Esta norma parte de la idea de sacar de nuestras vidas aquello que no se ha usado en más de un año. De ahí que sea la regla de los 365 días. Con ella te deshaces de lo que no utilizas. Un buen comienzo para no acumular por acumular. Revisa el armario ropero, los muebles de la cocina (sobre todo lo que se guarda en los estantes más altos), y los cajones del salón. Cocina diseñada por Crea Spacios.

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Regla 1 de 1

Es más fácil mantener el orden cuando no se tienen demasiadas cosas. Un objeto de cada y nada más, hará que no acumules cosas innecesarias. Es una buena regla para aquellos que sienten que su desorden viene de la mano de la acumulación de objetos. Muchas tazas en la cocina, demasiadas toallas en un cajón…

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La regla de un solo toque

Tocar solo una vez las cosas. Es aplicable a según qué objetos y situaciones. Pero se puede interiorizar de manera que si se coge algo para hacer una tarea concreta o para un uso concreto, luego debe volver a su sitio inmediatamente. Como si se cogiera y no se pudiera soltar hasta que no volver a su espacio de origen. Así se ahorran movimientos y se mantiene el orden.

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La regla de la asignación

Para mantener el orden en casa, primero, antes de empezar a aplicar cualquier otra regla, has de asignar a cada objeto un lugar. Por lo general, lo complicado para los desorganizados es no devolver las cosas a ese lugar; pero puede que, para muchos, no tenga dónde volver. Así que antes de empezar, hay que analizar si todo cuenta con un espacio en casa.

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La regla de orden de las cinco superficies

Las cinco superficies que intervienen en esta regla son: la encimera de la cocina, el fregadero, la mesa en la que se come o cena, el mueble del lavabo y el suelo del salón. Son los cinco focos de atención que destacan algunos expertos en orden a los que dedicar unos minutos cada día antes de ir a la cama. El objetivo es repasar esas superficies y que se queden limpias y ordenadas. De esta manera se afronta cada día desde cero, con todo despejado. Cocina diseñada por Raquel González Interiorismo.

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La regla de entrar y salir

Es similar en concepto a la regla de 1 de 1. Se trata de tirar o deshacerse de algo para que pueda entrar algo nuevo. Es decir, sustituir. Si entra una camiseta blanca de manga corta, sale una antigua del mismo tipo. Esto es aplicable a los tuppers de la cocina, las copas del salón, las mantas o plaids… También es especialmente útil para los que tienden a acumular. Salón proyectado por Negre Studio.

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Comprometerse con el orden y con cualquiera de estas reglas

Si no hay un compromiso con la idea de mantener el orden en casa, de aplicar una o varias de estas reglas, de llevarlas a la práctica en el día a día, no lograrás acabar con la sensación de caos y desorganización. Así que casi podría ser una regla en sí: comprometerse con la organización. Tienes que plantearte que quieres cambiar y comprometerte con hacerlo. Todo lo que supera los 21 días de aplicación se convierte en un hábito, en una rutina. Date margen y verás cómo lo que cuesta al principio se va interiorizando. Salón-comedor proyectado por la arquitecta Mónica Diago.

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