Dos materiales polivalentes y con numerosos acabados y usos en decoración. Cristal y espejo aparecen en interiorismo en versión ahumada, esmerilada, envejecida, martillada… Sirven para revestir paredes, muebles, como elementos separadores… y siempre reflejan la luz y conceden profundidad y amplitud. Esta galería es inspiradora. Seguro que encuentras ideas para incorporar cualquiera de estos elegantes acabados a tus interiores.
Espejo y cristal en el mismo ambiente
Si te fijas con detenimiento, verás cómo en numerosas ocasiones, el cristal y el espejo aparecen juntos en el mismo espacio. Se llevan bien. Son ligeros, elegantes, versátiles… No llenan ni saturan y, por el contrario, bien usados, pueden ampliar las estancias, así como hacerlas más luminosas al reflejar la luz, tanto la natural como la artificial. La interiorista Raquel González ha usado aquí el espejo para revestir la pared, junto a la chimenea. Como queda cerca de la ventana, multiplica la luz natural que entra. La mesa de centro es un diseño liviano con sobre de cristal que no llena y deja que se luzca la moqueta.
Leer: 10 consejos de interiorista para hacer más amplios tus espacios
Espejo en el pasillo
Hindley & Co usa el espejo en una zona de paso que, además, es el vestidor. Ubicado justo en el acceso al cuarto de baño, el pasillo se siente menos estrecho con un lado espejado. Aquí se ha usado el espejo en el frente del armario, con idéntico diseño al de enfrente, en acabado liso en color blanco.
Puertas de cristal
Las puertas de cristal son la solución idónea para delimitar espacios (ganar aislamientos acústico y térmico) sin perder sensación de continuidad. Así no se renuncia a nada. Las puertas de vidrio transparente actúan como paredes móviles con las que abrir o cerrar espacios. Los diseños pueden tener perfilerías de hierro o de madera, solo en los extremos o con diseños interiores. Este paso con fijo y correderas centrales en forma de arco es de lo más llamativo y estético.
Leer: Puertas correderas: concédele metros a tu casa con estilo
Una estantería con frentes de espejo
Una pared que no se siente tan pesada y ciega gracias a esta composición de muebles en la que se combinan estantes abiertos revestidos en diferentes acabados (madera y lacas de colores) y frentes de espejo de diseño vertical. Es una propuesta de NIDO Interior Design con la que se refleja la pared contraria, alejada y con una ventana.
Leer: Qué debes tener en cuenta si quieres diseñar una librería a medida
No solo puertas de cristal
Las paredes también pueden sustituirse por frentes acristalados. Cerramientos que ayudar a compartimentar el espacio sin perder la sensación de amplitud y continuidad. Es lo que ha hecho en este proyecto SIKORA Interiors con una solución acristalada que delimita el baño y el dormitorio respecto a la zona de día.
Leer: Cerramientos acristalados de interior para toda la casa
Baño con cabinas de cristal esmerilado
Amos Goldreich Architecture firma el diseño de este cuarto de baño en el que se usa el cristal para crear cabinas que acogen la zona de la ducha y el inodoro. De esta manera, es posible conceder privacidad en el uso del ambiente por más de una persona al mismo tiempo. Frente al mueble del lavabo doble, que apoya al fondo en una bañera, el cristal es el que permite delimitar y no dejar totalmente a oscuras el interior de las cabinas. Se trata de un acabado esmerilado, que tiene el efecto de hacer el cristal traslúcido: permite la dispersión de la luz, pero no deja ver nítidamente a través de él.
Biombo efecto martillado
El efecto martillado logra deformar las imágenes que se reflejan o que se ven a través. Es un acabado decorativo, incluso, artístico que usa aquí O&A London en un panel que separa la zona de comedor de la cocina. A medio camino entre el espejo y el cristal, el panel marca la transición y refleja la luz, pero no deja ver a través ni mostrar las imágenes con nitidez.
Leer: Separar ambientes sin levantar tabiques: ideas prácticas que triunfan
Panel corredero de espejo
Marta Estarriol Interiorisme juega con el espejo en este proyecto donde crea un panel corredero que se desliza por una guía empotrada en el techo. Este panel espejado da paso al baño, integrado en el dormitorio, y amplía con profundidad la estancia. En este tipo de soluciones es importante escoger buenas guías y rodamientos que soporten el peso y uso. Las guías han de tener cierre ralentizado para evitar golpes.
Leer: Esto es lo que debes tener en cuenta para decorar la casa con espejos
Espejo en el frente de la chimenea y cristal en la escalera
Studio Hagen Hall usa aquí el cristal y el espejo en el mismo espacio con un resultado apropiado en cada caso. Por un lado, el espejo que reviste el frente de la chimenea en la zona de estar, creando un espacio que rebosa elegancia y que se siente más espacioso de lo que es. Por otro, el cristal se convierte en la barandilla de la escalera, favoreciendo el paso de la luz a una zona que de otra manera se sentiría oscura y estrecha.
Cerramiento de cristal sin perfilería entre cocina y comedor
PortobelloStreet.es Interior Studio diseña una solución ligera con cristal en el paso entre cocina y comedor. En este caso se trata de un cerramiento muy ligero, sin perfilería, tipo cortinas de cristal, que permite comunicar y delimitar los ambientes. Las aperturas tipo zigzag dejan las hojas recogidas en un mismo extremo y el paso despejado. El estilismo es de Daniel Sierra.
Leer: 9 razones por las que nos encantan los cerramientos acristalados