Cómo ahorrar espacio en casa: trucos de orden que multiplican los metros

Tanto si tu piso es grande como si le faltan los metros, seguro que necesitas más soluciones de almacenaje que saquen partido a los metros. Estas ideas, además de regalar espacio para guardar, son perfectas para conseguir más orden en casa. Y es que una casa ordenada, es una casa más estilosa, cálida, acogedora y agradable. Lo mejor es que estas soluciones son económicas y muy resultonas. ¿Quieres descubrirlas?

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Esconde lo más pequeño de la vista

En el salón, mandos, pequeños objetos, cojines y mantas del sofá pueden provocar mucho ruido visual e incrementar la sensación de que el espacio está sin ordenar. Para evitarlo, utiliza cajas y cestas en las que guardar todas estas cosas y verás cómo cambia el orden de tu salón (y su imagen). Las de fibra natural, como alga, ratán, mimbre… son las más decorativas. Además, aportan un look muy cálido. También las de tela son muy decorativas, pero si te decantas por estas lo más adecuado es que tengan todas el mismo acabado. Este truco de orden también te ayudará en el dormitorio, el cuarto de los niños, el baño y ¡hasta la cocina!

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Coloca unas puertas en las estanterías

Aunque dicen que lo que no se ve, no se usa, cierto es que, para incrementar la sensación de orden, los armarios con puertas son los mejores aliados. Si tienes una estantería es fácil colocar un par de puertas abatibles que escondan los estantes inferiores y que aligeren su imagen. Ahí podrás guardar todas esas cosas que no favorecen al estilo de tu estantería: papeles, documentación, botes con bolígrafos, la caja de la costura… Aquí las cajas son ideales también para conseguir el orden y encontrarlo todo a la primera. 

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Saca partido a un recibidor 'mini'

Las paredes pueden ser un espacio perfecto para sumar almacenaje en casa, en el recibidor es una máxima que deberás aplicar, especialmente si es pequeño. Huye de los bonitos percheros de pie, por mucho que te gusten. Apuesta mejor por unos percheros de pared, donde colgar los abrigos, y una balda, para mochilas, bolsos, sombreros… Si el espacio lo permite, coloca un sencillo y ligero zapatero en el que dejar el calzado que más utilicéis durante la temporada.  

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Muebles que guardan

Si tienes la opción de planificar un banco en el office o el comedor de tu casa, no dudes en hacerlo. Su imagen es mucho más ligera que si colocas sillas o butacas. Pero es que, además, lo puedes encargar con el asiento abatible, de manera que, en su interior, cuente con espacio para guardar, sumando el espacio de almacenaje (y, por tanto, los metros de tu casa). Guardan ahí los cojines o cosas que no uses con frecuencia.  

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Aprovecha el bajo de la ventana

Por lo general, los radiadores se instalan debajo de las ventanas. Pero, actualmente, los nuevos hogares están dotados con suelos radiantes, de manera que las paredes de toda la casa quedan despejadas. ¡También las de debajo de la ventana! Y este es un espacio perfecto en el que colocar un mueble que te dé almacenaje. Si la ventana es muy grande, busca una pieza que te permita abrir las hojas cómodamente.  

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Aprovecha las paredes

Utiliza las paredes para sumar almacenaje. Existen muchísimos muebles que se cuelgan de la pared, ofrecen un look más liviano y cuentan con espacio para guardar. Por ejemplo, en el dormitorio, unas mesitas suspendidas ofrecen el mismo almacenaje que las estándar, pero con una imagen más ligera. Lo mismo con los zapateros que se cuelgan en la pared o tableros que permiten almacenar en vertical. 

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Dobla en vertical

Una de las mejores cosas que trajo la organizadora profesional Marie Kondo fue el doblado vertical, una auténtica revolución para sacar más partido al interior de los cajones. Al poder ver todas las prendas que tienes a la primera, lo usarás todo y no olvidarás lo que tienes. Este método vale también para ropa de casa, como las sábanas, las toallas o, incluso, las mantelerías y los trapos.

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Almacenaje de suelo a techo

Cuando planifiques el armario de tu dormitorio (esto también vale para los de la cocina), es mejor que elijas un modelo que suba del suelo hasta el techo. Puedes usar esta parte superior de los armarios (se llaman maleteros) para guardar ropa de otras temporadas, zapatos que no usas con tanta frecuencia, las mantas, etc. Además, cuando están cerrados su imagen es mucho más estética y equilibrada. En el caso de que no vayas a cambiar de armario, emplea unas cajas con tapa y colócalas encima del armario. Y, como hemos comentado antes, todas del mismo diseño para que no desentonen en la decoración.  

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Utiliza los bajos de la cama

Si la estructura de tu cama o la de tus hijos lo permite y no tienes un canapé, estás desaprovechando un espacio precioso. Ahí puedes colocar cajas en las que guardar la ropa de cama y las toallas, pero también ropa de otras temporadas (las bolsas ahorraespacio serán tus mejores aliadas). Además de cajas, existen cajones con ruedas estándares que puedes colocar. Y no pienses que se va a llenar todo de polvo. También hay telas que se encajan en ellos con velcro y que sirven para proteger lo que hay en el interior. 

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Invierte y gana espacio para guardar

Con los accesorios adecuados, verás cómo el almacenaje de tu casa se multiplica, dejando mucho espacio liberado. En la cocina son básicos. Si tus muebles tienen los estantes interiores muy altos, coloca unas baldas adicionales que amplíen el espacio para guardar de manera segura y decorativa. Asimismo, en los cajones de la cocina en los que guardes las sartenes, coloca separadores, evitarás que se rayen y estropeen. Y, para los armarios esquineros, existen accesorios que permiten aprovechar el fondo de estos muebles. Se llaman carruseles. 

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