© Pepe PeñalverLa decoración del salón gira en torno al sofá. Por eso es tan importante cuidar la pared en la que este mueble se apoya, aprovechar su potencial decorativo para que luzca con estilo y que contribuya a enriquecer el espacio. Por suerte, existen infinidad de recursos que nos pueden ayudar a lograrlo: desde composiciones de cuadros o fotografías hasta espejos, estantes o atrevidas soluciones con las que añadir dinamismo al ambiente. Aquí tienes 10 ideas que seguro te inspirarán a la hora de dar vida a la pared del sofá.
Un gran cuadro
Colocar una obra de arte de gran formato sobre el sofá, justo en el centro, es una fórmula perfecta para convertir este frente en punto focal de la decoración. Procura, eso sí, que el tamaño del cuadro sea proporcional al de la pared y que encaje con el estilo de los muebles y el color de las tapicerías, que en este caso, pertenecen a la colección Madeira de Pepe Peñalver.
© IKEAUna composición de cuadros
Siguiendo con la idea de los cuadros, también puedes optar por decorar la pared que queda detrás del sofá con una composición de láminas enmarcadas, bien simétrica, con cuadros colgados a la misma altura y a una distancia equidistante, bien irregular, con obras de diversos tamaños, a difentes alturas. Incluso, puedes combinar diferentes elementos, no solo láminas: desde fotos, postales, dibujos, instrumentos músicales, recuerdos de viajes… El resultado será de lo más personal.
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© Jordi Canosa para Pia CapdevilaCon fotos
Las instantáneas familiares, con amigos o de los paisajes de tus útimas vacaciones aportarán un plus de personalidad a cualquier rincón de tu casa, incluida la pared del sofá. Para evitar que marquen demasiado la decoración o que se vea un batiburrillo de diferentes tonalidades, puedes optar por imágenes en blanco y negro y, a ser posible, de una misma serie o temática. En cuanto a cómo colocarlos, una regla que no falla es jugar con las líneas paralelas y procurar dejar siempre la misma distancia entre unas y otras.
© La RedouteGana sensación de amplitud con un espejo
Junto a cuadros y fotografías, los espejos son otros de los elementos preferidos a la hora de decorar la pared del sofá, especialmente cuando se trata de especios pequeños. Recuerda que este elemento decorativo es un recurso perfecto para ampliar visualmente el espacio y multiplicar la luminosidad. Puedes optar por un modelo de grandes dimensiones, como este de La Redoute Intériors o, si no son muy grandes, crear una composición de dos espejos idénticos colocados en sentido horizontal.
© IKEAUn juego de espejos
La tendencia de decorar la pared con espejos cada vez tiene más adeptos, más aún las composiciones con diseños que no son muy grandes. Un espejo pequeño se vería perdido en la pared, pero con otros de distintos tamaños, lograrás un conjunto de lo más vistoso y decorativo. Aunque eso sí: si las dimensiones de tu composición no son proporcionales a las del sofá, procura no colocar los espejos centrados en la pared; mejor hacia uno de los lados como se hizo en este ambiente de IKEA. Apunta: no tienen por qué tener todos los espejos la misma forma, ni tampoco el mismo marco. ¡Atrévete a romper la uniformidad!
© CoordonnéApuesta por un espectacular mural
Si a las infinitas posibilidades decorativas de los revestimientos murales sumamos que, en ocasiones, no nos atrevemos a cubrir todas las paredes de una estancia con el mismo papel por miedo a recargar el espacio, tenemos un nuevo recurso con el que dar vida a la pared del sofá: los murales. Además de ser tendencia, encontrarás una gran variedad de diseños, de todo tipo de temáticas y diferentes tonalidades. Y si eliges un mural con profundidad, tu salón parecerá más grande. Éste es el modelo Doñana Sky de Coordonné.
© RQH StudioImagen personalizada
¿Quieres una decoración 100% personal y única? Una alternativa a los papeles o revestimientos murales que puedes encontrar en las tiendas son los murales personalizados. Firmas como Perswall, Good Vinilos o Fotomurales entre otras muchas, realizan murales a medida a partir de la imagen que nosotros queramos. Eso fue lo que hizo el interiorista Rober Quiñones-Her, de RQS Studio, para decorar la pared de este salón: encargó un mural con la imagen de hojas de palmera impresa en papel pintado textil barnizado.
© Jordi Canosa para Pia CapdevilaCuando no es una, sino dos paredes
En el caso de los sofás rinconeros o esquineros que se apoyan en dos paredes, habrá que buscar soluciones para animar ambos frentes y, al mismo tiempo, evitar la saturación decorativa. En este salón, la interiorista Pia Capdevila eligió un solo cuadro para una de las paredes, y en la otra, colocó tres baldas corridas para los libros.
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© Mercè Gost para Tinda's ProjectCon baldas
Porque además de posibilidades decorativas, las paredes ofrecen valiosas zonas de almaceneje. Solo hay que aprovecharlas como hizo el equipo de Tinda's Project en este salón. En el frente que queda detrás del sofá se colocaron dos baldas corridas de madera natural, un acabado que crea un atractivo contraste con el verde de la pared. Estas baldas sirven para colocar desde libros y objetos decorativos hasta platas o fotografías.
© LuzioCon mapas
¿Y si das un toque cosmopolita a la decoración de tu salón con una composición de mapas? Desde tus últimos viajes, a destinos que quieras conocer, mapas antiguos, estelares…Son, sin duda, otra opción decorativa que seguro que propicia interantes conversaciones de sofá. También existen tiendas on line como Tusmapas o Mapness que te dan la opción de encargar mapas personalizados de ciudades, regiones o países de cualquier parte del mundo. Este salón pertenece a un proyecto de Luzio.
