Continuidad visual, equilibrio y comodidad. Sin juntas, sin desniveles… Tener un plato de ducha enrasado ya elimina diferencias de nivel, pero si además la zona de la ducha se reviste con el mismo material que el resto del suelo, el efecto es wow. Estos baños son un ejemplo
Dos cabinas, mismo suelo
Aquí la continuidad la logra el estudio Kinze Studio con material porcelánico de gran formato, que reduce las juntas. Se ha usado en paredes y suelos tanto en la cabina del inodoro como en la de la ducha, con un cristal fijo transparente entre ambos ambientes. Es importante en esos casos que la plancha del suelo sea antideslizante.
Suelo continuo de mosaico
Con un suelo continuo de mosaico que combina zonas en blanco con otras salpicadas de teselas en negro. Una combinación clásica de la colección Les Classiques de Hisbalit. En este proyecto de suelo continuo sin plato de ducha son las zonas con puntos negros los que determinan el uso de ducha, lavabo y bañera. ¡Muy original!
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Continuidad en suelo y paredes
En este baño proyectado por el estudio Molins Design la continuidad es doble, tanto en paredes como en suelo. El mismo revestimiento se prolonga en la zona de la ducha, que queda delimitada por la mampara de cristal transparente con puerta abatible. Con un plato de ducha enrasado se logra el mismo efecto, aun así hay un cambio de material, aunque el plato se escoja en un tono muy similar al del suelo.
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Platos continuos, guías encastradas
En este proyecto de The Room Studio, con un suelo continuo que reviste la zona de la ducha, la guía por la que se desliza la hoja corredera de la mampara se encastra en el suelo para que no sobresalga y mantener así esa comodidad y seguridad sin elementos que creen desniveles.
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Platos continuos con desagües especiales
Cuando los platos de ducha no tiene cabida en el baño y se sustituyen por un suelo continuo, los desagües se pueden integrar de diferentes maneras para que no destaquen. Lógicamente en la instalación, la impermeabilización es total y la baldosa, como hemos mencionado, evita resbalones. En el caso de los desagües se pueden instalar más visibles con rejilla o diseños rectangulares que dejan solo una ranura a la vista, revistiéndose de la misma baldosa usada en el suelo. Este es un proyecto de Quefalamaria.
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Suelo continuo para zonas compartidas por bañera y ducha
Cuanto en el cuarto de baño hay espacio suficiente para instalar una bañera y una ducha, una buena opción es crear una zona específica con ambos elementos. Es lo que sucede en este proyecto de Natalia Zubizarreta Interiorismo. Tras una mampara divisoria (en cristal transparente para no empequeñecer el baño y dejar que la luz natural de la ventana fluya), se encuentra una bañera exenta y una doble ducha con el mismo suelo continuo en todo el espacio. En este caso, sí se produce un cambio de pavimento respecto al resto del baño.
Con mosaico en blanco y negro en la zona de ducha y bañera, en contraste con el color
Otro baño de distribución con zona de bañera y ducha juntas pero con un efecto más marcado por los contrastes entre el suelo de mosaico en blanco y negro -de Hisbalit- y la pared con mueble en color amarillo vibrante. En la zona de la ducha, el baño continúa con la unidad al usar el mismo revestimiento en las paredes.
Suelo continuo aunque marcado por un cambio de tamaño en la baldosa
Con un efecto acabado acero corten, la baldosa de este baño mantiene la misma estética en la zona de lavabo que en la ducha, aunque cambia el modelo escogido para revestir la zona de la ducha. Mientras que en el baño se escoge una baldosa cuadrada grande, en la ducha son pequeños cuadrados los que delimitan visualmente, aunque sin desniveles ni cambio de estética. La cerámica es de Aparici.
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Y si hablamos de continuidad en el baño…
El microcemento es uno de los materiales que no podemos olvidar cuando se trata de dar continuidad en la zona de la ducha. The Room Studio lo usa en este baño en suelos y paredes, logrando la estética de unidad. Se trata de un material impermeable que, además, no aporta juntas.
Suelo continuo aunque con desnivel
En este caso, la zona de la ducha se reviste con el mismo pavimento que en el resto del baño, buscando la continuidad visual, aunque con un desnivel, ya que la ducha queda más elevada. Es una solución que no abandona el uso del mismo revestimiento en todo el espacio y que puede ser útil en reformas que no permiten enrasar el plato o dejarlo al mismo nivel por tema de instalaciones. En este espacio, la grifería es de Ramon Soler.
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