La familia de la marquesa Violante Guerrieri Gonzaga proviene del norte de Italia, de la región de Mantua, pero ella tiene el privilegio de habitar en un pedazo de la historia de Roma. El icónico Palazzo Taverna es uno de los pocos palacios que quedan en la Ciudad Eterna en manos privadas y Violante y sus hijos, los príncipes Gregorio y Lavinia Boncompagni Ludovisi, los afortunados habitantes de la histórica residencia. Los hermanos pertenecen a una prominente dinastía romana que cuenta con dos Papas en la familia, uno de los cuales, el papa Gregorio XIII, fue responsable de promover el calendario gregoriano.
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Estrellas de Hollywood como Angelina Jolie, Cindy Crawford, Kristen Stewart y Michelle Pfeiffer son algunas de las invitadas que se han sentado a la mesa de la gran anfitriona italiana
A la marquesa Violante Guerrieri Gonzaga, sin embargo, no le gusta que se dirijan ella como tal. Prefiere el cercano ‘Vio’s’, el diminutivo por el que la conoce su círculo cercano y todo aquel que ha tenido el honor de disfrutar de una de las propuestas gastronómicas definitivas de Roma, Vio’s Cooking. Una clase magistral donde cocina, arte e historia confluyen en una experiencia inolvidable con vistas a la Ciudad Eterna y por la que han pasado celebrities como Angelina Jolie , Cindy Crawford o Kristen Stewart. Y todo desde el histórico Palazzo Taverna, del que Vio’s y Lavinia, mano derecha de su madre, nos abren las puertas. Se trata de uno de los palacios más hermosos que alberga el corazón de la ciudad, una antigua fortaleza ubicada junto a la Piazza Navona, donde Vio’s organiza sus refinados eventos gastronómicos y viste esas maravillosas mesas que destilan extravaganza italiana, siempre acompañada por su pequeño lebrel italiano, que, como no podía ser de otra manera, se llama ‘Cookie’.
“Casi toda mi familia vive aquí. Mi residencia está en el ático, un hogar acogedor y lleno de encanto, con unas vistas magníficas”, dice Violante
—¿Cuál es el pasado de Palazzo Taverna?
—El palacio se remonta al siglo XV y era, en su origen, una fortaleza que pertenecía a la familia Orsini, si bien a lo largo de los años se fue transformando, de forma progresiva, en un hermoso, aunque imponente, palacio que entraba a formar parte del patrimonio de la familia Taverna, la familia de mi madre, en torno al año mil ochocientos. En la actualidad, es uno de los palacios más famosos del centro de Roma, uno de los pocos que sigue siendo de propiedad privada. Y cuenta con un fascinante pasado como centro sociocultural, donde fueron acogidas figuras tan destacadas como el literato Torquato Tasso, el poeta Gioachino Belli o el cardenal Bonaparte.
—¿Cómo es habitar en un trozo de la historia de Roma?
—Vivir en esta realidad tan especial es un poco como vivir en un pueblo, donde la gente se reúne en torno a la casa. Casi toda mi familia vive aquí y dispone de un patio interior que aún conserva su majestuosa fuente construida por el arquitecto Casoni. El palacio es tan grande que incluso alquilamos algún apartamento. Mi residencia está en el ático, un hogar acogedor y lleno de encanto, con unas vistas magníficas que sobrevuelan la Ciudad Eterna. Desde mi terraza es también desde donde dirijo mi negocio.
A su familia pertenece el Papa Gregorio XIII, quien fue el responsable de promover, en el siglo XVI, el calendario gregoriano, que utilizamos hoy en día
—¿Cuál es tu rincón favorito?
—Las increíbles vistas trescientos sesenta grados que disfruto desde aquí hacen que te sientas en el mismo corazón de Roma. El color del cielo cambia a cada momento y se refleja en los tejados y en los mármoles y cúpulas de esta ciudad tan hermosa y decadente. La puesta de sol es sobrecogedora, hasta mis invitados se quedan sin palabras. Cuando estuvo aquí, Michelle Pfeiffer quería quedarse a toda costa (risas)...
—¿Cómo celebrarás la Navidad?
—En el palacio hay una primera planta llamada piano nobile, o piso noble, donde hay reunida una importante colección de pintura que incluye obras de Sebastiano Ricci o Rosa da Tavoli. Ahora mismo, el ático, donde yo vivo, es mi lugar favorito, pero antaño mis abuelos habitaban esa primera planta del palacio. En la actualidad, es donde toda la familia se reúne en Nochebuena para una cena llena de magia que organiza mi tía Stefanina Aldobrandini, cuyo catering es muy reputado.
“Mi padre es el fundador de la bodega donde se elabora el vino San Leonardo, uno de los más apreciados de Italia, y de cuya elaboración y gestión se encarga ahora mi hermano, Anselmo”
—¿Cuál es tu plato navideño predilecto?
—El merengue, sobre todo. Adoro su textura y cómo funciona con la crema fresca y los frutos del bosque. Siempre lo preparamos en Navidad.
—¿De dónde viene tu pasión por recibir y por la buena mesa?
—Vengo de una familia donde recibir es una parte fundamental de la vida. Mi padre es el fundador de la bodega donde se elabora el conocido vino San Leonardo, uno de los más apreciados de Italia, y de cuya elaboración y gestión se encarga ahora mi hermano, Anselmo. La bodega se encuentra en el norte de Italia, en Trentino, cerca del lago de Garda. Mi madre, por su parte, tenía que organizar cenas diariamente en su papel de relaciones públicas, y mi hermana es una gran cocinera. Mis tías y mi abuela ya estaban involucradas en el mundo de las grandes recepciones. Pero yo me formé en arte y también adoro pintar.
“Me dedico a crear la primera pieza de cada colección de vajilla o cristalería que comercializo y dejo en manos del magnífico equipo de artesanos que colabora conmigo para completarla”
—¿En qué consisten las experiencias que organizas a través de Vio’s Cooking?
—Se trata de una exclusiva propuesta gastronómica en el corazón de Roma. Organizo eventos muy especiales en mi propia terraza para invitados distinguidos, ejerzo de anfitriona, los llevo al mercado, luego cocinamos y disfrutamos juntos del resultado en mi terraza. Más que una clase magistral de cocina, diría que es una experiencia.
—Cuentas con muchas celebrities entre tus invitados, ¿alguna que recuerdes especialmente?
—Es cierto que por casa han pasado muchos rostros conocidos. Angelina Jolie disfrutó de un desayuno muy especial y de una clase de pintura, mientras que Kristen Stewart participó en una clase de cocina y dimos un paseo por el mercado de producto fresco de Campo de Fiori. Aún recuerdo cómo acabó rodeada de gente que señalaba a la “chica vampiro”, fue muy divertido (risas). Cindy Crawford, que es encantadora, ha repetido, y Chiara Ferragni ha venido ya tres veces, una de ellas para celebrar en la terraza su aniversario de boda con Fedez, porque las luces nocturnas resultan increíblemente románticas. Pero lo que más me gusta es una buena cena con mi familia. Ellos son, sin duda, mis invitados favoritos. Me encanta disfrutar de mi terraza al atardecer, con una copa en la mano, en compañía de mi pareja, Francesco Sforza Cesarini. Pero no todo transcurre en casa. Una de mis últimas aventuras, este mismo verano, tuvo lugar en Grecia, en el icónico yate ‘Christina O’, donde organicé unas mesas maravillosas llenas de flores para una fiesta.
“Organizo eventos especiales para invitados distinguidos, ejerzo de anfitriona, los llevo al mercado, cocinamos y disfrutamos juntos del resultado. Más que una clase magistral de cocina, es una experiencia”
—¿Qué distingue a tus mesas?
—Una de las cosas que más valoro en torno a una mesa es aportar un toque diferente, por ello, a menudo recurro a las velas. Pero una mesa nunca es igual a otra. Mi secreto es crear una atmósfera mágica, la calidad de la comida y que todo esté elaborado en casa, y mi objetivo, trasladar a la mesa el estilo de vida italiano y la manera de recibir y acoger de este país. Creo que la belleza está dentro de nosotros y, por ello mismo, somos capaces de generarla alrededor. De esa pasión surgió un libro sobre cómo recibir en casa y luego abrí una tienda sobre el arte de vestir la mesa, Vio’s Shop, que está justo debajo de casa.
—Te formaste en arte y te gusta la pintura, ¿cómo das rienda suelta a tu talento en este campo?
—Me formé en la Accademia Belle Arti di Roma. Me encanta pintar y cuando mejor lo hago es por la noche, cuando los ruidos desaparecen, las luces se apagan y me quedo en compañía de mi mundo interior. Me gusta poner música suave y pinto durante toda la noche, hasta que acabo el proyecto que tenga entre manos. Óleo sobre lienzo, trampantojos, sobre vajilla... También me gustaba dar lecciones de pintura a mis hijos y a los hijos de mis amigos por la tarde. Ahora, debido al proyecto de la tienda, me dedico a crear la primera pieza de cada colección de vajilla o cristalería que comercializo y dejo en manos del magnífico equipo de artesanos que colabora conmigo para completarla. Tienen un oficio increíble y todo está rigurosamente hecho en Italia. Me inspiran mucho mis viajes al extranjero, algo que influye en lo que pinto y en lo que fotografío, otra de mis grandes pasiones. Se puede apreciar en las piezas de Vio’s Shop porque siempre hay una nota exótica.
“Angelina Jolie disfrutó de un desayuno y una clase de pintura, Kristen Stewart participó en una clase de cocina y Chiara Ferragni ha venido tres veces, una de ellas, para celebrar su aniversario de boda”
—¿Cómo te organizas entre tu proyecto “gastro” y esa tienda que es tan fiel a tu universo?
—Mi hija y yo nos llevamos estupendamente, yo soy la mente creativa y ella es una gran gestora, entiende de e-commerce y plataformas como nadie. Viene de la industria de la moda y trabajaba en publicaciones del sector en Hong Kong antes de unirse a mí durante la pandemia. El equipo lo completa Solaia Price, una chica fantástica. Y ahora estoy a punto de lanzar Vio’s Cafe, una nueva aventura.
—¿Te gusta hacer vida de barrio?
—Mi tienda está en la encantadora Via Orsini, justo a las afueras del palazzo y frente a la tienda de mi amiga Sofía de Habsburgo. Nos vemos por la mañana en nuestros respectivos espacios, tenemos clientes comunes e incluso organizamos la inauguración conjunta, el año pasado, con una glamurosa street party. Disfrutamos mucho de la vida de barrio.