Cómo lavar la ropa de niños y bebés para mantenerla como nueva

Lavar la ropa de los niños y los bebés no difiere mucho de las coladas que ponemos con nuestra ropa, aunque sí que es cierto que hay que tomar ciertas precauciones para proteger su piel. Y es que tanto bebés como niños pueden desarrollar algunas alergias cutáneas o dermatitis si no empleamos los productos adecuados. Repasamos qué es lo que tienes que tener en cuenta para mantener la ropa de tus hijos como nueva. 

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Antes de usarla…

¡Lávala! Siempre que compres algo nuevo para tu bebé o tus hijos, asegúrate de lavarlo antes de que lo usen. La ropa (tanto la infantil como la nuestra) es tratada con un apresto y ciertos productos químicos que impiden que se arruguen más fácilmente y, además, ayudan a que su color sea más brillante. Es uno de los motivos por los que hay que lavarla. Pero también pasa por muchas manos: los dependientes, la gente, puede haberse caído al suelo… Cuando compres algo nuevo para tus hijos, puedes lavarlo en un programa rápido con agua fría y un jabón neutro o específico para ropa infantil. 

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Hazlo también con la ropa que te regalan

Es habitual que la ropa de bebé pase de unas manos a otras. Los bebés crecen muy rápido y muchas prendas no se llegan ni a estrenar. Por eso es habitual regalarla a alguien que acaba de ser mamá y así evitar más residuos, además de darle una segunda vida (o tercera). Puesto que esta ropa puede haber estado guardada durante varios meses, lo más adecuado es que también la laves en un programa rápido para eliminar el polvo.

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Usa detergentes específicos y evita el suavizante

Para evitar que tus hijos desarrollen alergias o dermatitis, lo más adecuado es emplear un jabón neutro, para ropa delicada o específico para ropa infantil. Cuantos menos productos químicos pongas en contacto con la piel de tu bebé, mucho mejor. Y es que su piel aún no está habituada al exterior y sufrirá tanto con las altas temperaturas como con ciertos componentes químicos. Los detergentes para ropa de bebé cuentan con ingredientes naturales que evitan que la piel de los recién nacidos se vea afectada por posibles alergias. 

En el mismo contexto que el anterior, deberías evitar siempre el uso del suavizante en la ropa infantil, ya que se aplica después del aclarado y las sustancias químicas suelen quedar adheridas a la ropa. 

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Comprueba siempre la etiqueta

Antes de lavar cualquier prenda infantil, al igual que debes hacer con toda la ropa antes de lavarla por primera vez, comprueba su etiqueta. Lo habitual es que este tipo de ropa no destiña ni tenga especificaciones raras, pero aun así es aconsejable hacerlo para evitar que se pueda estropear. Ahí viene especificado la temperatura adecuada a la que hay que lavarla, si se puede utilizar la secadora, si es aconsejable el uso de lejía, etc.

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Cómo lavar la ropa de niños y bebés

La ropa infantil puede lavarse tanto a mano como en la lavadora. Lo más adecuado es que, cuando es muy pequeño, pongas las coladas tan solo con su ropa, por ser más delicada, pero después sí que podrás mezclarla con vuestra ropa en la misma lavadora. Ahora, sí que te recomendamos que sigas las indicaciones anteriores y emplees un detergente neutro o para prendas delicadas y evites el uso del suavizante. Si tienen alguna mancha, lo más adecuado es pretratarla previamente con un poco de jabón neutro y agua tibia. 

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Cuidado con la ropa más delicada

La ropa infantil que cuenta con bordados, puntillas, encajes o está confeccionada con tejidos muy delicados hay que lavarla siempre a mano. Y es que estas prendas sufren mucho durante los lavados. Por eso, lávalas en agua tibia con un detergente neutro. Frota las posibles manchas y después aclara bien las prendas. No las aprietes demasiado al escurrirlas y tiéndelas en plano para que no se deformen. 

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Cómo secar la ropa infantil

Para que la ropa de bebés y niños se mantenga como nueva durante más tiempo, te recomendamos que intentes secarla siempre al aire libre. Las prendas más delicadas tiéndelas en plano. También puedes utilizar la secadora para que el proceso sea más rápido, evitando siempre meter las prendas más delicadas, con encajes o bordados. 

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Cómo guardar la ropa del bebé y la ropa infantil

Al guardar la ropa del bebé, hazlo por tipos. Por un lado, los bodis, por otro los pijamas, por otro las camisetas, etc. Así te será mucho más fácil encontrarla. Al igual que haces con tu ropa, puedes utilizar el doblado vertical: podrás ver todo lo que guardas en el cajón de un rápido vistazo.

Ahora, cuando tu hijo o hija va creciendo, es aconsejable que pongas su ropa en un armario donde sea accesible para él o ella, así podrá elegir qué es lo que quiere ponerse, dándole más autonomía según las enseñanzas de María Montessori. 

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Lava también sus peluches

De vez en cuando es aconsejable que laves también los peluches, dudús y otros juguetes de tela de tus bebés para evitar que acumulen demasiado polvo. Antes de hacerlo, asegúrate (comprobando la etiqueta) que puede meterse en la lavadora y que no tienen ningún descosido. Mételo en una funda de tela, como un almohadón, y en un programa corto, con un detergente suave y agua fría. Deja que se seque al aire libre y evita la secadora, pues podría estropearlo. 

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