Una de las cosas que nos gustan de la campanilla china (Platycodon grandiflorus), además de sus flores espectaculares, es que se trata de una planta perenne y, por tanto, no perderá las hojas ahora que llega el otoño. Seguirá decorando el jardín o el salón, ya que puede cultivarse en exterior o interior.
Una belleza de origen asiático
La campanilla china, lo dice su nombre, es una especie procedente del continente asiático. Sin embargo, como se trata de una planta resistente, capaz de adaptarse a casi cualquier entorno, hoy se cultiva sin problemas en la mayor parte del mundo.
También en Europa es una planta habitual, perfecta para decorar jardines y espacios verdes. En algunos lugares se la conoce también como “planta globo” ya que sus yemas se hinchan considerablemente justo antes de florecer.
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Hojas y flores, su mayor encanto
Una de las razones por las que cultivar la campanilla china es una gran idea es la belleza de sus flores y también de sus hojas. Estas son ovaladas, de bordes dentados y un intenso y brillante color verde. Ya solo gracias a su follaje merece la pena hacerle un hueco en el jardín. Además, esta planta hace gala de una abundante y espectacular floración, una razón poderosa para buscarle un lugar de honor.
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Una larga floración
Al llegar la primavera la campanilla china se llena de yemas que se van hinchando hasta convertirse en grandes flores con forma acampanada. Pueden ser blancas o rosadas, aunque el color más frecuente es el violeta azulado.
La floración de esta planta es larga, ya que dura hasta principios del otoño. Cultivada en el jardín dará más flores, aunque en el interior también puede florecer si la pones en un lugar luminoso.
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Plántala en otoño
¿Te gustaría tener algunos ejemplares de campanilla china en tu jardín? Tanto si la compras en un vivero como si la reproduces a partir de semillas, deberá crecer en maceta hasta que tenga unas cuantas hojas. Después ya podrás trasplantarla al suelo del jardín, y el otoño es la mejor época para hacerlo ya que las temperaturas todavía son suaves.
Una vez tengas hecho el agujero de plantación, conviene que pongas un poco de materia orgánica mezclada con la tierra. Así tu campanilla china tendrá más nutrientes que favorezcan su crecimiento.
Un consejo: búscale un emplazamiento luminoso, donde le lleguen los rayos del sol. Esto potenciará su floración, que será más abundante.
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Cultívala como planta de interior
Si prefieres disfrutar de tu campanilla china dentro de casa has de saber que puedes hacerlo, siempre que le des los cuidados que necesitará en este emplazamiento. Se trata de una planta que crece perfectamente en maceta.
Aunque soporta condiciones de frío moderado, dentro de casa estará muy bien en invierno, siempre que la pongas en un lugar a salvo de corrientes de aire y no la acerques demasiado a un radiador u otra fuente de calor. También es importante que el lugar donde esté tu campanilla china sea muy luminoso, para que pueda florecer en todo su esplendor llegado el momento.
Un consejo: para crecer adecuadamente en maceta, esta planta necesita un sustrato rico en nutrientes y con un buen drenaje. Una mezcla de turba y perlita o arena será perfecta.
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Protégela del frío
Aunque la Platycodon grandiflorus puede soportar las bajas temperaturas de forma moderada, es importante protegerla de las heladas, ya que resultan bastante perjudiciales para ella. Por eso, si vives en una zona de invierno rigurosos lo mejor que puedes hacer es podar la parte aérea de la planta y esperar a que rebrote en primavera.
Las raíces se mantienen latentes y vivas bajo tierra, aunque les ayudará que hagas un buen acolchado sobre el sustrato. Extiende una buena capa de corteza de pino o mantillo sobre la tierra para proteger las raíces de las bajas temperaturas.
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¿Cómo hay que regar la campanilla china?
No es una planta que necesite grandes cantidades de agua. Más bien al contrario, requiere que el riego sea moderado y controlado. Los terrenos encharcados no le gustan nada y pueden perjudicarla bastante.
Para hacerte una idea, en los meses más calurosos tendrás que regarla de forma generosa unas tres veces a la semana. Una vez llegado el otoño has de ir disminuyendo progresivamente el aporte de agua.
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El abonado, una tarea importante
¿Quieres que tus plantas de campanilla china florezcan abundantemente en primavera? Pues entonces es fundamental que les proporciones nutrientes suficientes. Para ello puedes aportar al suelo una buena cantidad de materia orgánica al principio de la primavera.
Otra opción es añadir un fertilizante mineral líquido al agua de riego desde el inicio de la estación primaveral y hasta el final del verano, con una frecuencia de una vez al mes.
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Así la protegerás de las plagas
Aunque la campanilla china es una planta resistente, sí puede verse afectada por algunas plagas. Al inicio de la primavera, por ejemplo, es posible que aparezca el molesto pulgón. A este tipo de insectos dañinos les encantan los brotes tiernos y jóvenes, por lo que debes estar vigilante para combatirlos en cuanto los detectes.
En verano, con el calor y la sequedad ambiental, tus plantas pueden sufrir el ataque de los ácaros. Para luchar contra estas plagas es aconsejable emplear un insecticida, mejor si se trata de una sustancia libre de químicos, como el jabón potásico o el aceite de neem.
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