El verano es la época del año que más invita a disfrutar de la playa, a dar paseos por un frondoso bosque o comer en un prado en un sombreado rincón. Y sin embargo el frío y a veces el mal tiempo (por el viento y las lluvias) hace que en otoño nos apetezca más el plan de ‘sofá y manta’. A todos los que residen en ciudades, que somos la mayoría, ello les puede provocar el trastorno por déficit de naturaleza (TDN), al encontrarnos desconectados de los espacios naturales al aire libre. ¿Ayuda traernos la naturaleza en los espacios a modo de plantas, papeles pintados o cuadros? Sí, la decoración va a ser una gran aliada para sobrellevar mejor este posible desorden.
Y aunque el verde puede predominar para inspirar interiorismos muy refrescantes, como ocurre en este salón cuyo papel pintado nos trae una imagen selvática (se trata del modelo Yasuni Lush Green, de Bagley’s Lane), del mismo modo una imagen natural nos la puede inspirar un ambiente azul que nos recuerde al mar y al cielo; en amarillo, que nos traiga a casa un día soleado todos los días; y, claro está, los cálidos tonos arena.
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¿En qué consiste el TDN y qué consecuencias acarrea?
Por regla general, ¡pasamos el 90 % de nuestro tiempo en interiores! Necesitamos un ‘baño’ de bosque, parques ajardinados o paseos libres de asfalto. El trastorno por déficit de naturaleza (TDN) lo definió por primera vez periodista Richard Louv, autor del superventas Los últimos niños en el bosque, obra que ponía el foco en el desarrollo infantil y la necesidad de niños y niñas de tener una exposición directa a la naturaleza.
Los efectos de este trastorno pueden ser: estrés, irritabilidad, un estado de ánimo bajo (que puede llevar a la depresión)… Aparte las consecuencias pueden llevar incluso a un malestar a nivel físico.
Nuestro ADN reclama menos tecnología y más contacto con la naturaleza, que desencadena salud y felicidad. El diseño biofílico aboga precisamente porque los interiores de la casa sean muy naturales en la elección de materiales, en la predilección por las formas orgánicas y, asimismo, gozar de luz solar el máximo de horas al día.
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Plantas, plantas… y más plantas
Las plantas de interior ofrecen muchos beneficios en nuestra salud y bienestar, siendo en muchos casos causantes de la mejora de la calidad del aire. Aparte, regalan una estética fresca muy acorde con los interiorismos más a la moda. Quizá influidos por los meses de reclusión obligada debida a la covid-19, la vegetación cada vez cobra más fuerza en las decoraciones actuales.
Por si no lo sabías, nos resulta reconfortante verlas y, de igual modo, según estudios científicos también nos aporta beneficios emocionales cuidarlas. En este dormitorio la selección botánica se ha adquirido en April Plants, en concreto sobre la mesita se coloca una calatea y, en el suelo, una sansevieria.
Una elección muy personal
Si te inicias en la jardinería te recomendamos que vayas adquiriendo plantas poco a poco, ya tendrás tiempo de crear un espectacular garden room, pero mientras, averigua bien qué exposición solar y riego precisa cada ejemplar, porque te puede generar muchos dolores de cabeza ver que alguno enferma. Así que si te consideras un aprendiz en la materia, lo mejor es que adquieras plantas fáciles de cuidar y, sobre todo, difíciles de matar.
Para gustos colores: hay personas que sienten predilección por las plantas con flor, otras por las verdes con grandes follajes o quienes hacen bueno el dicho de que ‘en el tarro pequeño hay la buena confitura’ y quieren llevar un microcosmos vegetal a un precioso terrario.
Leer más: Cómo decorar con plantas de interior: ¿cómo elegirlas y dónde colocarlas?
Puntos focales ‘de altura’
Para dar una nueva dimensión al diseño de los interiores con plantas, cada vez está más en boga integrar bellas plantas colgantes sujetadas en portamacetas de macramé, piel o en estructuras metálicas. Lo mejor de todo, cuando escasea el espacio, es que estos elementos murales no te robarán sitio en casa. ¿Qué especies puedes integrar? Hiedras, plantas rosario, sedums burrito, rhipsalis…
Además, al estar en altura estas plantas serán el foco de todas las miradas, convirtiéndolas en absolutas protagonistas en los garden rooms, como este de la propuesta, un ambiente frondoso de Westwing.
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Ideas con sabor
Tus plantas en la casa también pueden servirte de aderezo para los platos, por ejemplo, si cultivas aromáticas. No es necesario tener un huerto en el jardín para disfrutar de tus hierbas preferidas siempre frescas, como la albahaca, el perejil, el cilantro, el romero o el eneldo. Todas las variedades mencionadas prosperan bien en interiores y no precisan mucho espacio en la cocina o el lavadero.
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La naturaleza, la mejor musa
El diseño biofílico no se reduce a decorar con plantas y flores, dejamos atrás este capítulo para comentarte que tienes infinitas alternativas para recrear un paisaje natural en el interior de la casa. En la propuesta se hace mediante cuadros; este tríptico playero es obra de la artista Cristina Torres, de ETC Arte. ¿Otras alternativas? Láminas, grabados, fotografías… También esculturas, claro está. O, si lo prefieres, papeles pintados o efectos en pintura de pared, con sombras que nos recuerden la textura de la arena, por ejemplo.
Leer más: Cómo integrar el arte en la decoración, sin caer en el efecto 'museo'
Sigue un estilo ‘raw’
Las formas que más relacionamos con la naturaleza son las sinuosas, como círculos, óvalos o trazados en ‘8’ y con ellas nos sentimos conectados, nos genera bienestar contemplarlas. Es por este motivo que cada vez más firmas apuestan en sus diseños por las líneas orgánicas curvas en alfombras, taburetes, lámparas y hasta bañeras exentas o sofás.
Además, para crear ambientes sanos, el biointeriorismo reclama que los materiales sean naturales y no se procesen con tratamientos tóxicos, sino que, a lo sumo, se empleen aceites u otros productos sostenibles. Cumpliendo con todos estos requisitos se presenta este dormitorio de La Redoute Interieurs. Viste los ambientes con tejidos sostenibles, que son los que van acordes con esta tendencia que casi es más un estilo de vida que otra cosa. Pero como puedes comprobar, se logran unas decoraciones tan auténticas e inspiradoras que seguro que el trastorno por déficit de naturaleza no hace acto de presencia en tu hogar.
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El toque final
Un arreglo floral o un ramo a base de flor fresca cortada, que aporte color y también una delicada fragancia, redondeará una ambientación en la que la naturaleza luzca en casa en todo su esplendor. Este ramo lo ha diseñado la propietaria de la floristería barcelonesa Tiësto, Maila Iammartino; en concreto emplea flores muy variadas como rosas, tulipanes, jacintos o ranúnculos.
También puedes decorar un rincón de casa con flores preservadas, que perduran mucho más tiempo.
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