En toda vivienda, incluso en las más pequeñas donde se intenta sacar partido a cada centímetro, hay un rincón que no se utiliza o que se ha (re) llenado de cualquier forma para evitar el ‘horror vacui’. Estas ideas de decoración te ayudarán a aprovechar mejor esos huecos muertos o simplemente darán una segunda oportunidad a esquinas y zonas que pasan desapercibidas porque no tienen un motivo, ni funcional ni decorativo, para formar parte de la decoración de interiores de tu casa. En esta propuesta, por ejemplo, se ha aprovechado una zona de la librería para acoplar una mesa de trabajo y se ha usado el alféizar de la ventana como repisa.
La subida de la escalera
Cuando esta zona de paso no coincide con el recibidor suele dejarse fría y algo desangelada. Sin embargo, tiene muchas posibilidades, como esta que propone Zara Home. Un banco, un espejo y una mini mesita auxiliar y ¡voilà! Eso sí, no hace falta que gastes mucho en el kit, pero sí que elijas algo especial que aporte valor y encanto, como ocurre aquí, convirtiéndole en uno de tus rincones preferidos de la casa, para leer un libro o llamar a tu madre.
Un comedor mini al lado de la ventana
Si salón y comedor comparten espacio y no sobran los metros cuadrados, nada mejor que una mesa redonda, como la Pion de Sancal, que puedes adosar en un rincón, sin empequeñecer ni ocupar de más. Si, además, sustituyes las clásicas sillas por taburetes, como aquí, harás todavía más liviano el conjunto, ya que puedes esconderlos debajo cuando no los uses. La idea del cuadro es perfecta para dirigir las miradas hacia este mini comedor con tan buen ‘feeling’ decorativo.
Un lugar para ti
Y tus ‘hobbies’. En el dormitorio, en el salón o en el recibidor, si tienes un hueco libre, preferiblemente con luz natural, no dudes en hacerlo tuyo y darle uso. Si te gusta coser y sigues ‘Maestros de la costura’ esta propuesta de Borästapeter es perfecta para hacerte tu propia ropa (con la pandemia la venta de máquinas de coser se disparó), pero también puedes poner una mesa para pintar, para montar maquetas o, incluso, para teletrabajar algún día.
Silencio, zona de lectura
Tanto si eres una lectora empedernida como si solo quieres un pequeño refugio personal donde desconectar, pensar en tus cosas, planificar las vacaciones o poner en orden tu vida, mientras te tomas el segundo café del día, un rincón de lectura es tu mejor opción. Lo ideal es encontrar un sitio, aunque sea mini y esté en el salón, que esté alejado del ruido y del paso, después bastará con una butaca y un reposapiés, como estos de &Tradition, una mesa auxiliar y una lámpara de pie o de sobremesa. Por cierto, si está cerca de una ventana, tendrá todo para ser perfecto.
Un despacho con estilo
El teletrabajo es una realidad para muchos, aunque principalmente en su versión mixta con la opción de ir a la oficina tres días y dos quedarse en casa, por ejemplo. Por eso, una buena idea es habilitar un rincón de una de tus estancias, preferiblemente que no se trate del dormitorio, para montar un despacho. Esta idea de Mobalpa aprovecha la librería del salón para diseñar uno con todo lo necesario: una silla que se mete debajo de la mesa para no ocupar, sitio de almacenaje, punto de luz y ventana y armarios inferiores para guardar la impresora y todo aquello que no quieres que se vea.
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Una librería en esquina
Si eres una apasionada de la lectura y la librería del salón se te ha quedado pequeña, cualquier rincón es perfecto para acoplar una o más estanterías que te proporcionen hueco extra para tener tus libros ordenados. Puedes poner una baja justo debajo de la ventana o, como en esta propuesta de Horm, poner dos módulos altos justo en la esquina. Elige un diseño ligero, sin trasera y preferiblemente en color blanco para que se funda con la pared.
Un vergel
Una buena idea, especialmente en verano que necesitamos la frescura de las plantas, es crear un vergel que, además de aprovechar un hueco muerto, te ayude a tener un pulmón verde en tu casa. De esta manera, no solo decorarás ese espacio y harás que sea más apetecible y acogedor, sino que, además, purificarás el aire, darás un toque de alegría e, incluso, bajarás los grados de tus estancias. Esta estantería de Dobbies es ideal para diseñar un jardín vertical en un mini rincón. Mejor si está cerca de la ventana.
Un tocador en el dormitorio
El dormitorio se ha convertido en uno de los lugares donde pasas más tiempo, por lo que debe ser muy cómodo y práctico para el día a día. Una manera de sacar partido a la zona bajo la ventana es montando un tocador. Puedes, como en esta propuesta de Sweetpea & Willow, usar la superficie de la cómoda para tal fin y completarlo con un puf multifunción (silla, descalzadora, galán de noche…), un espejo, una lamparita y un jarrón con flores. Otra alternativa es colocar una consola, las hay de solo 30 cm de fondo para no restar metros, y completarla con el resto de elementos.
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Zona infantil en la cocina
Si tienes una cocina grande y te sobra un rincón alejado de los fuegos, esta propuesta de Vitra es perfecta para que tus hijos puedan jugar mientras tú preparas la comida o la cena. Además, así los tendrás vigilados y podrás estar más tranquila si eres de la que adora preparar y probar platos nuevos. Solo necesitas una cocina de juguete y un par de sillas, como las Panton en versión mini. Los grandes cocineros aprendieron de sus madres…
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Un mueble de obra
Los muebles a medida te permiten aprovechar al máximo el espacio disponible y montar un rincón adaptado a ti. En esta propuesta de Quick-Step, se ha usado este hueco muerto junto a la ventana para hacer un sofá de obra con cómodos almohadones. Una solución que también puede hacer de cama de invitados. La idea de los dos escalones nos encanta.
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