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Plantas de interior y exterior

9 ideas para que tus plantas sobrevivan, si te vas de vacaciones

Cuidados para que estén perfectas a tu vuelta


4 de julio de 2022 - 15:44 CEST
© La Redoute

Cuando nos vamos de vacaciones, además de dejar nuestra casa, también ‘abandonamos’ los cuidados de nuestras queridas plantas, esperando que sobrevivan a las altas temperaturas y la falta de riego. Y pocas veces pasa. Por eso, si ve vas a ir varios días, deberías prever cuáles van a ser sus necesidades. Y es que las plantas son las grandes damnificadas de las vacaciones. Por eso, te proponemos varios cuidados que deberías dar a tus plantas antes de cerrar la puerta e irte a disfrutar de tu merecido descanso. 

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© IKEA

Antes de irte de vacaciones…

Antes de que irte de casa, préstales un poco de atención a tus plantas. Lo primero es comprobar su estado, podando las partes dañadas, como ramas y hojas secas. Así tus plantas absorberán menos agua durante las vacaciones. Después, debes regar bien todas y cada una de las macetas, asegurándote que no dejas agua en el plato de aquellas especies que no soporten los estancamientos. Asimismo, no bajes del todo la persianas: tus plantas siguen necesitando la luz. Lo ideal es colocarlas en una zona donde no les vaya a dar el sol directamente, especialmente ahora que las temperaturas son tan altas. 

Finalmente, prepara alguno de los métodos que te recomendamos a continuación. ¡Será la única manera de que tus plantas sobrevivan a tu ausencia!

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© Adobe Stock

Pídele a alguien de confianza que vaya a tu casa

Es la opción más sencilla y la que menos esfuerzo te supondrá, aunque no siempre la más eficaz. Y es que, si la persona a quien se lo encargas riega tus plantas sin tener en cuenta la especie o necesidades, puede que las ahogue, con el mismo resultado que si no las regaras. Por eso, nuestra recomendación es que dejes ciertas instrucciones sobre cuánto regar cada planta, en términos de cantidad de agua y frecuencia. Tú lo sabes, pero tal vez tu persona de confianza no tiene la misma afición que tú, no sabe que un espatifilo y un poto no necesitan el mismo riego. También puedes recomendarle que utilice el truco del palo: si lo mete en la tierra y sale seco, es que la planta necesita su dosis de agua. Puede que alguna se vea regular cuando vuelvas, ¡pero seguro que con tus cuidados la recuperas! 

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© Relaxdays

Hazte con unos conos de autorriego

Otra opción sencilla y económica para regar tus plantas es hacerte con un set de piezas de riego por goteo para macetas. Estos pequeños objetos se encajan con una botella llena de agua que podrás boca abajo en la maceta y en la tierra. Muchos de ellos cuenta con una válvula para ajustar la tasa de goteo, de manera que el agua puede durar hasta 15 días e ir ofreciendo a la planta la cantidad que necesita. También las hay de terracota. 

Y, si no quieres gastar nada de dinero, puedes hacerlo con una botella de agua con tapón. La única diferencia es que tendrás que hacer unos pequeños agujeros en este último que filtren el agua cuando pongas la botella boca abajo. 

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© BraveWind

Bombillas de autorriego, una opción que también decora

Con un funcionamiento similar al de los conos anteriores, pero más decorativos, las bombillas de autorriego son una opción más para cuidar tus plantas en vacaciones. Suelen tener un depósito de cristal templado donde se acumula el agua y una pipeta que va soltando el agua poco a poco según las necesidades que tenga la planta. Las hay con distintos diseños y formas, siendo una opción más estética a las botellas de agua con conos de autorriego.  

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© Huy Phan/Unsplash

El truco del cordel 

Uno de los métodos más económicos y fácil de llevar a cabo. Solo necesitas una garrafa de agua y un cordel de algodón. Así, mete uno de los extremos en la garrafa, de manera que toque la base para que, según vaya evaporándose el agua, sigan estando en contacto con esta. ¿Y el otro extremo? Pues debes meterlo en el sustrato de la planta. Así irán absorbiendo el agua cuando lo necesiten. Eso sí, para que este método funcione, tendrás que colocar el recipiente con agua en una posición superior a la de las macetas. 

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Si tu baño tiene luz, ¡mételas en la bañera!

Sí, ya sabemos que a las plantas no les gusta mucho que las cambies de ubicación, pero este método puede ser efectivo si en tu casa hace mucho calor y hay sequedad. Así, pon el tapón del desagüe y coloca un plástico sobre la base de la bañera para que no se dañe. Coloca unos ladrillos o maderas y llena la bañera de agua hasta que llegue al ras de los mismos. Después, lleva tus macetas al baño y mételas en la bañera. De esta manera, se beneficiarán de la humedad ambiental y gracias a la porosidad de estos materiales, que absorben el agua, tus plantas tendrán agua cuando la necesiten. 

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Pon agua gelificada en tus macetas

El agua gelificada es una opción más para darles agua a tus plantas cuando estás de vacaciones. Se trata de un hidrogel compuesto por agua y nutrientes que van regando las plantas poco a poco. Así, cuando la tierra se va quedando seca, el agua del hidrogel se va liberando poco a poco. 

Para utilizarlos tendrás que sumergir la bolitas en agua entre 2 y 12 horas, dependiendo del fabricante, y, después, ponerlos en tus macetas. El agua gelificada es también conocida como lluvia sólida, poliacrilato de potasio o retenedor de agua. 

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© Leroy Merlin

Hazte con unas macetas de autorriego

Aunque la inversión es algo superior a las ideas que te hemos dado previamente, merece la pena, ya que también te ayudará en el cuidado de tus plantas en el día a día. Las macetas de autorriego cuentan con un depósito estanco de agua conectado a unos tubos de absorción por los que la planta succiona el agua. Para que funcione bien, rellena los tubos de absorción con sustrato, dejando espacio para el cepellón. Después, llena el depósito de agua sin sobrepasar la marca que indica el recipiente. Pueden proporcionar agua hasta para todo un mes. 

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¿Y qué pasa con las de exterior?

En el exterior podrás utilizar cualquier de estos métodos, aunque el agua se evaporará con mayor rapidez. Por eso, lo más aconsejable, especialmente para tu jardín es que instales un sistema riego automatizado. Podrás programarlo para que proporcione agua a tus plantas a primera hora del día o a última, los mejores momentos para dar agua a tus plantas. 

Instala un sistema de riego por aspersión para el césped y otras plantas arbustivas, mientras que para las macetas es más recomendable un sistema de riego por goteo.  

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