Dónde y cómo incorporar un banco a la decoración de tu casa

9. En el jardín o la terraza

Cuando llega el buen tiempo, los muebles salen al exterior y el banco adquiere también protagonismo en el jardín, la terraza e, incluso, el balcón. Puede ser una buena opción en un comedor al aire libre, pero también en la zona de estar siempre que lo llenes de cojines, en un rincón de relax o en medio del camino, para hacer una parada y descansar. Crea ambiente, como en esta propuesta de Dobbies, rodeándolo de plantas, con una chimenea ‘outdoor’, velas y una manta para las noches más frías y habrás creado un lugar confortable y lleno de estilo. Con arcón también es una opción.

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12. En una zona de paso

Para hacer una parada en el camino en un descansillo entre dos plantas, un recibidor o un pasillo largo y crear un agradable rincón, tan funcional como decorativo. Para que cumpla su tarea sin acaparar demasiada atención ni metros visuales, elige un modelo, como este de Nest, ligero, práctico y con personalidad.

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11. En modo mesa auxiliar

Su versatilidad le permite actuar como asiento, lugar de almacenaje o superficie de apoyo según el momento. En esta propuesta de Oliver Bonas actúa como mesa auxiliar del rincón de lectura, cediendo la función de asiento propiamente dicha a la silla de madera. Al ser de lana ‘bouclé’ (una de las tendencias de decoración del momento) posee un plus de encanto, que hará más confortable cualquier espacio de tu casa.

10. En un rincón de relax

Si quieres crear un rincón de relax en el dormitorio o el salón y no quieres recurrir al típico sillón, un banco es la solución que estabas buscando. Siempre que refuerces su lado ‘cocooning’ con un asiento mullido y cálido, lo llenes de cojines y tengas cerca una manta si todavía hace frío, como en esta propuesta de La Redoute Interieurs. Según sus dimensiones podrá actuar también como un cómodo diván para echarse la siesta.

Modular, de doble o triple uso, capaz de cambiar y transformarse en mesita de noche, pie de cama, macetero, rincón de lectura, zapatero... Estamos ante uno de los muebles 'todoterreno' por excelencia de las casas actuales, uno de los auxiliares con más posibilidades en la decoración de hoy en día, donde la funcionalidad ocupa un lugar preferente. Reinventado y moderno, retro o escandinavo, colorido o natural, encuentra su lugar en todas las habitaciones de nuestro hogar. Lo utilizamos como asiento con capacidad o transformado en elemento de almacenaje, complementado con una cómoda o un cajón, en modo mesita de noche junto a la cama, como un macetero o, incluso, como diván. Estas 12 ideas de decoración te dan las pistas de su uso y disfrute.

1. A los pies de la cama

En el dormitorio de matrimonio se sentirá cómodo, siempre que tengas espacio suficiente delante, que le permita lucir y cumplir a la perfección su cometido. Puede actuar como descalzadora, para calzarte cómodamente, pero también en modo galán de noche, para dejar la ropa, o como superficie estratégica para los cojines. Puedes colocar uno que ocupe todo el ancho de la cama o, como en esta propuesta de Hannun, centrarlo y completarlo con un puf. Nos encanta la idea de usar la parte inferior como librería.

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8. De obra

Y con muchos cojines, ‘of course’. Son el aliado perfecto de la vida veraniega, ya que crean ambientes tranquilos con cierto aire ibicenco, como el que destila esta propuesta de Muy mucho. Además, son una buena opción tanto dentro como fuera de casa y suman asientos sin restar metros, ya que se adaptan al espacio y al rincón disponible, rentabilizando al máximo cada centímetro. Recuerda que es más confortable si lleva respaldo o va pegado a la pared.

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7. Con capacidad de almacenaje

Si quieres rentabilizar al máximo una estancia y necesitas sitio para guardar, los bancos tipo baúl, como este de Kenay Home, son la solución a tus problemas, ya que multiplican la capacidad de almacenaje sin restar metros. Son tu mejor aliado en el dormitorio principal para la ropa de cama o los cojines, en la habitación infantil para recoger los juguetes, en el recibidor para la bolsa de deporte, el balón o las raquetas y en la cocina para los pequeños electrodomésticos o los accesorios más voluminosos.

6. En el comedor

Aunque puede tener muchos usos, lo cierto es que su función principal es ofrecer más número de asientos sin abarrotar el comedor de sillas. Por eso, en esta estancia de la casa se siente realmente cómodo, al igual que le ocurre en el ‘office’. Además, aligera visualmente el espacio (no dudes en pegarlo a la pared) y se adapta al estilo decorativo fácilmente, como este con el asiento de cuero de Furniture Village, que es perfecto para un ambiente industrial o para dar un toque ‘vintage’ a tu comedor de siempre.

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5. En el baño

Es un mueble básico en esta estancia, ya que resulta práctico tanto para echarse la crema y vestirse, como para dejar la ropa que vas a ponerte, tener a mano la toalla, sentarte mientras los niños disfrutan de su baño o como simple objeto decorativo con plantas. Puedes elegir un modelo con balda inferior, muy práctica para los zapatos, o, como en esta propuesta de La Redoute Interieurs, completarlo con un colgador de pared.

4. En el recibidor

La entrada de la vivienda es otro de esos lugares estratégicos donde siempre agradecerás tener un banco donde descalzarte cómodamente y dejar los zapatos en la zona inferior, como en este ambiente de Borästapeter. Para que sea aún más práctico, no olvides colocar ciertos muebles 'de recibidor' como un perchero en la pared para colgar abrigos y chaquetas, una consola o balda para dejar las llaves, el móvil y el correo, y un cesto o caja para las mochilas y las cosas de las actividades extraescolares infantiles.

3. En el salón

Esta opción menos vista, es perfecta para crear una zona de estar en un salón de pocos metros, ya que sustituye al, casi siempre más voluminoso, sofá por un banco que multiplica el número de asientos. Para que funcione, como ocurre en esta propuesta de Maisons du Monde, debe estar pegado a la pared, para que esta ofrezca un respaldo en el que apoyarse y estar más cómoda. Complétalo con cojines y tendrás un espacio muy acogedor, en el que no echarás de menos al sofá.

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2. Bajo la ventana

Quizás es uno de esos rincones de la casa donde se siente más a gusto, ya que permite aprovechar un hueco muerto y crear un agradable rincón de lectura o relax, incluso en la cocina, dejando, al mismo tiempo, que entre la luz natural y que puedas disfrutar de las vistas. Lo ideal es que tenga el ancho de la ventana, para que encaje bien y no parezca un pegote, algo desangelado. Una buena idea si tiene respaldo es usarlo como cubrerradiador, de forma que quede oculto, pero deje que circule el calor. ¡Todo un acierto!