Cuando en decoración de interiores se habla de muebles y complementos atemporales, hacen referencia a básicos en decoración que encajan en cualquier estilo y soportan el paso del tiempo estoicamente. En lugar de envejecer, se revalorizan y siempre aportan valor al espacio. Esos muebles que no pasan de moda son los protagonistas de este artículo, con nombre y apellido.
La lámpara Cesta de Miguel Milá
Con nombre y apellido, como todas las piezas que vas a ver que están en este listado de muebles que no pasan de moda. Algunas tan claras como esta luminaria de diseño atemporal, otras sin diseñador o marca concreta pero sí con características precisas para que vayas a por ellas. La lámpara Cesta que decora este espacio de The Room Studio es un diseño de Miguel Milá, de 1962, comercializada por Santa & Cole y disponible en diferentes tiendas de decoración. Característica por su pantalla de cristal opal y estructura en madera con asa está disponible en varios acabados, dos tamaños (cesta y Cestita) y en versiones sin cable.
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Silla Wishbone, un icono del diseño escandinavo
Otro mueble que no pasa de moda y que usa en este comedor la interiorista Pia Capdevilla en negro, es la silla Wishbone. También se denomina silla CH24. Es una de las sillas más deseadas, junto a otros iconos. Su diseñador es Hans J. Wegner, que le dio vida por los años 50, convirtiéndola en la estrella de la marca Carl Hansen. Disponible en diferentes tonos de madera, se caracteriza por su respaldo curvo y el asiento de fibra natural trenzada. Encaja en comedores /tanto en mesas cuadradas como rectangulares o redondas), en zonas de estudio, en un rincón de tertulia, en el dormitorio…
Un sofá blanco
Aquí no tenemos un modelo concreto con nombre y apellido de diseñador o marca comercializadora, pero es en sí un mueble que nunca pasa de moda. Un sofá tapizado en color blanco, que puede adaptarse en diseño a cualquier tendencia decorativa, pero que siempre encajará y soportará el paso del tiempo por ese color blanco. Un básico en decoración. Para mantenerlo impoluto, lo mejor es escoger telas antimanchas y modelos desenfundables. Este de la imagen es de la firma Vipp.
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Un aparador años 70
Otra pieza que respira del encanto de lo antiguo y que es un mueble que no pasa de moda. Aparador aunque su uso sea como tal o como mueble principal en el salón o en una zona distribuidora. Se caracteriza por un diseño horizontal, con patas elevadas y en un tono de madera que generalmente tiende a nogal (ahora tan de moda).
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Una mesa de comedor redonda en madera
Al igual que la mesa Tulip es un icono del diseño y un mueble que no pasa de moda, una mesa de comedor redonda en madera es otra baza segura a la hora de decorar. Muchas personas son reacias a decorar con mesas circulares cuando en realidad se adaptan muy bien a los espacios, crean flujos agradables y favorecen la charla en la mesa al verse entre ellos todos los comensales. Las mesas redondas también son extensibles y su belleza en un diseño de madera nunca pasará de moda. Propuesta de la firma Vipp.
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El sofá Chester, diseño del estilo clásico inglés
Otro básico en decoración, atemporal y con mucha clase. El sofá conocido como Chester en realidad se llama Chesterfield. Se trata de un modelo con brazos y respaldo de la misma altura, abotonado -o capitoné- y tapizado en piel originariamente, aunque es posible tapizarlo con otros tejidos. Es un símbolo indiscutible del estilo clásico inglés desde el siglo XX. Este proyecto combina el sofá Chester con otros asientos de diseño variado. Es una propuesta del estudio Egue y Seta.
Cualquier silla Eames
También para completar el comedor, una zona de estudio, en el office, en el porche… La silla Eames Plastic Side Chair de Vitra está diseñada por Charles & Ray Eames en el año 1950. Se caracteriza por una carcasa de asiento de forma orgánica con una base de madera o metal de cuatro patas. Pueden incorporarse cojines en el asiento para hacerla más confortable, disponibles en una variedad de colores y tejidos.
Una consola de metal negro
Otro mueble que no pasa de moda es esta ligera y sencilla consola de metal en negro que encajará en un recibidor y pasillo pero también en un salón, dormitorio y zona de trabajo. Aquí hay variedad de modelos, pero su atemporalidad la da el material y diseño muy liviano, rectilíneo y de fondo reducido. La mayor practicidad se saca a las consolas que cuentan con balda intermedia. Propuesta de Alvhem en un salón.
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La silla "de café" o Thonet
Otro mueble que no pasa de moda es la silla inspirada en los diseños tradicionales de los cafés. Aquí, el diseño por excelencia es Thonet. La autenticidad de cada pieza Thonet queda certificada mediante una etiqueta timbrada con número de serie y que se incorpora a cada silla. Es una silla clásica que convive en armonía con muebles de líneas más actuales. Michael Thonet, padre de este mueble que no pasa de moda, perfeccionó en 1850 la técnica de curvado de la madera maciza. En este office, la interiorista Natalia Zubizarreta se inspira en ella para llevar junto a la mesa una silla de diseño similar.
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Un cabecero de capitoné
Otro mueble que no pasa de moda es este que nos lleva hasta el dormitorio: un cabecero de capitoné. La técnica se puede aplicar a cualquier diseño, como este maxi en horizontal de Garret Cord Werner Architects and Interior Designers. El capitoné hace referencia a la técnica de tapizado, que se caracteriza por un marcado sobre la tela en forma geométrica y asegurado con botones. Atemporal, encaja en cualquier estilo en función del diseño de la pieza y del tejido escogido para tapizarlo.