Cómo cultivar árboles en maceta para decorar tu terraza o, incluso, interiores soleados

¿Quién dijo que tener árboles es solo cosa de casas con jardín? Muchas especies pueden cultivarse en macetas y decorar la terraza o hasta el interior de la vivienda. Eso sí, se deben tomar ciertas precauciones como la elección de la especie adecuada, acertar con la maceta y realizar unas tareas de mantenimiento específicas. No te abrumes, te ofrecemos a continuación todas las claves para el éxito de tus plantaciones, será maravilloso disfrutar de la belleza y frondosidad de un árbol en maceta en tu terraza, balcón o un rincón del interior de tu casa.

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¿Qué árboles crecen mejor en una maceta?

Como comentábamos, no todas las especies son susceptibles de ser plantadas en un contenedor. Ya sea porque el árbol es vigoroso y de crecimiento rápido, por el desarrollo de sus raíces o por ciertas necesidades, existe alguno que no debe estar en maceta y debe ser plantado. Eso sí, no te vamos a engañar, nunca llegan a alcanzar el mismo tamaño en macetas que plantados directamente en la tierra.

Los árboles más adecuados, en este sentido son los que tienen un desarrollo contenido, tales como muchos frutales (limoneros, olivos, perales, naranjos, groselleros, árbol del membrillo…), magnolios, cipreses o arces japoneses, por poner solo unos ejemplos.

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Buscarán los rayos solares

Ten en cuenta que los árboles que se sienten bien en interior suelen requerir una exposición muy soleada. Respecto a los que se sitúan al aire libre, hay que tener en cuenta las necesidades de cada especie en particular. Un grosellero en verano se sentirá más a gusto en una situación de semisombra mientras que los cipreses y los olivos, por ejemplo, aman el pleno sol durante todo el año.

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Así debe ser el contenedor

A la hora de seleccionar la maceta, dependerá de la especie en concreto, aunque el tamaño siempre debe ser grande: para permitir proporcionar el máximo espacio a sus raíces, porque así recibirá suficiente tierra para alimentarlo y, además, porque es la mejor manera de proporcionar estabilidad al árbol.  

Para que la planta se desarrolle correctamente el recipiente deberá tener entre 60 y 80 centímetros de profundidad y entre los 40 y los 100 cm de ancho (dependerá de si el sistema radicular se desarrolla en profundidad, requiriendo más profundidad, o en superficie, que reclamarán sobre todo anchura). En interiores puedes optar por un decorativo cubremacetas si no te entusiasma la estética del tiesto.

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En maceta, ¡incluso en jardines!

Que tengas jardín no excluye el disponer algunos árboles en maceta, es muy habitual que adornen caminos y senderos o incluso crear composiciones de ellos en agrupaciones más cercanas que si se hallaran en tierra porque, además, insistimos, no alcanzan nunca el mismo tamaño. También pueden flanquear la entrada de la vivienda. Y la ventaja es que en el jardín no tendrás que preocuparte por el peso que adquieran árbol, maceta y sustrato.

No olvides un dato importante: en exterior debes seleccionar un material para la maceta que soporte las heladas.

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Ideas prácticas

Encuentra el lugar definitivo de la maceta antes de plantar el árbol porque, una vez llena con tierra y con el árbol plantado, el conjunto resultará muy pesado y será complicado de trasladar. De hecho, si vas a colocar el árbol en casa (en un espacio interior, la terraza o bien un patio o balcón), deberás tener en cuenta si la estructura de la vivienda es capaz de soportar ese peso. Obviamente, cuanto más grande es la maceta y más volumen de tierra contiene, también más pesará.

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Árboles con más sed

Por si no lo sabías, la tierra de una maceta se seca más rápidamente que la del jardín y, por lo tanto, la frecuencia de riego deberá ser mayor. Aunque no se puede generalizar porque cada árbol es un mundo, en verano deberás hacerlo 3 veces por semana y pasar a entre 1 y 2 veces de primavera a otoño, menos en invierno. ¿Crees que puedes olvidarte de sus necesidades hídricas? Entonces la solución perfecta consiste en instalar un sistema de riego automático.

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Sustrato y abono

Para procurar al árbol un sustrato bien drenado nunca está de más añadir perlitas que ayuden a una mejor evacuación del agua. Y abona durante su temporada de crecimiento, ya que las reservas de nutrientes en los árboles plantados en maceta son limitadas y así garantizarás que se mantenga sano y fuerte.

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Cómo cuidar a un árbol en maceta

Por regla general los árboles pequeños cultivados en maceta son lo suficientemente vigorosos como para prescindir de un tutor, así que no es habitual incorporar soportes que guíen su crecimiento. Eso sí, cuando son jóvenes conviene trasplantarlos en primavera para, así, renovar su tierra. Por otra parte, deberás podarlos para mantener el volumen de la copa a raya.

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