Lograr un espacio acústicamente limpio implica confort. Del que no se ve pero se siente. Y en decoración de interiores este aspecto es fundamental para que cualquier estancia sea confortable. No sentir eco o reverberación de los sonidos, ni ruidos molestos, ni una campana extractora ruidosa, ni los pasos de los vecinos o los coches de la calle… ¿Te apuntas a vivir en tu casa sin ruidos o con un nivel de decibelios óptimo? ¡Toma nota!
¿Cómo se pueden reducir los decibelios en una casa?
Vamos a desgranar esas acciones, gestos o claves que debes tener en casa para evitar ruidos y lograr un hogar acústicamente confortable, que nos hace sentir mejor. Algo que no se considera elemento puramente decorativo es la elección de un buen aislamiento de paredes. Lo ideal es que haya una capa de un material aislante entre tabiques, para que el aislamiento sea acústico y térmico en el frente de fachada y entre estancias o viviendas. Pero también otras formas de incorporar revestimientos decorativos en las paredes que ayuden a aislar. Ahora veremos esta parte.
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Buenas puertas y ventanas
Ventanas que también aíslen del ruido exterior para no escuchar nada de lo que pasa al otro lado fuera de la casa. Fundamental en viviendas con un entorno ruidoso. En el caso de las puertas, la de acceso también evita que se cuelen en el interior los ruidos del descansillo o portal del edificio. Y las puertas interiores no aíslan igual si son huecas que macizas. Y esto afecta al sonido que se percibe en una estancia. Es importante cuando hay familias de varios miembros que acostumbran a diferentes horarios y tareas en la misma casa.
Materiales en los que rebota el sonido: metal y cristal
Evitar muebles y superficies en metal o cristal es favorable para lograr un espacio acústicamente confortable. No quiere decir que no se puedan usar elemento, soluciones o piezas en estos acabados para decorar una casa, sino que en caso de haberlos será más importante aún compensar con otros -que absorben el sonido- porque el sonido rebota en esas superficies lisas de metal o cristal.
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La distribución adecuada
Este aspecto ayuda a crear un hogar acústicamente confortable. Por ejemplo, prestar atención a la organización de los espacios para que en un dormitorio no quede la cama pegada a la pared en la que se ubica el televisor del salón. Es más fácil evitar ruidos si se piensa en el uso de cada estancia y se distribuye de manera que se busque aislar las zonas de descanso. No colocar el salón en el que uno se relaja al final del día cerca de la cocina o de la puerta de entrada.
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Elementos decorativos con doble función
Estética y de amortiguación acústica. Aquí hay diferentes materiales que ayudan a crear un espacio acústicamente confortable y limpio porque absorbe ruidos. La madera tiene mucho peso en este sentido. Y cualquier revestimiento que no sea liso también hace que el sonido se comporte de forma diferente, no rebota sino que encuentra un punto de absorción. Así, los paneles alistonados son un buen recurso para decorar y lograr que la habitación se sienta más agradable. Una pared con molduras, por ejemplo, también deja de ser una superficie lisa.
Atención a los techos
Lo mismo que sucede con las paredes, es aplicable al techo. Este elemento también tiene su peso a la hora de lograr un espacio acústicamente confortable. Cualquier detalle que evita que sea liso juega a favor. Y, de igual manera, un techo alto y listo hace que el sonido tenga más espacio para moverse. Los ruidos se sienten diferentes porque el sonido se "pierde" a lo alto. Los techos bajos son más favorables. Esto se nota mucho cuando, por ejemplo, se quiere disfrutar de una buena acústica al escuchar música o ver una película como si estuvieras en una sala de cine en casa.
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Los tejidos absorben el ruido
Cortinas, alfombras, cojines… todos los elementos textiles ayudan a crear un espacio acústicamente confortable y compensar esas superficies lisas. Por eso una habitación puede gozar de un confort en sonido aunque las paredes no estén revestidas. Si tiene elementos decorativos y cuadros también se favorece la ausencia de frentes lisos. Y se puede compensar siempre con esos tejidos usados en distintos puntos.
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Las superficies curvas
Son también un aliado para reducir el sonido. En decoración es aplicable a paredes o paneles divisorios sinuosos y muebles de líneas curvas. Es otro detalle que ayuda a crear espacios acústicamente confortables y además la tendencia bold continúa muy presente en decoración.
Una mezcla de elementos
Así, al decorar una estancia, tener en cuanto todos estos factores suma a la hora de crear un espacio confortable. Porque no solo se nota en el sonido y en cómo se comporta en el espacio, sino que visualmente también enriquece. Por lo que es una mezcla de estos factores los que se pueden poner en práctica. En este salón abierto al comedor y a la cocina, propuesta de La Redoute Interieurs, confluyen la madera, las líneas curvas, las superficies lisas que se compensan con cortinas y alfombras, lámparas de techo grandes que reducen esa linealidad del techo (junto a las vigas divisorias)…
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