¿Por qué el aeonio puede convertirse en la ‘estrella’ decorativa de tu casa?

Las suculentas son de las familias de plantas más comunes en los hogares, por sus sencillos cuidados y atractiva apariencia. Los aeonios son precisamente crasas, formadas por unas 75 especies de plantas distintas originarias principalmente de las Islas Canarias, pero también de Madeira, Marruecos y África oriental. En exterior, con el tiempo se han ido naturalizando especialmente en zonas costeras del Mediterráneo. Y en interior son idóneas por todas las regiones siguiendo unas sencillas pautas.

Así se cultivan estas plantas de hojas gruesas dispuestas en roseta que conquista para decorar con plantas interiores y exteriores de la casa.

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¿Qué tienen en común los aeonios?

Algunas especies del género aeonio son el Aeonium arboreum, que forma un hermoso arbusto que puede alcanzar los 2 metros de altura; el Aeonium percarneum, uno de los bejeques más interesantes por sus grandes rosetas de hasta 30 cm de diámetro o el Aeonium canariense. Entre las características que comparten está que sus hojas son carnosas tienen forma de estrella. El color de dichas hojas no siempre es verde o totalmente verde, a veces las puntas son rojizas y, en ocasiones, casi la totalidad de ella presente un color berenjena e incluso negro (Aeonium arboreum 'Schwartzkopf’). A finales del invierno, además, les surgen inflorescencias por encima de las hojas.

Se pueden cultivar tanto en el jardín como en maceta y tienen una fantástica virtud, su resistencia. Se trata de plantas perennes longevas.

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¿Dónde cultivarlos en exteriores?

Son plantas ideales para los jardines costeros mediterráneos y de las Islas Canarias. Se utilizan como ejemplares individuales o en jardines de rocas y, por supuesto, si se prefiere, en macetas y jardineras.

La única condición es que los inviernos sean suaves pues los aeonios no toleran bien el frío. Respecto a la exposición solar, si los veranos son muy calurosos es mejor colocarlos a la sombra, pero en estíos suaves prosperan bien a pleno sol. Como curiosidad, ten en cuenta que el Aeonium arboreum 'Schwartzkopf' necesita exposición solar directa para mantenerse negro, en caso contrario sus hojas se tornarán verdes.

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También para interiores

Si resides en una región en la que es imposible cultivar aeonios fuera, o simplemente no cuentas con un jardín o terraza, ten en cuenta que pueden decorar los interiores del hogar, siempre que los sitúes en un rincón luminoso. Pues, aunque se trata de una planta poco exigente en cuanto a cuidados, sí es amante de los rayos solares.

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Tipo de sustrato

Si bien los aeonios son plantas que requieren muy pocas atenciones, si deberás cuidar que cuenten con la tierra adecuada, que se trata de un suelo bien drenado y arenoso. Utiliza un sustrato para cactáceas bastante rico.

Durante la temporada de crecimiento, es decir, desde primavera hasta finales del verano, si abonas con productos para suculentas contribuirás a su salud, aunque no es imprescindible.

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Cantidad de riegos

Las plantas suculentas acumulan agua, así que los riegos no deben ser muy frecuente ni especialmente abundantes. Si la plantas en el jardín, con regarla una vez por semana en verano será más que suficiente. Luego deberás espaciar el aporte de agua e incluso interrumpirlo completamente en invierno si se producen algunas lluvias.

En interior, procúrale un buen drenaje para que no se encharque y riega poco pero con regularidad, dejando que la tierra se seque entre riego y riego. De nuevo en los meses fríos las necesidades hídricas son tan bajas que hasta bastará con realizar un riego mensual.

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¡Sin poda!

¿En qué consiste su puesta a punto? Realmente, al inicio de la primavera tan solo deberás eliminar las rosetas que veas estropeadas. Si también detectas ramilletes de flores marchitas, quítalos para que el aeonio esté más fuerte y evitar que estas partes sean el vehículo para enfermedades parasitarias.

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Propagación del aeonio

La multiplicación del aeonio más sencilla es tomando esquejes de un tallo con roseta. Una vez cortado bastará plantarlo con arena con un poco de tierra para macetas y verás como se forman pronto raíces. Puedes emplear hormonas de enraizamiento si quieres, aunque no son vitales. Haz los esquejes en primavera, estación del año también perfecta para sembrar si quieres propagar el aeonio a partir de semillas o para trasplantar.

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Enfermedades

Como decíamos, los aeonios sufren por el exceso de riegos y, en esos casos se vuelven sensibles a los ataques de hongos. Por otra parte, el encharcamiento continuado del agua producirá la pudrición. Pero cuidado, que aunque se trata de suculentas, por lo general muy resistentes a la sequía, no hay que olvidarse por completo de ellas. ¿Cuándo reclaman que tienen necesidades hídricas? Si compruebas que las hojas de la roseta se cierran.

En ambientes demasiado secos los aeonios también pueden ser susceptible a sufrir una plaga de cochinillas, sobre todo algodonosas En tal caso, emplea un insecticida específico para combatirla eficazmente.

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