Con cada decisión de compra podemos hacer grandes cambios en materia medioambiental, en especial cuando se trata de piezas tan importantes y de tal envergadura como los muebles con los que decorar la casa. Pues bien, uno de los materiales que más se emplean para realizar muebles ecológicos es la madera. Ponemos el foco en ella, en que provenga de explotaciones controladas o, incluso, que reaproveche el material que iba a ser desechado dándole otra vida. Nos habla de todo ello Óscar Ortega, Quality Specialist en Hannun, una empresa española que diseña y fabrica muebles artesanales con maderas de origen sostenible, gran parte de ellas recicladas.
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Sellos forestales
Existen distintos sellos que se aplican para conocer el origen sostenible de la madera. Los más habituales son las certificaciones FSC (Forest Stewardship Council) y PEFC (Programme for the Endorsement of Forest Certification), que verifican la gestión sostenible de bosques en origen, evitando la explotación descontrolada de los mismos. Así, se garantiza que el bosque se conservará para futuras generaciones. En el caso de Hannun todas las maderas que emplean cuenta con ambos sellos forestales.
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Mucho más que el tronco
Las empresas buscan un aprovechamiento total de la madera que se tala. Un ejemplo es la propuesta de Banak Importa con la colección Nusa, realizada íntegramente con ramas. La mesita de noche y el cabecero forma parte de dicha serie en un dormitorio que destaca también la original iluminación que flanquea la cama, a base de flexos.
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Maderas de aquí
Óscar aconseja acerca de las variedades de madera con las que fabricar muebles en el sur de Europa y considera que lo interesante es poder trabajar con maderas autóctonas como las pináceas, que incluyen el pino y el abeto, ya que son las más abundantes al ser plantas coníferas y tienen un crecimiento rápido. Y, señala también, “sin embargo, dependiendo del producto y de las prestaciones de la madera, hay otras variedades con las que se puede trabajar como el nogal, el castaño, el olivo y el roble”.
En la propuesta vemos el aparador Jávea, de Naan Furniture, realizado en madera de pino macizo sin tratar y con frente en celosía, de estética muy mediterránea.
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¿Qué es la madera recuperada?
La madera recuperada puede obtenerse de dos maneras, como relata el experto de Hannun:
1. Madera que ya ha sido usada
Por regla general, da una segunda oportunidad a piezas de madera que ya han tenido un uso y que, al finalizar su vida útil, se desecharían. La finalidad de usar madera recuperada es, por tanto, hacer entrar de nuevo en el ciclo de vida a estos productos, minimizando de forma implícita el proceso de explotación de bosques que supone obtener madera nueva.
2. Que provenga de la merma de aserraderos
Esta madera es triturada para obtener productos derivados que implican procesos más elaborados. Esta merma también se considera madera recuperada, ya que se aprovecha para crear muebles nuevos.
En la cocina de la imagen (el modelo Kungsbacka, de Ikea), se emplean serrín y otros desechos de la madera en los tableros de este producto. De este modo no solo se utiliza el tronco, sino todas las partes del árbol, aprovechando mejor los recursos.
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Procedencia de la madera reciclada
Óscar cuenta que la madera proviene mayoritariamente de estructuras de embalaje y cajas de transporte de mercancías que habitualmente se destruyen. Asimismo, hay madera que proviene de estructuras de antiguos graneros, andamios de construcción o traviesas de tren obsoletas, por ejemplo.
La ventaja de emplear madera es que, al fin de vida del mueble, este podrá reciclarse.
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Obtener madera reciclada
A diferencia de lo que se suele sobreentender, se trata de una madera que implica un trabajo más complejo que la madera nueva antes de emplearla para la fabricación de muebles. Óscar detalla el proceso: “primero se clasifica por tamaños, ya que suelen ser muy irregulares. Seguidamente, se procesan los posibles restos de herrajes como clavos u otros elementos de estas piezas y se deja la madera lista para trabajar”.
En la imagen de dormitorio, la cómoda es el modelo Ninao, de Muebles LUFE.
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Acabados también naturales
Hay fabricantes que dejan la madera sin tratar. En el caso de que se le dé algún acabado, los biointerioristas lamentan que no haya obligación de explicar si se tratan de aceites u otros acabados naturales que dejen el poro abierto, lo que resulta una información de gran valor para los clientes, pues les ayudaría a poder tomar decisiones adecuadas a sus necesidades. “No obstante, la creciente demanda de productos más ecológicos ha contribuido a que los fabricantes desarrollen sus gamas ECO, por lo que la oferta se ha incrementado considerablemente en cuanto a productos para la madera con base al agua y bajas emisiones de compuestos orgánicos volátiles (COV)”, afirma el Quality Specialist de Hannun.
Esta consola de aires étnicos presenta la madera envejecida, se trata del modelo Bepea de la firma Vical.
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