Con este nombre tan evocador se designa una de las plantas arbustivas con flor más bellas que puedes plantar en tu jardín. Y para que esté en plena forma, nada como conocer los cuidados que has de procurarle y llevarlos a la práctica. Descubre cómo cultivar el árbol de Júpiter y crecerá precioso y muy sano.
Belleza inusitada
El árbol de Júpiter (Lagerstroemia indica) es una planta especial. Originaria de China y Japón, posee un gran valor ornamental debido a la belleza de sus flores y de sus ramas, incluso siendo una planta de hoja caduca. De hecho, cuando pierde las hojas, su tronco continúa manteniendo la magia que le caracteriza. En invierno te parecerá un árbol bonito, pero en verano te cautivará sin remedio.
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Una floración muy especial
Hace gala de un crecimiento lento, aunque con el tiempo este arbusto tan especial puede llegar a medir entre 3 y 8 metros del altura. Al llegar el verano, y hasta bien entrado el otoño, el árbol de Júpiter florece de forma espectacular, con flores de tamaño medio, muy abundantes, de distintos colores: fucsia, blanco, rosa o morado. Se convierte en todo un espectáculo en tu jardín.
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Resistente y fácil de cuidar
Una de las características que definen al árbol de Júpiter es que es una planta rústica, capaz de soportar condiciones adversas, especialmente el frío y el calor.
Por otro lado, y aunque el árbol de Júpiter sea un arbusto fuerte y resistente, necesita determinados cuidados para crecer de forma correcta. Descubre cómo debes tratarle en cuanto al riego, al abono, etc.
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Luz y temperatura
Lo primero que debes hacer a la hora de cultivar el árbol de Júpiter es buscarle un buen emplazamiento en tu jardín, tanto si lo vas a plantar en el propio terreno como si lo quieres cultivar en maceta. Debe estar en un rincón luminoso, en el que pueda disfrutar de 8 horas de sol al día como mínimo. Esto es muy importante si quieres que su floración se desarrolle en todo su esplendor.
Sin embargo, si vives en una zona muy cálida, le vendrá bien una ubicación en semisombra, con algo de luz. Si lo plantas en un rincón oscuro no tendrá flores al llegar el verano.
En caso de que el clima sea muy frío durante el invierno, lo mejor es plantarlo junto a un muro que lo pueda proteger. En cualquier caso, el árbol de Júpiter es capaz de aguantar heladas suaves.
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El mejor sustrato
Uno de los cuidados que debes procurarle al árbol de Júpiter es elegir correctamente el sustrato en el que vas a plantarlo. A esta planta le va de maravilla un sustrato ligeramente ácido, que le ayudará a florecer más y mejor. Por otro lado, es muy importante que el terreno tenga un buen drenaje para evitar encharcamientos.
El árbol de Júpiter puede ser cultivado en maceta: no crecerá tanto, pero se convertirá en un pequeño y atractivo arbolito perfecto para decorar tu jardín. Si lo plantas en maceta también conviene utilizar un sustrato ácido.
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Un riego regular y abundante
Para que el árbol de Júpiter crezca feliz necesitará que lo riegues de forma regular, entre tres y cuatro veces a la semana en verano, especialmente durante los primeros años, hasta que la planta crezca. Además, el riego ha de ser abundante para que las raíces reciban suficiente agua.
Durante el invierno bastará con un riego semanal. Una vez que la planta sea adulta, será capaz de resistir la sequía, siempre que esta sea moderada.
Un consejo: riega tu árbol de Júpiter con agua blanda. No le gusta el agua dura con mucha cal.
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¿Es conveniente abonar el árbol de Júpiter?
Si quieres que tu arbusto crezca sano y lleno de energía es importante que le aportes fertilizante específico para plantas ácidas, desde inicios de la primavera hasta el final del verano. Sigue las recomendaciones del fabricante en lo que a la dosis se refiere, así como en cuanto a la frecuencia de los aportes de abono. De esta manera lograrás evitar la clorosis hídrica y otras enfermedades que pueden afectar a tu árbol de Júpiter.
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La poda, un cuidado recomendable
Aunque no es imprescindible podar tu árbol de Júpiter, sí es conveniente hacerlo de vez en cuando por varios motivos.
- Cuando la planta es joven es conveniente hacer una poda de formación que elimine las ramas inferiores y lograr así una copa compacta y redondeada.
- Por otro lado, es adecuado podar tu árbol de Júpiter a finales del invierno para eliminar las ramas más viejas.
- Además, también puedes quitar las flores muertas cuando el otoño toque a su fin y termine la floración.
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Plagas y enfermedades
El árbol de Júpiter no tolera bien el exceso de humedad. De hecho, cuando se produce se corre el riesgo de que aparezcan hongos, especialmente el oídio. Es muy probable que tu planta sufra este hongo si el terreno suele estar muy húmedo y mal drenado. Para combatirlo, aplica un fungicida adecuado.
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