Todo al gris
La vajilla Lave de Villeroy & Boch dará a mesa de Navidad un toque nórdico, tan sencillo como ‘chic’. De color gris y fabricada en barro, el filo de cada pieza al natural encaja tanto en celebraciones formales como en comidas familiares. Además, es apta para el lavavajillas, lo que facilita el recoger si sois muchos. ¿La cubertería? Mejor plateada y poco recargada.
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Con motivos azules
En esta mesa diseñada por Pia Capdevila, el azul sustituye al rojo como color principal, usándose tanto en la vajilla y la cristalería de AH Rental como en la mantelería de Gastón y Daniela, las hortensias azules de Bossvi (todo un acierto) o las bolas de Navidad de Käthe Wohlfahrt. A su lado, el dorado del resto de accesorios ‘neutraliza’ el aire campestre del estilo provenzal de la vajilla, logrando un ambiente elegantemente barroco, en el que las lámparas de suspensión potencian aún más el efecto.
Blanca y roja
Como manda la tradición. Si asocias el rojo con la decoración de esta época y quieres que tu mesa también se contagie de ese espíritu, esta vajilla de Very, informal, pero 100% navideña, es tu mejor opción, especialmente en celebraciones en familia, donde hay niños pequeños. Para que el conjunto funcione, no dudes en usar esta tonalidad para todos los complementos, desde el mantel hasta las bolas del árbol y los arreglos florales, solo o combinado con blanco o verde.
Con lunares
Si quieres una vajilla para siempre y que no pase de moda, las blancas son tu mejor opción. Se integran en cualquier estilo, permiten crear una mesa tanto para grandes ocasiones como para desayunos y son fáciles de combinar. Con sus lunares dorados, los platos Kubler de La Redoute Interieurs son una muestra de su versatilidad. Apta para el lavavajillas, brillará más o menos según la decoración que la acompañe en cada momento. Con cubertería dorada, a juego con su estampado, es perfecta para un ‘look’ navideño.
Durante las fiestas, la mesa adquiere un gran protagonismo y la vajilla es la estrella indiscutible de la decoración navideña. Si quieres ir sobre seguro nada mejor que invertir en un modelo clásico que no pase de moda, con o sin motivos navideños, mientras que si quieres sorprender a tus invitados, elige uno en tonos intensos o con un estampado original. La oferta es variada y se adapta al presupuesto, el estilo que buscas este año (nórdico, ‘chic’, sofisticado, natural…) y, por supuesto, el mantel. Eso sí, ten en cuenta que la situación actual ha relajado la ‘deco' navideña, reduciendo el exceso y el ‘brilli brilli’ a favor de lo natural. Estas son nuestras propuestas para que tu mesa tenga luz propia estos días.
Espíritu natural
La tendencia de decoración natural encuentra un hueco en la mesa navideña, con manteles en lino o algodón, como este de Mango Casa con copos de nieve, y una vajilla sencilla, en colores claros o tierra, fabricada a mano en muchas ocasiones y de aspecto imperfecto. ¿El broche perfecto? Un centro verde con aspecto rústico y unos candelabros de latón envejecido.
De flores
Porque las flores no son territorio exclusivo de la primavera y el buen tiempo. La vajilla Fleurs Sauvages de Rosenthal es todo un ‘must’ de la firma. Su diseño se basa en las sensaciones de las flores, el zumbido de los insectos, las hojas delicadas y la hierba fresca para dar la impresión general de un paseo en un paraíso de verano, independientemente de la época del año en la que estemos. Por cierto, que no te confunda su aspecto delicado, ya que es apta para lavavajillas y se puede meter en el microondas.
Con motivos navideños
Si quieres que el espíritu navideño se apropie de la mesa estas fiestas y lo tuyo son unas Navidades tradicionales con un gran árbol y adornos rojos, verdes y dorados, esta propuesta de Sol&Luna es tu mejor opción. Una vajilla blanca (otro clásico) con renos rojos en el centro y bajoplato del mismo color. Un ‘look’ ideal tanto para una mesa familiar como para una celebración con amigos, donde el jersey de Colin Firth en ‘Bridget Jones’ sirve de inspiración.
En color oro
Si hay un color que brille con fuerza durante las celebraciones navideñas, ese es, sin duda, el oro. Elegante, festivo y lleno de ‘glamour’ no hay mesa que se resista a su poder, incluso cuando no quieres un 'look' barroco y exagerado. Esta vajilla de Klimer muestra una versión menos ‘glam’ y más auténtica, muy en la línea de la decoración actual. Nos encanta su aspecto envejecido.
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Aire inglés
La vajilla Loza Floral de Zara Home posee un encantador aire inglés que hará que tu mesa navideña se traslade al campo, aunque estés en plena ciudad. Blanca y con motivos florales azules, posee delicadeza y belleza, pero es apta para el lavavajillas y el microondas. Para completar el conjunto, puedes introducir una cubertería rústica con el mango de madera, por ejemplo, o apostar por cubiertos dorados y resaltar su elegancia natural.
De formas orgánicas
La vajilla Tramuntana de Neto Cerámicas es una buena opción para una mesa de Navidad familiar, ya que huye de lo excesivamente llamativo y apuesta por líneas orgánicas, la geometría en detalles y formas y un color entre gris y marrón que evoca las rocas de la sierra mallorquina. Apta para microondas y lavavajillas, es importante que las piezas no choquen entre sí y que se enfríen antes de sacarlas del lavaplatos. A la hora de guardarla, es conveniente poner un papel entre ellas.
En verde y granate
Esta mesa de Navidad montada para la ocasión por Maisons du Monde destila cierto aire barroco gracias a sus candelabros y cubiertos dorados, sus adornos y sus colores intensos que reinterpretan en platos y fuentes el clásico dúo verde y rojo. La vajilla Bérenice en verde y berenjena y la Lince, con un plato justo en el centro de la composición encajan bien en este ambiente sofistcado. Eso sí, en esta ocasión el ‘glamour’ tiene un precio y no son aptas ni para el lavavajillas ni para el microondas. El resultado lo merece.
‘Black & white’
Esta vajilla de Rosenthal en blanco y negro resulta tan impactante como sofisticada. Moderna y llena de estilo, puedes acompañarla de una cubertería también negra, o dorada si prefieres un toque de ‘glamour’. Apta para lavavajillas y microondas, para evitar caer en cierto aire gótico, llena la mesa de pinceladas en otro color y un centro de flores muy original, aunque poco exuberante.