Cómo limpiar pequeños electrodomésticos y mantenerlos siempre perfectos

La cafetera, la plancha, la batidora, la sandwichera, la freidora, etc. Todos estos pequeños electrodomésticos se han convertido en piezas esenciales para nosotros porque nos facilitan la vida y nos la hacen mucho más cómoda. Mantenerlos limpios y en buen estado es cuestión de dedicarles un rato cuando lo necesitan. Así debes cuidar cada uno para que funcionen perfectamente y te duren mucho tiempo.

Una tarea de todos los días

Ya sabemos que el éxito en las tareas domésticas es una cuestión cotidiana y que, además de limpiar la casa hay que procurar ensuciarla lo menos posible. Sin embargo, la cosa se complica cuando se trata de objetos de uso intensivo y diario, que terminan por mancharse (y mucho) sin remedio.

En estos casos es cuando más se necesita poner en marcha la estrategia del repaso diario. Si procuras limpiar cada día los aparatos que usas, desde la cafetera a la batidora, evitarás que la suciedad se acumule y te costará menos esfuerzo mantenerlos siempre limpios.

Si los grandes electrodomésticos (como la lavadora o el lavavajillas) han de limpiarse al menos una vez al mes, los pequeños aparatos no van a ser menos. Repásalos con frecuencia y límpialos a fondo cuando lo necesiten.

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Tostadas a punto cada mañana

La tostadora es uno de los electrodomésticos que se usa a diario, al menos si eres fan de las tostadas de pan reciente para el desayuno. Sin embargo, es un aparato que acumula bastante suciedad con el tiempo. Necesita una limpieza frecuente más allá de vaciar la bandeja recogemigas que suelen incluir la mayoría de las tostadoras.

- Cuando termines de desayunar, desenchufa el aparato y saca la bandeja que recoge las migas y los restos de pan. Después dale la vuelta y sacúdelo ligeramente para que caigan los restos de pan que hayan podido quedar en el interior. Si no lo haces pueden quemarse y producir un olor desagradable.

- Limpia el exterior con una bayeta mojada (y escurrida) en una solución de agua jabonosa. Seca después con un paño limpio y seco.

- Una vez al mes repasa el interior con un cepillo pequeño sin mojarlo con agua (te servirá un cepillo de dientes viejo).

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Limpia la sandwichera con delicadeza

Debes tener cuidado de no arañar la sandwichera al limpiarla. Las placas interiores están recubiertas por una capa antiadherente que evita que los sándwiches se peguen. Si la frotas con un estropajo agresivo o con un objeto punzante se estropeará.

- Desenchufa el aparato y utiliza una espátula de madera para retirar los restos de alimentos que hayan quedado pegados. Pasa un papel de cocina para eliminar restos de grasa.

- Repasa con una esponja mojada y escurrida en agua y jabón.

- Aclara con un paño húmedo y seca después antes de guardarla hasta el próximo sándwich caliente.

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Mantener la cafetera lista

Si lo primero que haces cada mañana para ponerte en marcha es tomar un café caliente, entonces necesitarás que la cafetera esté siempre limpia y preparada para entrar en acción.

Además, hay que tener en cuenta que es un electrodoméstico que se ensucia bastante debido a los restos del café.

También hay que tener en cuenta que el agua acumulada en el depósito puede provocar la aparición de moho y otros patógenos.

Por otro lado, los minerales del agua, concretamente la cal, pueden dañar los conductos de la cafetera, por lo que hay que eliminarlos con cierta frecuencia.

- Para limpiarla a diario retira los posos del café o las cápsulas usadas. Elimina las manchas del exterior y vacía el depósito del agua y sécalo.

- Una vez al mes debes descalcificar la cafetera. Para ello compra un producto específico para poner en el depósito junto con agua. Puede ser en formato líquido, polvo o pastillas. Sigue las instrucciones del fabricante y pon la cafetera sin café para eliminar la cal. Después tendrás que volver a ponerla con agua limpia.

- Otra forma de descalcificar la cafetera es emplear una mezcla de agua y vinagre a partes iguales, repitiendo el ciclo una segunda vez y una tercera solo con agua.

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La ropa, siempre impecable

Si te gusta que la ropa de casa y la de toda la familia esté siempre perfecta, necesitas que tu plancha se mantenga en buen estado de funcionamiento y de limpieza. Con el tiempo los restos de suciedad de la suela de la plancha se queman y quedan incrustados en ella.

La situación empeora si utilizas apresto o almidón en lugar de agua solamente, ya que en estos casos la plancha se mancha más. Por eso es importante dedicar unos minutos a limpiar la plancha en cuanto veas que se ha ensuciado. De esta forma los restos quemados no se acumulan y la solución es más fácil y rápida.

Para limpiar la suela de la plancha existen productos comerciales específicos, pero si prefieres una solución casera puedes utilizar bicarbonato de sodio. Este gran limpiador que tantas aplicaciones tiene en casa también te ayuda a dejar tu plancha limpia y sin restos.

Prepara una mezcla con dos cucharadas soperas de bicarbonato y una de agua y extiéndela por la suela de la plancha. Deja actuar 15 minutos y después retira la pasta con un papel de cocina.

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Cómo eliminar la cal que afecta a tu plancha

Para evitar que la cal del agua estropee la plancha conviene que repitas de vez en cuando este proceso, especialmente si vives en una zona de agua muy dura, con alto contenido en cal. Mezcla una parte de vinagre con tres partes de agua y llena el depósito de la plancha a la mitad.

Conecta la plancha y programa una temperatura alta en función vapor. Plancha sobre un trapo viejo activando la salida del vapor. Después repite solo con agua.

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El mantenimiento de la batidora

Mantener limpia la batidora parece fácil, pero en ocasiones es bastante latoso retirar toda la suciedad y los restos de alimentos de las cuchillas. Hoy te damos algunos trucos para facilitar esta tarea de limpieza, ya se trate de una batidora de mano o de vaso.

Lo primero que debes hacer es, por supuesto, desenchufar tu batidora de mano y desmontarla. Ya sabes que el cuerpo de la batidora no se debe mojar, por lo que debes limpiarlo con un paño húmedo. Para limpiar las cuchillas puedes usar una esponja y jabón, y después aclarar debajo del grifo.

Pero, ¿qué ocurre cuando los restos de alimentos están muy pegados y no hay manera de eliminarlos? En ese caso pon en el vaso de batir un poco de agua con jabón lavavajillas. Enchufa la batidora e introdúcela en el vaso, batiendo con la velocidad turbo. En unos instantes las cuchillas estarán limpias. Solo tendrás que aclararlas y dejar que se sequen. Puedes usar el mismo truco para limpiar las cuchillas de la batidora de vaso. Más fácil, imposible.

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Claves para limpiar el robot de cocina

Contar con uno de estos aparatos es una gran ayuda a la hora de preparar el menú diario. Sin embargo, hasta que no inventen robots que se preocupen de limpiarse solos, serás tú quien tenga que ocuparse de esta tarea que, en realidad, es sencilla.

La parte exterior del aparato, que se suele ensuciar bastante, queda perfecta si la frotas con una bayeta mojada en agua jabonosa bien escurrida. Para limpiar las cuchillas y el vaso, muchos robots de cocina incorporan una función de autolimpieza. Si las cuchillas necesitan una atención más exhaustiva puedes usar un cepillo pequeño, de los de tipo escobilla, que te ayudará a retirar los restos de comida y dejar impolutas las juntas entre las gomas.

El vaso se friega sin problema con agua y jabón, incluso con un estropajo de aluminio, o se puede meter en el lavavajillas.

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Freidora sin rastro de grasa

¿Tu freidora necesita una limpieza en profundidad? Comienza por desenchufarla y dejar que se enfríe antes de empezar la tarea. Después vacíala de aceite y recíclalo de forma adecuada. La canastilla queda perfecta si la metes en el lavavajillas.

El siguiente paso es poner agua con un vaso de vinagre en la freidora hasta el nivel máximo. Enciende el aparato y deja que hierva unos 10 minutos. Después retira el agua, friega el interior con agua y jabón y aclara.

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