Depende del espacio que tengas en tus armarios, de si eres un enamorado de la ropa de verano, incluso de donde vivas, pero una vez adentrado el otoño llegó de nuevo el momento de hacer el cambio de ropa en el armario.
Esta rutina que nos impone el clima en España tiene su parte positiva: es la oportunidad que tenemos para empezar de nuevo cada temporada. ¿Cuáles son para mí los puntos más importantes para un buen cambio de armario?
Limpieza
No podemos hacer un cambio de armario superficial o al menos uno al año hay que hacerlo en profundidad. Saca toda la ropa y, una vez has sembrado el caos a tu alrededor, limpia todo el armario, cajones, baldas y puertas. Si el interior es de madera aprovecha para aplicar un reparador o, si es de pintura, planifica pintarlo alguna vez.
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Descarta
Antes de sacar la ropa de la nueva temporada, clasifica la que sale y revisa cada una de las prendas. Aparta las que están sucias, las que haya que llevar a coser, desecha las que no se pueden usar para reciclaje o trapos sucios y haz un último montón con aquella que ya no vas a usar más para darle una segunda oportunidad en casa de familiares, amigos o en alguna asociación benéfica.
Soportes para guardar la ropa de fuera de temporada
Antes de empezar, mide tus espacios y busca unas cajas que puedan encajar bien en ese espacio para sacarle el máximo provecho, siempre es mejor que sean de materiales un poco flexibles porque se amoldarán mejor en maleteros y canapés; deja las cajas rígidas para el trastero.
Clasifica la ropa que tienes que aguardar, dedica cada caja a una categoría o dos y etiquétala, así si tienes que buscar una prenda fuera de temporada te será fácil encontrarla.
Redistribuye el armario
Una vez tienes la ropa guardada y el armario limpio es hora de mirar al armario como si nunca hubiese tenido nuestra ropa y pensar cuál será la mejor estructura para esta temporada.
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Algunos consejos:
- Los jerséis gordos siempre mejor en baldas
- Los jerséis finos en escalera para que se arruguen menos y se vean
- Los pantalones de vestir mejor colgados con pinzas
- Las prendas que utilizamos solo una época de la temporada, como bufandas y gorros, los podemos poner en una cesta aparte.
Iguala perchas
Si tienes problema de espacio, recuerda que un cambio de perchas puede ahorrar mucho espacio. Si usas perchas finas para las camisas y prendas poco gruesas el espacio se duplica; por otro lado, deja las perchas de madera para abrigos, trajes y prendas pesadas.
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En cualquier caso, iguala las perchas, aunque sea por categorías de prendas y utiliza una pecha para cada prenda. Además de verlo todo ¡tu armario quedará mucho más bonito!
Optimiza los cajones
No pierdas interés en el proceso cuando llegue la parte de los cajones, si los estructuras bien desde el principio solo te quedará mantenerlo, para esto utiliza soportes que te ayuden a clasificar la ropa interior y los calcetines.
La ropa de deporte, que son prendas que no se arrugan y se resbalan, lo ideal es doblarlas en vertical, ¡dedica una fila para cada tipo de prenda y las verás todas siempre!
Bolsos y accesorios
¡Y, por último, llega el turno de bolsos y zapatos, son dos categorías que sé que os vuelven locas! Ya queda poco espacio en el armario para ellos, se acumulan igual que la ropa y se descartan más difícilmente, así que dedícales un buen rato, sé sincera contigo misma, y descarta aquellos que, aunque sean buenos y los usaste mucho, ya hace dos temporadas que no has vuelto sacar.
Los zapatos, si no los tenemos en cajas especiales para ellos, lo ideal es un espacio separado y todos a la vista, a mí me gustan en baldas.
-Zapateros muy decorativos para tener tu calzado en orden
Utiliza cestas para guardar carteritas y bolsos pequeños en vertical, deja los dos bolsos que más usas a mano y el resto sitúalos en los espacios altos a la vista para que sepas dónde están cuando los quieras usar.