La vie en rose puede ser un canto perfecto para la decoración de interiores. Sí, el rosa es tendencia este año para cualquier casa. Y se puede aplicar de muchas maneras diferentes, todo depende del efecto deseado. La variedad de tonalidades y matices que aporta cada rosa hará que el resultado sea más suave y delicado, femenino, luminoso, vibrante… ¡Hay muchas opciones! Queremos que las visualices para que no descartes este color y decores con él según el estilo decorativo que quieras lograr. Sabrás cómo combinarlo con otro colores.
La pintura, una forma inteligente de jugar con el color rosa
Una pared, una franja u otra figura geométrica, un zócalo o molduras y cuarterones. No todas las paredes de un espacio han de estar pintadas en rosa. Destaca una zona o rincón y llevarás este color de tendencia sin saturar. Además, este salón -propuesta de Bruguer, como la zona de estudio que abre el artículo con un efecto mucho más llamativo por la tonalidad de rosa escogida- es un ejemplo de cómo el rosa no tiene que ser pastel o chicle necesariamente. En las tonalidades medias, más apagadas es un color elegante que tiene matices relajantes. Combina muy bien con azules profundos, que crean contraste. Lo mismo con verdes. Estos tonos equilibran y restan feminidad.
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Crudos y rosa suave (pastel)
Esta combinación de colores es de las más femeninas y dulces. Aquí decorar con rosa sí nos traslada a lo que el color provoca inicialmente en nuestras cabezas. En decoración, esta mezcla es extra chic. Entre los tonos naturales, los blancos más blancos o crudos. El efecto lujoso y sofisticado aumenta con telas como seda o terciopelo y lana rizada en invierno, que también es tendencia. Añade complementos y detalles en cristal transparente y latón. Todo lo que aparece en este ambiente es de Westwing.
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Rosa en pequeñas dosis
No renuncias a la tendencia de decorar con color rosa. Es un tono que aporta luminosidad y contraste cuando predominan colores más intensos. El gris es perfecto como pareja cromática con el rosa. Y puedes incorporar este último tono en textiles como los cojines, un puf o una butaca. Son notas que aportan mucho aunque no la sensación sea que no predomine el rosa. De esta manera no sentirás que toda la decoración gira en torno a él a pesar de estar muy presente.
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Para un dormitorio contemporáneo
Con un halo de delicadeza. El rosa también es moderno. Así es este ambiente decorado por Westwing. La ropa de cama en rosa medio con detalles en rosa maquillaje anima un conjunto de básicos con estructura de cama tapizada en gris y muebles en negro. El efecto es actual y contemporáneo pero no resulta frío gracias al rosa. No tengas miedo en combinar diferentes tonalidades e intensidades de rosa en los cojines, incluso con notas en negro (sin abusar de estas).
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Perfecto en habitaciones infantiles y juveniles
Aquí puedes decorar con rosa en ropa de cama y paredes. Incluso escoger un rosa que evolucione bien en el tiempo para algún mueble o accesorios. De esta manera, seguirá siendo un rosa bonito que combine con otros colores cuando crezca su "propietario". Con blanco y madera natural obtendrás un resultado seguro. Con tonos grises actualizas y es perfecto para la adolescencia. Puedes mezclar rosa con amarillo mostaza y verde oliva en un punto más fresco y orinal. La variedad salmón también funciona muy bien.
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Rosa y 'greige', 100% tendencia decorativa
Una pareja que no podía faltar a la hora de saber cómo combinar el rosa esta temporada es la que forma con el greige, ese tono entre gris y beis, muy taupe. Un color neutros elegante aunque con presencia. Original y personal es el greige intenso con el rosa pastel, como ves aquí. Al contrario, greige suave y rosa intenso darás más protagonismo a este último color. Escoge versiones que tiendan a coral, berenjena o vino, sin perder el matiz rosa y lograrás calidez, elegancia y dinamismo.
Una pared de acento
Juega con esta idea y concepto (pared de acento) en cualquier estancia de la casa. Este rincón decorado por La Redoute Interieurs refleja bien la personalidad y fuerza que puede lograr una pared en rosa en una tonalidad intensa. Lógralo con pintura mate o con un papel pintado que incorpore este color. Es elegante y más tradicional, aunque encajará con muebles de líneas vintage, nórdicas y contemporáneas. Con maderas oscuras el efecto es sofisticado.
Claro y oscuro en un frente de armarios
Llevar el rosa a los muebles siempre da respeto. Porque marca mucho. Por eso mismo momento resulta muy original y personaliza el espacio. Fíjate en esta composición de frente de almacenaje que combina un acabado oscuro -puede ser marrón chocolate o gris pizarra- con rosa maquillaje intenso. Esta mezcla no falla y el rosa aligera el peso del color oscuro.
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En cocinas
De igual manera que veíamos con el ejemplo anterior en el frente de armarios, los muebles de cocina también pueden ser en color rosa, a pesar de su atrevimiento. Combinados con otras tonalidades de madera tendrás un espacio único. Menos arriesgado es jugar con los revestimientos en rosa, por ejemplo, para crear una franja en este color en la zona del salpicadero, como propone la interiorista Nora Zubia de Slow and Chic, en esta cocina con muebles en blanco y encimera acabada en madera natural. En el suelo, el hidráulico enlaza con algún detalle en rosa.
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También en el cuarto de baño
Y de la misma manera, lleva el rosa al baño a través de los revestimientos. Azulejos que combinan bien con el blanco y con el negro. Los detalles en latón aquí también añaden sofisticación y en acabado cromo resultará un espacio actual. El estudio PKB Arquitetura ha escogido rosa, blanco y gris para dar vida a este baño. Los acabados en mate y la textura de la piedra aportan matices interesantes y equilibran todos los materiales.
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