Los jardines requieren de un tiempo para que estén establecidos y luzcan con todo su esplendor. ¿Tienes dudas acerca de la mejor época de plantación? ¿Quieres saber si puedes acelerar los procesos para tener un jardín esplendoroso antes? La paciencia, en materia de paisajismo, es vital. No te lo decimos nosotros sino dos profesionales que se enfrentan día a día con diseños de exteriores: Jordi Sánchez San Miguel, director creativo de la empresa de paisajismo Simbiosi Estudi y Fernando Alonso, responsable de construcción y paisajismo en Ábaton.
En la imagen vemos un proyecto de paisajismo de Ábaton en tres fases diferentes: la plantación se realizó en marzo, en medio vemos el aspecto del mismo tramo en abril y, finalmente, dos años después.
Leer más: 10 razones por las que necesitas un paisajista para diseñar tu terraza o jardín
Para ti que te gusta
Lee 8 contenidos al mes solo con registrarte
Navega de forma ilimitada con nuestra oferta
1 año por 49€ 9,80€
Este contenido es solo para suscriptores.
CelebramosSuscríbete 1 año por 49€ 9,80€
Este contenido es solo para suscriptores.
CelebramosSuscríbete 1 año por 49€ 9,80€
TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
¿Qué época es la mejor para plantar las especies?
Como no solo es importante que la plantación sea un éxito, sino que luego la especie pueda crecer y prosperar, existe una época ideal para hacerla. Jordi afirma que “preferimos realizar la plantación en otoño, dando tiempo a nuestra selección botánica a establecerse, desarrollando el sistema radicular y adaptándose a las nuevas condiciones de cultivo. Estos primeros meses después de la plantación serán de suma importancia para afrontar el primer verano con garantías”.
Y Fernando añade que “si el cliente tiene prisa en verlo bonito, lo mejor es plantar en marzo o principios de abril porque en ese mismo verano (junio-julio) habrá especies que florecerán con fuerza. Si no hay esa urgencia, a mí me gustan más los meses de abril-mayo y septiembre-octubre. ¿Por qué? Dado que todas las vivaces estarán con hoja y son más fáciles de identificar durante el replanteo en obra. Además, son meses en que tienen un crecimiento fuerte y extienden rápido sus raíces buscando la humedad del riego por goteo.
En la imagen superior vemos un proyecto de Ábaton cuya plantación se realizó en octubre y, en junio, ya lucía verde y florido.
Leer más: Descubre todos los cuidados que debes darle a tu jardín en otoño
¿Alguna época que es mejor evitar?
Ambos expertos coinciden en que hay que evitar plantar en verano. Desde la empresa barcelonesa Simbiosi Estudi destacan que “para nosotros que trabajamos normalmente en un contexto mediterráneo, el factor limitante es el calor veraniego. Para garantizar la correcta evolución de las diferentes especies a implantar, aconsejamos evitar estos trabajos durante los meses de junio, julio y agosto”. En el mismo sentido, la empresa madrileña Ábaton comenta: “Hemos plantado varios jardines durante el verano, pero no es una estación recomendada porque habrá muchas bajas por el fuerte calor”.
Leer más: Consejos útiles para proteger tus plantas de exterior del calor en verano
¿Cómo lucirá el jardín a los 3 meses?
“Si la fecha de plantación es marzo-abril, en ese periodo de tres meses gran parte de las vivaces estarán en plena floración y se verá un jardín muy bonito. Los arbustos y árboles, con un crecimiento más lento, y algunas vivaces que empiezan a florecer a partir del segundo año, tardarán más meses (incluso años) en dar el aspecto buscado”, explica Fernando.
La imagen corresponde a un proyecto de paisajismo de Simbiosi Estudi y, en este caso, habían transcurrido dos meses desde la plantación.
Leer más: 10 preguntas que te haría un paisajista antes de diseñar el jardín
¿Qué aspecto tendrá el jardín al medio año?
De nuevo la respuesta viene condicionada por el periodo de la plantación. En esta ocasión nos responde Jordi: “Si realizamos la plantación a inicios de otoño, aún estaremos a tiempo de observar el crecimiento de nuevos brotes, siempre dependiendo de las especies escogidas, claro está, si nos decantamos por caducas, hasta la primavera siguiente no veremos ningún signo de vida a primera vista. Con la selección vegetal que empleamos normalmente para nuestros proyectos, perennes nativas junto a suculentas y algunas especies de carácter tropical, estamos acostumbrados a vislumbrar un crecimiento tímido durante los primeros meses, a la espera de la llegada de la primavera, cuando, si todo ha ido correctamente, el desarrollo será significativo”.
Los exteriores de la propuesta fueron realizados por Dom Arquitectura en colaboración con Singular Jardinería.
Leer más: ¿Quieres decorar con suculentas y que sea todo un éxito?
¿12 meses da tiempo para…?
“Después del primer año, veremos cómo los volúmenes de las diferentes especies empiezan a complementarse, a reclamar los espacios que hemos proyectado para ellos, y con un poco de voluntad y confianza, comenzaremos a imaginarnos el futuro jardín”, comentan desde Simbiosi Estudi.
El paisajista de Ábaton agrega: “Verdaderamente me gusta más el aspecto del jardín del segundo año, en el que ya van cogiendo su porte definitivo".
Leer más: Cómo diseñar un jardín en un terreno con pendiente
¿Cuándo podemos esperar que el jardín luzca en todo su esplendor?
Jordi coincide con Fernando y opina que a partir del segundo año podremos entender la idea del diseño propuesto por el equipo de paisajistas. Pero también nos advierte que “teniendo en cuenta que un jardín nunca está finalizado, ya que se mantiene siempre en constante evolución, en la mayoría de nuestros trabajos, después de las dos primaveras iniciales deberemos observar un jardín mínimamente establecido y estéticamente atractivo”.
En esos 24 meses, los diversos cuerpos vegetales que conforman el conjunto habrán tomado su espacio y combinarán armoniosamente unos con otros. Entonces, “será el momento de evaluar si la planificación se ha cumplido y realizar ajustes si fuera necesario. Los vegetales, como seres vivos que son, siempre deparan sorpresas y escapan de las más estudiadas previsiones”, continúa el director creativo de Simbiosi Estudi.
El experto de Ábaton también entiende el jardín como un proyecto vivo que atravesará muchas fases. Y detalla: “Las vivaces de crecimiento más rápido se harán con el protagonismo del jardín durante el primer año, pero hasta el tercer y cuarto año las plantas de crecimiento más lento irán aumentando su tamaño y vigor y el aspecto del primer año irá cambiando. Los árboles y arbustos, inicialmente de muy poco porte, irán ganando altura para ocupar su sitio previsto en el paisaje”.
Leer más: Una guía con el calendario de siembra de árboles frutales para tu jardín
¿Podemos acelerar estos tiempos?
Una forma sería, por ejemplo, emplear especies vegetales más crecidas. Aunque desde Ábaton consideran que no merece la pena. “La paciencia en jardinería es muy importante y poner especies de vivaces más crecidas hará que el presupuesto del proyecto se encarezca mucho. Mientras que, si se plantan pequeñas, serán baratas y a los pocos meses estarán bien crecidas”.
Y prosiguen: “Tampoco ayuda poner más densidad de plantación para que el jardín se vea más bonito en el momento inicial, porque cada planta necesita su espacio para crecer en plenitud. El espaciado correcto es aún más importante si se trabaja en diseños matriciales en los que se van entremezclando las especies porque las más vigorosas ahogarán a las de crecimiento más lento, haciendo que desaparezcan y perdiendo así el diseño perseguido”.
Leer más: Cómo poner en forma el jardín y convertirlo (de nuevo) en tu estancia preferida de la casa
¿Qué tiempo de crecimiento tienen los árboles?
Estos varían muchísimo, los hay de crecimiento rápido y también otros de crecimiento lento. Jordi cuenta que “en Simbiosi Estudi nos gusta combinar un máximo de tres o cuatro especies para cubrir el estrato arbóreo, unificando el diseño con una selección restringida y homogénea. Como siempre, dependiendo de las particularidades de cada espacio, podemos utilizar autóctonas mediterráneas de crecimiento lento como la encina (Quercus ilex) y el olivo (Olea europaea), junto a palmeras de porte exuberante, como por ejemplo la palmera pindó (Syagrus romanzoffiana), con un desarrollo espectacular en pocos años”.
Por su parte, Fernado explica que “en los jardines que diseñamos en Ábaton los tres árboles de hoja caduca más frecuentes son Acer freemaniis (un híbrido), tilos y arces japoneses, y de hoja perenne, solemos introducir encinas y alcornoques. Con los freemanii y los arces japoneses intentamos que los otoños vibren con su rojo intenso, a distinta escala, pues los primeros alcanzan hasta los 15 metros de altura pero los arces japoneses crecen hasta 4 metros. Los tilos los utilizamos para dar sombras frescas en verano y por el olor dulce de sus flores en primavera. Por último, las encinas y alcornoques, de crecimiento mucho más lento que los freemanii, los empleamos para bloquear vistas indiscretas de vecinos”.
Leer más: Estos son los mejores árboles para decorar tu jardín