Planifica el 'office' de tu cocina para convertirlo en un espacio multifuncional

La cocina es una de las estancias que más ha evolucionado y que mayor apertura ha tenido al resto de la casa. En ella no solo se prepara la comida, sino que es el centro de la vida familiar, como en esta propuesta de HomeSense. En este nuevo papel, el ‘office’ o el comedor se convierten en el corazón del espacio, por lo que mesas, barras e islas adquieren un papel fundamental como los elementos en torno a los que gira el día a día. En ellos, tienen lugar las comidas diarias y algunas cenas con amigos, pero también son el lugar donde se teletrabaja, se hacen deberes, se ‘acompaña’ al cocinero mientras se disfruta un aperitivo o se preparan galletas los fines de semana, brindando una superficie extra llena de posibilidades.

Por eso, su elección cobra una especial relevancia y debe adaptarse tanto a los metros como al estilo como a la distribución, los hábitos y las necesidades de los moradores. ¿Te hemos convencido de su importancia? Estas ideas de decoración te ayudarán a encontrar tu mejor opción.

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Mesas con función ‘transformer’

“Lo primero que hay que tener en cuenta al instalar una mesa en la cocina es el espacio del que disponemos y cómo está distribuida la estancia, pensando también en la apertura de las puertas de paso, las del mobiliario y las de los electrodomésticos para que no supongan un problema, choquen con las sillas…”, puntualizan desde AMC (Asociación de Mobiliario de Cocina).

Así, si la cocina es pequeña podemos elegir una mesa desplegable de pared. Estos modelos no restan espacio cuando están cerradas y, sin embargo, al abrirse ofrecen una zona de ‘office’ perfecta para el día a día. Otra opción idónea si no sobran los metros son las abatibles o extraíbles, como la Quadra Nova de Cancio, modelos que permiten aumentar su extensión y ganar espacio extra en momentos puntuales. Además, para que resulte más cómodo, algunas incorporan un pistón de gas para elevar de forma automática el ala auxiliar.

Materiales ‘top’

Por otro lado, aunque las mesas de cocina siempre deben ser firmes y resistentes, su material y altura dependerán de la utilidad que vayamos a darle. Existen numerosas posibilidades y combinaciones de materiales que se adaptan a las necesidades y estilo de cada hogar. Una de las más usadas y que mejor resultados ofrece es aquella que combina metal, madera y cristal templado. La estructura de metal aporta la seguridad que necesitamos, la tapa de madera, calidez, y el cristal la transforma en una superficie higiénica y resistente a manchas y arañazos. También están muy de actualidad, las de madera y tablero blanco, como esta de Mesinor; las superficies porcelánicas de origen 100% natural, duraderas y bellas; y las de pizarra, las preferidas por los niños, ya que se puede escribir en ellas, sacando su lado más lúdico.

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Más que una mesa

No importa si se trata de una cocina XS o XL, nuestra necesidad de espacio para guardar es la misma. Los accesorios, pequeños electrodomésticos, botes de especias, cuchillos para diferentes cortes o cucharas de madera crecen sin que nos demos cuenta. Por eso, cada centímetro suma en nuestra batalla contra el desorden. Y es ahí, donde también entran en juego la versatilidad de las mesas, ya que muchas, como esta de Bailen, incluyen cajones para cubiertos y accesorios. Sin olvidar las posibilidades que ofrece la zona inferior de la isla con baldas, gavetas o armarios.

Barras: la todoterreno para cocinas pequeñas

Aunque a todas nos gustaría tener una cocina de revista con un ‘office’ con una mesa donde puedan sentarse toda la familia y los invitados, lo cierto es que la mayoría nos tenemos que contentar con una igual de bonita y práctica, pero más humilde en cuanto a dimensiones se refiere. Las barras, como la de esta propuesta de Next125, se convierten en la mejor opción para ganar una superficie de apoyo extra y dar, al mismo tiempo, un aire informal y moderno a tu cocina.

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Las mil y una posibilidades de las barras

Dime cómo es tu cocina y te diré qué barra es la indicada. Así, las barras fijas adosadas a la pared o a la encimera, como en esta propuesta de Rehau, no solo crean sensación de amplitud, sino que, además, ofrecen mayor superficie de apoyo. En espacios mini, las barras móviles son la solución. Se despliegan al ser utilizadas y se recogen cuando no hacen falta, quedando perfectamente acopladas a la encimera. Como llevan ruedas son fáciles de ‘montar’, mientras que su mecanismo de bloqueo evita que se muevan durante su utilización. Por cierto, junto a la ventana ofrecen mejores vistas. 

Islas: la superficie más camaleónica

Estamos ante la pieza estrella de las cocinas actuales, aquella que es capaz de integrar la cocina en el resto de la casa de forma natural y sin sobresaltos decorativos, como en este ambiente de Hi-Macs. Además de albergar la zona de cocción, el fregadero o módulos de almacenaje, puede incorporar también una superficie extra, que actúe como barra al mismo tiempo. A la hora de decidir en qué lado de la isla colocas la barra, debes tener en cuenta los elementos que hay alrededor, para que no moleste y permita el paso. Recuerda que las voladas resultan más ligeras.

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Sillas y taburetes: los ‘partenaires’

Tan importantes como la mesa, la barra o la isla son las sillas, sillones o taburetes (estos de Atmosphera) que las acompañan. Es más, desde AMC señalan que “no son solo complementos, sino que se trata de piezas indispensables para comer o trabajar a gusto y disfrutar al 100% del tiempo de calidad que pasamos en la cocina. Además, cumplen con una importante función decorativa”.

Medidas a tener en cuenta

A la hora de escoger el asiento adecuado, desde AMC recomiendan comprobar las medidas. Así, la altura ideal de una silla o sillón debe ser de 45-50 cm desde la superficie del asiento y el suelo. Además, entre el asiento y la mesa debe haber una distancia de 25-30 cm. Mientras que, en el caso de los taburetes, si la barra está situada a 90 cm, la altura ideal son 65 cm, mientras que para las más altas (105 cm), mejor de 75 cm. También hay modelos regulables en altura o ‘taburetes de gas', como este de Mesinor.

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Asientos tan bonitos como prácticos

Dada la apertura de la cocina al resto de la casa, la estética del mobiliario también está condicionada por esta tendencia de decoración. Además, sillas y taburetes (mejor con respaldo) se han convertido en una de las formas más sencillas de personalizar y modernizar el ambiente. Hay diseños para todos los gustos y todos los estilos, desde clásicos y formales, como estos de Cult Furniture, hasta modernos y originales. Sin olvidar, que están disponibles en una gran variedad de materiales y colores y que los nuevos tratamientos higiénicos les hacen más eficaces contra bacterias y manchas, ya que cubren la fibra de la tela con una capa invisible que impide que las manchas penetren en el tejido.